Capítulo 1
A veces cierro los ojos tratando de evocar los recuerdos pasados, aquellos que a veces son como brumas en mi memoria, a veces son frases inentendibles y en otras miro su sonrisa
Pequeña y frágil, aún sigo teniendo aquellos recuerdos, en donde deseaba algo que no podía tener, un beso, un abrazo, palabras dulces
Y aunque fue por poco tiempo, deseaba que ella se quedara, que me mirara solo a mí, sus palabras, sus sonrisas, sus anhelos... en ese entonces era demasiado infantil sin ver lo evidente que yacía frente a mis ojos, ella no deseaba seguir respirando, ella ya no deseaba la vida tanto como yo, ella estaba rota con ganas de dejar el mundo
A veces recuerdo mis días en aquel hospital, donde sentía que era el ser más desafortunado del mundo por estar privada en cuatro paredes, por no poder moverme demasiado o hacer sobre esfuerzos, no correr o tener emociones fuertes
Cuando la vi ella estaba rodeada de todos los internos y aun así mantenía la boca cerrada, todos empezaron a dejarla solo en la pared cerca de la mesa llena de dulces que estaban medidos y sin demasiados persevantes
Ella era como un sol brumoso lleno de dolor que navegaba en aguas turbulentas, un barco frágil hecho de maderas ya podridas, o llenas de agujeros hechas por hormigas
Ella estaba navegando rota y perdida, sus ojos tenían un brillo opaco, una sonrisa baja se mantenía siempre en su cara, palabras suaves para fingir delante de la psicóloga
De ella me enamore y aun a mis treinta años, aun puedo sentir su última despedida, sus sueños que ya estaban perdidos, la emoción de dejar este mundo, al ser joven no entendía por qué me dejo, pero al leer aquel recuerdo es como si ella dijera que la vida no era para ella, ella estaba pidiendo ayuda un último remanente de luz en aquel mundo fangoso en el que se hallaba
Mis manos decoradas con moratones mis muslos con rasguños
Mi mente sigue borrosa, no cree que aquello haya sucedido, supongo que ella le dijo a mi esposa que vine ayer
Sus gritos, los reclamos, los golpes a donde se fue las caricias, las salidas al sol los paseos nocturnos, donde quedo el maldito amor que me profesaba
Por qué decirme aquello, soy su esposa... su esposa aquella que es fácilmente engañada, a la que miente, a la que ahora golpea, que insulta
La que engaña, la que cree que está bien pero no estoy bien, nada está bien, mi gato aquel que encontré en la calle, aquel que tiene los ojos amarillos y que su pelaje parece dorado con naranja oscuro el que se frota en mis brazos y lame mi cara con su lengüita áspera
- verdad que... ya ni es un juego en son de broma - empecé a pasar mis dedos por debajo de su carita, justo cuando empezó a ronronear -quieres comida y leche
Mi cara debe parecer un asco, con aquellas líneas de lágrimas, con legañas que se formaron después del llanto, las marcas rojas y los tonos violáceos en mi cuello la sangre seca en mis labios
El piso esta helado y ni recuerdo cómo es que no pude ir a mi sillón, todo está pasando tan rápido
Él come, se oyen los crujidos de sus dientes al comer sus croquetas, yo apenas puedo pasar la comida, el nudo en mi garganta es más grande, las lágrimas corren
- te dije que no quería que vinieras -con un dedo golpeo mi cabeza - acaso eres estúpida que no entiendes el idioma humano
Mi mano dolía, todo giraba
- yo te dije que iría al hospital - respondí en un susurro
- oh... lo había olvidado, quieres hacerte la enferma - me golpeo hasta tirarme al suelo, puso sus manos en mi cuello haciendo una presión que desconocía
Esta persona encima mío no era mi esposa, mi amada a la que amo con todo mi corazón, la que me ahorca no lo es la que sujeta mis muslos con fuerza hasta clavar sus uñas, la que me golpea en el ojo derecho
- ahora lo sabes - sonrió con una frialdad que hace años no veía - no te amo
Nunca lo hice
Jamás te amé
Fingí todo el tiempo
- tu... duele - solloce con debilidad, con el dolor latente en muchas partes de mi cuerpo
- yo - solo se paró y salió corriendo azotando la puerta
-por qué paso esto, le di todo lo que quería, lo que pensé que necesitaba lo que yo quería para mí - susurre llorando grite con dolor, con ese dolor en donde no sabía que me dolía mas o su traición o los golpes
Mi bebe estaba durmiendo en aquel sillón, jamás duerme en su cama, me quede llorando, gritando, susurrando y negándome que todo era un simple juego del universo
Que más quería quitarme, ahora parecía que me había quitado todo sentía todo destruyéndose
- no hay más tiempo - las palabras del doctor parecían un juego muy perturbador y doloroso
Mis resultados cayeron por todo el suelo, aquellos dulces que compre para ella
Mis dedos se detuvieron después de recordar todo lo que paso anoche, el manuscrito que debo dar para hoy está demasiado retrasado
Mis dedos volvieron a su trabajo y empecé a redactar aquel libro, ese que pensé tendría un final feliz que yo pensaba en mi vida
Aquel libro donde salí de la depresión gracias a mi hijo hermoso que ahora está dormitando en mi regazo
Nunca fui buena escribiendo, pero ella me dio una esperanza de escribir este libro, ella dijo que me daría el amor suficiente y acabaríamos con felicidad y más gatitos
Y donde yo podría visitar aquella tumba, en donde no me rompería a llorar con todas las fuerzas
Mi última sección psicológica iba a ser mañana, pero yo creo que también serán los últimos días fingiendo sonreír
Ya no sé si iba a seguir respirando
aire o ahogándome con el dolor