-Y entonces en Bakersfield fue dónde los encontré-
-Sabes? Nunca imaginé un comienzo tan cabrón...y ese golpe de bicicleta hubiera querido haberlo visto- dijo Ed mientras sonreía.
Solo te ríes...es el tipo más agradable que haya conocido. Su sentido del humor siempre me hace sentir mejor considerando la situación.
-Según el mapa...es, a la izquierda, y unos 5 km después, a la derecha- indica Ed.
-Eso espero, ya son varias días que seguimos una carretera vacía.- dices mientras te acomodas el cabello.
-Y el cabello te lo pintaste o es natural?- comenta Nick.
-Supongo que es natural...- respondes.
-Se hace de noche, que tal si descansamos esta noche y mañana seguimos, es mejor llegar de día, creeme.- alerta Ed.
Estás de acuerdo y decides estacionarte. Cierras las ventas y puertas con los refuerzos de metal, sin ninguna abertura por donde salir la luz.
Prendes una linterna de mano y la cuelgas en el centro del interior del transporte que funciona como foco para iluminar por dentro.
Todos empezaron a comer. Te queda media bolsa de gomitas pero no las comes talvez sean las últimas en el mundo y decides guardarlas.
A mitad de la madrugada te despierta un movimiento fuerte del transporte.
-Qué...qué fue eso?- preguntas asustado(a).
-Shhhh! Son esas cosas...- susurra Ed. -No hagan ruido. El perro! Que no ladre!-
-Tranquilo, el no ladra- comentas mientras lo abrazas y acaricias su cabeza.
-Vamos a morir- dice Nick.
-Nadie morirá si nadie hace ruido- susurra Ed.
El transporte se sigue moviendo como si lo estuvieran empujando desde afuera.
Unos minutos después todo se calma. Y temerosamente todos se regresan a dormir.
*Al día siguiente*
-Qué fue lo de ayer?- preguntas.
-No hay un nombre para ellos, solo sé, que si te escuchan, o te huelen o te ven... estás muerto...- respondió Ed.
-Pero, porque no nos olieron anoche?- preguntas mientras aceleras.
-No lo sé...- dice Ed.
Te fuiste pensando todo el camino en eso hasta que llegaron a Portland.
-No hay pase, seguiremos caminando- dice Ed.
Bien, suena coherente...vamos...
*Continúa en el página 31*