CAPÍTULO 2

Bogota, Colombia 

ANTONY 

Ya habían pasado varios días desde el nacimiento de mi pequeño Andrey y estaba en casa cuidándolo mientras mi mamá salía a comprar las cosas que necesitaríamos para la cena, íbamos a celebrar el aniversario del cambio de mi papá y se tenía que hacer a lo grande, mi madre no dejó que fuera yo a comprar las cosas porque, según ella, habían cosas que a él le gustaban y yo no conocía, asumo que tiene razón porque ellos llevaban años de conocerse antes que yo naciera. 

Tuve que bañar al pequeño, darle una compota porque tenia hambre y estuve jugando con él cuando recibí una llamada al celular 

"Hola, ¿quien habla?" Pregunté rápidamente 

"Madre, ¿Qué ha ocurrido?" Ella estaba muy alterada, suponía un ataque de ansiedad en la calle

"¿donde estás?" Me dio una breve descripción del sitio donde estaba y me dirigí de inmediato hacia allá. 

Tomé a Andrey en brazos y salí en busca de ella, llevando conmigo el frasco de sus pastillas y una botella del agua saborizada que tanto le gustaba, cuando la encontré estaba bañada en sudor, había mucha gente a su alrededor y el ambiente estaba realmente tenso. Le brinde las pastillas y ella se las tomó en un sólo sorbo. 

"Madre, ¿que pasó?" Le pregunté cuando ya se había calmado 

"Un hombre empezó a gritar que estaba de afán y yo no encontraba la cartera para pagar las cosas, decía cosas muy feas y yo simplemente tuve un ataque de ansiedad" me dijo en un tono desganado 

"Tranquila mamá, ¿encontraste el dinero para pagar?" Ella negó con su cabeza, y me dispuse a buscar su cartera, sabía que la llevaba y que al ver a ese hombre en ese estado No se había fijado bien. Fui y pagué la cuenta y luego nos dirigimos a casa. 

Mi padre ya había llegado y nos miró confundido, le comenté lo que había pasado y, en muchos años, pude ver como mi padre la abrazaba con tanta ternura que sentí que era lo correcto. 

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Mi madre preparó el platillo favorito de él, un Shop-suey de carne, junto con un vino tinto que era el que les gustaba a ambos. Yo iba preparando la mesa con unas velas y un par de copas que serian para ellos, Andrey y yo tomaríamos un jugo de naranja ya que el vino no es una bebida que me guste. También ayudé a mamá para preparar la habitación en donde ellos dormirían juntos otra vez y yo esa noche dormiría con el pequeño consentido.

Al momento de sentarnos en la mesa, mamá brindó por el amor que había vuelto a unirlos, por la familia y por la felicidad. Mi padre, que no había querido estar en casa toda la tarde, dijo que tenía una sorpresa para todos

"Cuando decidí ir a las terapias, supe que no era suficiente.." se levantó de la mesa y se perdió entre las habitaciones, quedamos asombrados cuando al volver tenía en sus brazos una pequeña caja que tenia pintado un "Amo a mi familia" con colores brillantes.

"He tardado un poco en entregar éste regalo, pero quiero que sepan que no fue porque no quisiera, sino que quería fuera en el momento perfecto, como lo es éste" abrió la caja y sacó de allí un libro, parecía un diario "éste es para Antony, no lo empecé a escribir cuando las terapias sino mucho antes, espero que no cometas los mismos errores que yo" fui Hasta su regazo y lo abracé tan fuerte como pude. 

"Para ti,  mi querida Isabel..." sacó un álbum de fotos en donde pudimos ver que Muchas de ellas fueron tomadas mientras mi mamá dormía, nadie sabe en qué momento se tomaron, fotos hermosas de antes y después de la violencia que nos agobiaba en casa "tu belleza es como si fueras un ángel, una debilidad ante mis manos fue el querer destruir la divinidad de tu ser Sin antes consultar si pretendías conservarla o no".

 Luego sacó una bolsa en donde se encontraban 2 maletines señoriteros, uno de color salmón y otro rojo escarlata, sus colores favoritos. Le pasó primero el maletín color salmón que era pequeño "éste es pequeño, porque simboliza la grandeza que puedes llegar a ser frente a un hombre que se siente vulnerable y acabado, y éste otro..." sacó el maletín rojo "simboliza el amor que ha crecido entre nosotros desde el primer día que nos conocimos" mi madre lloraba, yo sabia cuanto había esperado por que mi papá le dijera tantas cosas como esas.

"Para terminar con los regalos que he guardado para ti..." sacó una cámara de la caja, y me pidió que tomara un par de fotos a ellos dos "tus ojos, cariño mío,  son mi universo, no lo olvides nunca" esas palabras me conmovieron tanto que, ahí estaba yo, con los ojos lavados en llanto de felicidad. 

A Andrey mi padre le regaló un par de carritos a control remoto en el que podría ir montado. Fue una velada intensa y la alegría flotaba en el aire. Después de un rato de haber visto películas y que nos tomáramos tantas fotos como fuera posible, nos fuimos a dormir. 

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Al día siguiente, se sentía la casa con un ambiente maravilloso, mis padres salieron abrazados del cuarto y yo me levanté con unas ojeras increíbles,  Andrey había decidido jugar toda la noche y no dejarme dormir. 

Una vez más estaba convencido que tenia la mejor familia del mundo. Ojalá algún día encuentre una chica con el "universo en sus ojos" como  lo dijo mi papá anoche, estaba perdidamente enamorado.

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Ando con mucha inspiración, que tal les va pareciendo? 

Dejamos Hasta aquí por el día de hoy, y mañana nuevo capítulo. 

Un abrazo enorme para todos