Capítulo 34: Origen de la Christine Maligna

Ubicación: Cementerio Municipal de San Pedro Tlaquepaque, Guadalajara, México.

Horario: Mismo tiempo en que todos los dioses se organizan para enfrentar a Christine.

Un portal se abre repentinamente, dentro del cementerio Municipal de San Pedro Tlaquepaque en Guadalajara. Emergiendo a través de este; Christine siendo acompañada por Noel.

Comenzando Christine a dirigir su mirada hacia sus alrededores seriamente mientras que Noel; está completamente asustado y asombrado por lo que acaba de presenciar.

Noel antes había escuchado historias de viaje a través de portales, novelas que relataban esos sueños inimaginables, pero ahora; todo se ha hecho realidad.

—Hmm, se puede sentir diferentes auras, hmm, hay varios Supremos Creadores Definitivos; cerca de aquí —informa la diosa, dirigiendo su mirada hacia la ubicación del evento—. Excelente, jejejeje.

Comenzando a avanzar, pero una voz la detiene.

—¡¿Dónde estamos?! —inquiere asustado Noel, observando las lápidas del cementerio.

—Hmm, realmente, ¿por qué lo salvé? —inquiere Christine, llamando la atención de él.

—¡Tú! —grita Noel, retrocediendo un poco de ella—. ¡¿Quién rayos eres?!

Comenzando Christine a sonreírle silenciosamente sin darse cuenta que Yahvé, aparece cerca de ellos; silenciosamente.

Ya que él acaba de emerger por medio de un portal sin la necesidad de desprender magia, realmente se aprecia que Yahvé es el dios más poderoso de todos los universos… Por ahora.

Comenzando Yahvé a acercarse lentamente hacia ellos para poder escuchar su conversación en silencio a un lado de un gran árbol.

—Hmm, ¿por qué te habré salvado? —inquiere Christine, avanzando alrededor de Noel mientras que él la observa con miedo—. Cuando te conocí, supe que eras una buena persona, todo lo que te pedía; me lo regalabas a diferencia de tus compañeros.

Comenzando Noel a tranquilizarse un poco.

—¿Quién eres?

—Vaya, vaya, hmm —responde Christine, quedándose pensando por unos momentos, observando hacia su alrededor con una sonrisa, añadiendo—. Hmm, sí. Creo que mejor te lo diré todo, ya que ellos acaban de fracasar.

«Y efectivamente, acaban de fracasar, jejeje »,suena la voz de una misteriosa mujer dentro de la mente de Christine.

Decidiendo Christine sentarse en una lápida sin darse cuenta que Yahvé, la vigila y escucha; ocultamente.

—Mira Noel, para tu información estás hablando con un extraterrestre así como ustedes nos conocen —informa Christine.

—Pero, ¿por qué eres mujer? —inquiere Noel, viéndola asombrado.

—Sí, sí. Mira. Te has ganado mi respeto, ya que siempre me trataste bien a diferencia de los otros, además de que; este planeta va a explotar dentro de poco tiempo y tú morirás, Hmm, ¿Cómo comenzaré? —Comenzando la Diosa a observar el cielo seriamente, para seguidamente; añadir—. ¡Ya sé!

Decidiendo dirigirse hacia un lado de Noel para poder contarle.

—Yo soy producto de un ritual por parte de dos criaturas bastantes poderosas, hmm, sé que a ti no te va a interesar, pero esas criaturas se llamaban: Monlix y Riusre (***). Fui creada por parte de una Suprema Creadora Definitiva bastante poderosa para cumplir con mi destino desde hace miles de años atrás, aunque en verdad; esa Suprema Creadora Definitiva; alteró el espacio tiempo así como lo hizo Tsubaki. —informa Christine, dándose cuenta que Noel no le pregunta nada mientras que sus ojos, comienzan a brillar de color morado fuertemente delante del investigador—. En el pasado, Monlix sabía que tenía que hacer un ritual con Riusre, el padre del dios de los espectros: Rudba para cumplir con nuestro destino, pero él; se rehusaba en todo momento, ya que el muy maldito era mucho más fuerte que Monlix. Siempre que Monlix trataba de cumplir con su destino, Riusre lo derrotaba fácilmente; posponiendo él mi destino.

Comenzando Yahvé a verla enojado.

—Entonces, ¿eres una alienígena? —inquiere Noel, comenzando Yahvé a lo lejos a negar con su cabeza sin intervenir.

—Hmm, veo que no está todo claro, pero seguiré contándote mi historia para que algún día sepas; con quien hablabas. El evento aun no inicia, jejeje —responde Christine, confiadamente—. Bueno, siguiendo con el tema, hace muchos años atrás; Monlix llegó a saber que Tsubaki, el Supremo Creador Definitivo del Norte estaba preparando todo para cinco chicas especiales, no sé de donde obtuvo esa información; aunque lo más probable; fue por parte de alguien bastante cercano a él. Así que decidió intervenir, ofreciéndose él como un simple ayudante con ese Supremo Creador, ya que Tsubaki; necesitaba bastante ayuda de sus siervos. El creador vio que su propuesta era buena y le encargó investigar ciertos documentos en la Gran Biblioteca espacio tiempo que él creó, información que nunca obtuvo Monlix, ya que él aprovechó ese tiempo para saber, ¿quién de esas cinco chicas especiales, iba a ser la más poderosa?

Decidiendo sonreír por unos momentos, para seguir añadiendo.

—Monlix investigó todo acerca de ellas: poder, origen, debilidades; incluso el tipo de cuerpo, padres que las engendraron, todo, pero se interesó en el poder especial que una de ellas poseía. Llegando él a la conclusión de que, solamente una chica era la más poderosa a comparación de las demás, situación en que él, decidió cancelar las investigaciones de las demás chicas para enfocarse solamente en esa chica especial, ya que no existían muchos datos acerca de la Dracónida y de la encargada de los elementos —dice Christine, quedándose callada por unos momentos—. Hubo un día en que Riusre fue a la gran biblioteca espacio tiempo para vigilar un árbol especial, una tarea difícil que después; el Supremo Creador Definitivo del Norte iba a cumplir, pero Monlix, quiso aprovechar esta oportunidad para tratar de convencer al padre del dios de los espectros. Tal como te lo mencioné antes, Riusre derrotaba a Monlix continuamente hasta que; el Supremo Creador Definitivo del Norte: Tsubaki, necesitó la información especial que le había encargado a Monlix. —Comenzando Christine a observar el suelo, seriamente—. Tsubaki envió al dios de los espectros Rudba que era el hijo de Riusre para buscar a Monlix, pero al momento de saberlo Monlix; aprovechó la oportunidad para convencer a Rudba de que necesitaba derrotar a su padre para cumplir con su tarea pendiente. Convenciendo Monlix a Rudba de una manera patética, ya que aprovechó la enemistad entre padre e hijo en ese momento. Poco después, Rudba derrotó a su padre, pero Monlix; aprovechó esa oportunidad para hacer el ritual con Riusre. Naciendo yo, gracias al sacrificio de ambos, pero antes de que el ritual finalizara al cien por ciento; simplemente fueron suficientes para Monlix viajar al futuro con solamente tres micro segundos, ya que el tiempo se congeló en ese lapso de tiempo.