Lunes, 21 de mayo de 2018.
M E G A N
- Quiero usar jeans, no pienso usar vestidos. No gracias, no es el estilo que mi personaje pide y necesita- decreta Debby.
Ha pasado una semana desde ese insólito empate. La próxima competencia es dentro de tres meses por eso nuestra atención ahora se centra en esta obra teatral que será toda la nota del semestre.
-Para mí es lo mismo.
No puedo permitirme sacar una mala nota ni por vestuario.
- Alguien más tiene otra sugerencia- ironiza Calvin, el director autoproclamado de nuestra obra.
Chad levanta la mano.
Calvin lo interrumpe- en mi bolso están las galletas.
Chad satisfecho con esa respuesta va a buscar aquellas galletas.
- La obra es sobre dos chicos deportistas que se aman, pero no pueden estar juntos por cosas externas a ellos- comunica Calvin
-Yo pensé que haríamos Romeo y Juliano- interrumpió Adrien.
-El profesor especifico que no podríamos hacer eso. Este es el libreto- nos da el guion que antes de darle una ojeada nos arrebata- haremos escenografía y vestuario, después leerán el guion.
-Recuérdame porque lo dejamos ser el líder- susurra Michael.
-Porque somos poco creativos y él se ofreció.
-Yo soy el protagonista- establece Calvin y nadie se opone pues él es el que más tiene habilidades artísticas de todos nosotros. - Adrien será el otro protagonista, Deb será la amiga consejera y M & M serán la pareja. Chad será el falso antagonista.
Calvin ha insistido en decirnos así, pues él está seguro de que tendremos "algo.”
Que perspicaz reflexione para mí
- ¿Por qué fago? – cuestiona Chad comiendo las galletas.
-Ya verás- responde su gemelo con un brillo en sus ojos, esto de hacer una obra teatral le encanta.
- Nos besaremos apasionadamente- Adrien alza sus cejas pícaramente. - Siempre supe que te gustaba.
-Noup en realidad Michael es más mi tipo por eso él no es el protagonista, besarlo a él me pondría nervioso- contradice Calvin, Michael le guiña un ojo pensando que es una broma.
Aquello es verdad. Calvin lo confesó en la pijamada.
[- ¿Está dormida?
Me asomo para confirmarlo o negarlo. Un sonido grave lo confirma. Calvin y yo nos reímos en silencio por la orquesta de ronquidos.
- ¿Puedo confesarte algo? - habla dejando de reír.
-Solo si yo te confieso algo después.
Quiero contarle sobre lo que tengo con Michael. Soy buena guardando secretos, es algo que he perfeccionado a lo largo de mi vida. Lo que está pasando con Michael es complicado y haber decidido no contarle a nadie está carcomiéndome. Es un secreto que para saber si vale la pena guardar debo contárselo a alguien.
-Sacas mi parte bisexual- ríe otra vez mostrando que ya está cansado.
- ¿Era solo eso? - sé que hay algo más.
- No había conocido esa parte narcisista de ti- murmura sorprendido.
-Calvin.
-Lo siento, sorry. La confesión es que me gustó Michael.
No hablé por un momento meditando lo que acaba de decir. Aceptando que si le digo mi secreto a alguien no será a él.
- A mí también- decido confiarles la verdad a medias.
- Tenemos buen gusto- me guiña un ojo haciendo que la tensión del ambiente desaparezca.
-Supongo.
-A mí ya no me gusta, es más como mi primer crush, siempre voy a tener esa atracción hacia él.
- ¿Y quién te gusta ahora? – indago con curiosidad por la vida amorosa de mi amigo.
-No te diré- niega con secretismo.
- No me digas, yo no te diré lo mío-él no se queja y lentamente el sueño viene a mí.]
Michael le dedica una sonrisa de superioridad Adrien para luego empezar a discutir el vestuario y escenografía de la obra.
Los entrenamientos siguen. Michael y yo nos vemos más seguido. Cada vez conocemos más y más del otro. Aun así, ningunos de los dos se atreve a hablar de su pasado. Ninguno de los dos se atreve a preguntar sobre nuestra relación. No queremos enfrentar nuestros sentimientos.
Pasar noches en la madrugada con él empieza hacerse una costumbre.
- ¿Crees que tenemos posibilidades de ganar la competencia?
Michael está sentado en la esquina de la cama, yo estoy acostada en esta.
-Se que van a ganar- me incorporo para mirarlo.
- ¿La competencia de zona?
-La estatal y luego la nacional.
-Eres decidida y confiada cuando se trata de otras personas, pero cuando se trata de ti, esa faceta tuya se oculta- observó.
- Tu eres más sincero conmigo que con otras personas, mucho más sincero.
- Contigo simplemente no me contengo.
-Gracias, supongo
-No sabía cómo describirte, sencillamente no conseguía la palabra. Decidí buscar palabras y palabras hasta llegar a la palabra con la cual pudiera describirte...
-Y no la encontraste porque soy indescriptible-lo interrumpo.
Ojalá algún día pueda decir eso y de verdad sentirlo, sentir que soy indescriptible. Poder ignorar todos los adjetivos negativos que saltan en mi mente cada vez que pienso en describirme.
-No, Megan no, tú no eres indescriptible, eres inefable.
-No sé qué significa eso- confieso.
- Lo sé.
-Me estás haciendo sentir como una tonta.
- ¿Yo te hago sentir tonta? - se burla y yo lo empujo.
Debo arrepentirme enseguida al sentir sus manos pasando por todo mi abdomen haciéndome cosquillas.
Rio fuerte y rápidamente o astutamente muerdo mi mano para acallar mi risa.
-Para, Michael, Para. - Él ríe sin hacerme caso.
Resignada a que no iba a escuchar dirijo mi mano derecha a su seno carotídeo. No hago presión, mi extraño movimiento lo hace encarnar una ceja.
- ¿Qué intentas hacer Meg?
-No intento hacer nada letal- sus ojos se abren con cautela. - Fui o soy una boxeadora, pero lo que no sabes es que gracias a mi padre también tome clases de artes marciales.
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Editado: 22.12.2020