Capitulo 5: Persecusión

Nota: la escritura en cursiva es para indicar pensamientos o cuando se recupera la consciencia y las palabras resaltadas en negro combinado con cursiva es para recrear los recuerdos de nuestra protagonista, aclarado esto, disfruten de la lectura :)

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Conforme caía al vació pude escuchar a Hesper y a otros gritar mi nombre mientras era devorada por la infinita oscuridad.

Sentí que flotaba en el vacío eterno y frío alejándome del mundo que siempre era acompañado de desesperación y dolor. Quizás podría quedarme aquí...si, de esa manera no tendría que preocuparme por ser cazada, incluso conseguiría olvidar ese sufrimiento cuando ellos llegaron a mi hogar.

Podría haberme quedado así, por siempre.

Despierta

De pronto mis labios fueron envueltos por una extraña calidez que me alejaba cada vez mas de esa vana penumbra introduciéndome de vuelta a la realidad del mundo.

Abrí mis ojos siendo invadida por el fuerte destello del sol parpadee continuamente para acostumbrarme a la luz pero esta fue repentinamente cegada por una silueta que se cernía sobre mi cuerpo acercándose lentamente...

-¿Te encuentras bien?- pregunto el extraño posando su mano en la mejilla de Lyoth

Cuando su piel entro en contacto la chica intento sorprenderlo propinándole una bofetada pero antes de que pudiese reaccionar el antebrazo del joven cubrió el suyo como si se tratase de una simple brisa pero fue seguida de un fuerte dolor cuando el cuerpo de Lyoth fue girado bruscamente dejándola de cara al suelo con su brazo doblado siendo sujetada de ambas muñecas. La había sometido.

-¡Suéltame!-ordeno retorciéndose inútilmente bajo el peso de su cuerpo intentando mirar fijamente a su enemigo pero los rayos del sol solo mostraban una borrosa sombra sobre ella.

De pronto el extraño dejo de luchar y cubrió su boca para hacerla callar lo cual solo provoco que Lyoth continuara con su forcejeo inclusive intento morderlo con la vana esperanza de poder golpear a su captor pero el instinto de la joven le advirtió que había un peligro mas importante del que preocuparse y al parecer el desconocido también sospechaba de aquella pronta calma, había algo ahí... ellos se estaban acercando pero Lyoth no se imagino cuanto hasta que vio una ventana de oportunidad para escapar.

Propino un fuerte cabezazo al desconocido provocando que la soltase de su agarre y en un veloz movimiento se impulso con sus extremidades para tirarlo de espalda la chica sintió sus huesos crujir ante el impacto y como su contrincante había expulsado el aire de sus pulmones por el ataque sorpresa.

Rápidamente Lyoth se giro sobre el cuerpo del extraño aprisionando sus muñecas por encima de su cabeza dejando que todo el peso de mi persona le impidiera moverse pero ante la diferencia considerable de musculatura ella sabia que no tendría muchas posibilidades de someterlo mas que unos segundos.

Aplico toda la fuerza de las que sus manos fueron capaces pero no percibió resistencia alguna salvo por aquella oscura y ausente mirada...era uno de ellos

De pronto el mundo pareció ir mas lento; el sonido del viento y las hojas de los arboles ahora era un eco lejano dando paso únicamente al martilleo del corazón de la joven, aflojo el agarre de las muñecas de su prisionero sintiendo como su cuerpo flotaba lejos del suyo. No, no estaba levitando, se estaba levantando para huir pero la mano del chico la detuvo provocándole un estremecimiento.

Lyoth forcejeo un poco pero él no parecía dispuesto a soltarla, esos malditos ojos negros no dejaban de mirarle mientras sus labios se acercaban a los de ella.

-¡Por aquí!-grito alguien

La joven salió de su extraño trance y propino una fuerte patada al pecho del extraño y halo su mano para liberarse pero debido a la fuerza de su forcejo Lyoth cayo sobre su espalda e igual que un animal acorralado comenzó a retroceder apoyándose con sus codos procurando no perder de vista al extraño depredador, quien por su parte se había sentado sobre la hierba fresca aun estirando su mano como si le rogase que se acercara de nuevo.

El sonido de las pisadas iba en aumento, Lyoth continuo retrocediendo un par de metros mas hasta que sus piernas recobraron la suficiente fuerza para levantarse y correr hacia la oscuridad del bosque.

-¡¿Qué diablos acaba de pasar?!-se repetía a si misma abriéndose paso entre los arbustos y chocaba con algunas ramas bajas.

Pero no había tiempo para preguntas debía alejarse lo mas posible de ese lugar su instinto de autopreservación le gritaba que corriera y no se detuviera sin importar nada, eso le había ayudado en el pasado ¿pero seguiría siendo efectivo? ¡debía serlo! así sobrevivió su pueblo durante todos esos años, lo único que podría hacer seria adaptarse al nuevo entorno hasta encontrar un nuevo portal para escapar.

Era cerca de medio día, Lyoth sentía como sus piernas ardían cual brazas encendidas pese a que ya no percibía el peligro su cuerpo continuaba produciendo adrenalina quemándole por dentro pues cada bocanada de aire que tomaba era como inhalar fuego, su corazón latía tan fuerte que durante un segundo pensó que su pecho explotaría por el inmenso bombeo de sangre.