Desde que tengo memoria me han gustado los bosques, he tenido la impresión que en cada bosque siempre se esconde una historia jamás contada o misterios nunca resueltos.
Dejo mis pensamientos a un lado cuando escucho a mi mamá llamarme.
Madre: Any ¿Escuchaste lo que te dije?
Any: no ma lo siento, ¿Que era lo que me decías?
Madre: lo que te decía era que como a ti te gustan mucho los bosques y esas cosas, convencí a tu padre de llevarte a un campamento este verano ¿Que te parece?
Any: ¡Es una broma! ¡Es la mejor noticia que me han dado!
Empecé a dar saltitos y a reír como loca en el asiento tracero del auto, ni siquiera me había dado cuenta que había despertado a mi hermano mayor Thomas.
Estaba tan entusiasmada que no podía esperar, iba a agradecerles a mis padres sobre esta gran oportunidad de conocer el bosque, pero no alcance a hacerlo.
De un momento a otro todo se oscureció a mi alrededor, solo lograba escuchar los gritos de mis padres y hermano, hasta que ya no escuche nada.
Al despertar me dolía todo el cuerpo, no recordaba lo que había pasado, y si, talvez recordaba pero eran nada más que fragmentos.
No podía escuchar nada y cuando trate de hablar para que me dieran alguna explicación de lo que había sucedido, tampoco pude hacerlo.
Empecé a asustarme mucho, hasta que pude darme cuenta que alguien había abierto la puerta y de ahi entro un doctor con una libreta en mano.
Levanto la libreta y ahí pude leer lo que está decía:
¿Cómo te encuentras?
Después de leer eso asentí con la cabeza y extendí mi mano para agarrar la libreta y escribir.
¿Que me pasa porque no logro escuchar ni hablar?
A lo que el respondió en la libreta:
Tuviste un accidente y te dañaste las cuerdas vocales al igual que tu sistema auditivo lo que significa que ya no podrás hablar ni escuchar.
solo de leer que ya no volvería a hablar ni a escuchar en toda mi vida, sentí como que si me me arrebataran una parte de mi.
Sentí mis ojos cristalizarse y seguido de eso, lágrimas resbalar por mis mejillas.
Cuando seque las lágrimas con la manga de la bata recorde a mis padres y hermano así que le pregunté al doctor por medio de la libreta:
¿Y mi familia está bien? ¿Cómo se encuentran?
El se quedó pensando por un momento si responder o no hasta que escribió:
Si, tu familia se encuentra bien
luego de eso salió de la habitación con una mirada de preocupación, solo espero que sea verdad lo que me dice.