CAPÍTULO 10

Por fin Domingo, me levanto, ya es de mañana, alcanzo mi celular que está en mi mesita de noche y veo la hora, son las 11:00 am, hoy día no tengo Universidad, los Domingos son días tranquilos y aburridos a la vez, así que me levanto, desayuno y me dedico a leer el libro de Anatomía, me paso todo el día en mi habitación leyendo.

El día de ayer fue lo máximo con mi mejor amiga Carola, una buena tarde y noche, la pasamos riéndonos todo el rato y peleándonos por el protagonista de la historia, Peter Kawalsqui, ese chico guapísimo que se enamora de Lara Jean, la chica de las cartas.

Pasan las horas y cuando estoy a punto de terminar mi lectura suena mi celular que lo deje cargando en mi mesita de noche, voy a por el y veo que es mi hermana Lindsay y presiono el botón de contestar y digo:

• Hola, que paso Lind?
• Aly, ayuda a Yared con las tareas que le han dejado, yo estoy en el trabajo, llego hasta la noche
• Si no te preocupes, he ido a su cuarto y sigue durmiendo, ahorita lo levanto.
• Ok Aly, me tengo que ir, cuídate
• Adiós hermanita, cuídate.

Y ella es la que cuelga primero, luego sigo leyendo mi libro que ya estoy casi por terminarlo.

Después de unos minutos, cuando estoy a punto de pararme de la cama para ir a levantar a mi hermano, justo entra el a mi habitación, noto que recién se ha levantado y me pregunta:

• Aly tengo hambre, ya me lave mis dientes.
• Muy Bien, ahorita te hago tu desayuno, vamos a la planta de abajo.  Bajamos las escaleras y yo entro a la cocina, Yared se ha ido a ver televisión.

Cuando le termino de servir su yogurt con cereales, se lo llevo a la sala y le digo.

• Yared me avisas cuando termines para ayudarte con tus tareas, si?
• Si Aly.
• Bien

Y salgo de la sala, subo a mi habitación y me pongo a repasar el Libro que ya lo he terminado de leer, cuando termino, agarro mi celular y entro a mi Instagram.

Luego tocan la puerta y digo:

• Si pasa. Es Yared y me dice alegremente:
• Aly ya termine todo, ahora quiero hacer mis tareas.

Yo le sonrío, mi hermano es bien alegre pero a la vez llorón, de todas maneras lo quiero bastante, aunque a veces peleemos.

Bajamos hacia la sala y veo que en la mesa están sus cuadernos y colores, eso me saca una sonrisa.

• Muy Bien, ahora si empecemos. Se sienta y yo me pongo a su lado.