—¡Dios! Pero que hermosa estrella viene hacia mi.
Charlotte ríe al ver que su padre se cubre los ojos al exagerar cómo si de verdad ella brillara.
—¿Me veo bonita? Nana dice que los lazos están de moda, papi.
Roderick asiente.
—Luces preciosa, sin duda vas a llamar mucho la atención de…—Lo pensó por un momento—…mm… ¿Y si lo quitamos? Luces igual de linda.
Charlotte niega.
—¡No papi!
Roderick se arrodilla hasta llegar a ella.
—Será tu primer día, si alguien te intimida o molesta dímelo, —Su mirada se endureció—me encargaré de ellos personalmente.
Charlotte niega.
—Estaré bien, —Le dio palmadas en la cabeza— tranquilo, sé un buen papi y ve a trabajar tranquilo.
Roderick niega.
—Tú madre y yo iremos a llevarte personalmente.
Eso no iba con el itinerario de Charlotte ya que era el Chofer quién hacía eso pero en esta ocasión fueron sus padres quienes la acompañaron. La más prestigiosa escuela nombrada “Lucian”. En el primer día, se requerían a los padres para que acompañen a sus hijos, pensó que haría este recorrido sola pero se sintió bien al saber que sus padres estarían con ella.
Al bajar del auto muchos padres de familia no dejaban de ver a la prestigiosa familia Heinrich reunida. Lo que más les sorprendía es no ver a Cecilia con ropa extravagante o seductora.
—Por ahora veo que todo va bien, —Alegó Roderick cuando visitaban las instalaciones, guiados personalmente por la misma directora.
—Le aseguro que cuenta con la mejor seguridad y protección a los estudiantes.
—¡Charlotte!
El grito de Hana alertó a padre e hija.
Oh, no—Estaba escrito en la cara de ambos.
La pelirroja estaba feliz de por fin ver a Lottie pero el más emocionado era su hermano. No lo demostró pero en sus ojos era claro al solo ver a la pequeña Rubia.
—¡Es increíble estamos en la misma escuela! ¿no es genial? En Lucian hay hasta preparatoria, estaremos mucho tiempo juntos, —La abrazó con fuerza.
Eun-ji apareció con Robert acompañando a sus hijos.
—Hana deja que respire tú amiga.
La pequeña pelirroja suelta a Charlotte quién comenzó a toser.
—Lo siento. Te extrañé mucho.
Cecilia se vio molesta al ver que su hija estaba un poco ahogada.
—Charlotte, creo que es mejor que sigamos con el recorrido.—Aconsejó su madre.
—Tú madre tiene razón, debemos saber cada detalle de Lucian, incluso los más desagradables. —miró a los ojos a Tae quien no dejaba de mirar a Charlotte.
Robert observó a su hijo y debía cumplir su promesa para ayudarlo a conquistar a Charlotte.
—Ya que nuestros hijos se conocen, ¿por qué no conocer las instalaciones juntos? —Propuso el pelirrojo.
Tae se apresuró a ir hasta charlotte y tomar sorpresivamente su mano, besó el dorado de esta haciendo que la niña sonriera. Para ella era como tener a un príncipe frente a ella, era muy tierno, a sus ojos era como un lindo hermano menor.
—Serás mi compañera y estoy feliz por eso—La sonrisa de Tae hizo que el corazón de Charlotte se acelera ante su adorsbilidad.
¿Kim Tae? No suena mal como futura pareja para Charlotte.— Cecilia lo notó enseguida por eso sonrió.
—Charlotte aún es joven para esas cosas.
La niña ríe.
—Papi, no es nada de eso, Tea se refiere a que estudiaremos en el mismo salón.
Charlotte saca el carné de su cuello, donde tenía su identificación con el número de su aula y el código con el que podría retirar libros, pagaría la comida y podría ingresar a su casillero privado.
—No es cierto, tú serás mi…—la pequeña cubrió los labios del niño—¡Vamos para allá! Ese estante se ve bonito.
Cecilia notó que Eun-ji se quedó viendo unos retratos antiguos que se veían grandiosos en el pasillo de la escuela.
—¿No vendrá? Podría perderse.
Los ojos de Eun-ji delatan estaba cansada.
—Estaré bien.
Cecilia fue a su lado.
—Su rostro no dice lo mismo.
Eun-ji volteó a ver a Cecilia.
—¿Nos hemos visto antes? Yo… siento que la conozco.
Cecilia sonríe.
—He participado en muchas cosas y la familia de mi esposo tiene mucho renombre.
Eun-ji niega.
—La conozco, si mal no recuerdo…—a pesar de querer recordar fue difícil para ella.—Ah, perdón, fue impropio de mi.
Cecilia se muestra amable con Eun-ji.
—Puede que nuestros hijos sean más cercanos en el futuro,—Aseguró Cecilia al extender su mano—Cecilia Heinrich.
La hermosa mujer de cabello negro y largo, vestido negro y ojos rasgados, aceptó su mano.
—Kim Eun-ji.
Una nueva amistad entre ellas ha comenzado, es claro en los ojos de ambas que desean que su hijos formen una buena relación ha futuro.
Sus esoposos estaban siguiendo a los niños que iban guiados por la directora. Roderick estaba molesto porque Tae no soltaba la mano de su hija, mientras que Robert podía sentir la tensión con solo estar al lado del padre de Charlotte.
—Son solo niños.
—Por eso creo que es mejor esperar a que crezca para que interactúe con niños.—Dice Roderick al ver cómo Tae se sonroja al momento en el Charlotte acaricia su cabeza—Es aún una bebé.
Robert lo entiende.
—Si Hana consiguiera a alguien estaria igual pero me alegra que aún no lleguemos a ese momento. —Notó lo que dijo—Perdón, olvide que es mi hijo quien coquetea con tu hija. Lo siento.
Roderik suspira.