Dipper amaba a Mabel, después de todo lo que habían pasado justos, sus experiencias, había echo que se volvieran muy cercanos.
Dipper agradecía esto ya que los hermanos normales no se llevaban bien, e incluso llegaban a odiarse, Dipper y Mabel eran la excepción a la regla.
Después de su despedida Mabel subió a su habitación, lo primero que hizo fue envolver su cuerpo en su manta con la intención de dormir, en vez de hacer eso, mantuvo sus ojos abiertos mirando la cama de su hermano.
Mabel pensó que era algo muy extraño, en su último verano en gravity Falls ellos dos compartieron habitación, durante todos esos días habían estado durmiendo en la misma habitación y ahora ese echo se estaba repitiendo una vez más.
Los ruidos de unos pasos comenzaron a resonar en los oídos de Mabel.
Esto era una señal, Dipper estaba subiendo las escaleras, Mabel rápidamente cruzo su cuerpo de manera que su vista quedará en dirección al muro, el sonido de la puerta resonó en toda la habitación.
—¿Mabel estás dormida? —pregunto Dipper a una Mabel que no hacía ningún movimiento, esto era una clara señal que la castaña se había quedado profundamente dormida y que no debería ser molestada.
Dipper no lo entendió de esta manera, en realidad Mabel no estaba dormida, todas las cosas que pasaban por su mente hacían que tan solo el acto de cerrar los ojos y dormir fuera una tarea difícil.
La preocupación comenzó a devorar el corazón de Mabel, a pesar de que Dipper había entrado a la habitación todavía no se escuchaba el sonido del muchacho saltando sobre su cama, lo único que Mabel podía pensar era que Dipper se había quedado hay parado viéndola dormir.
Su miedo no estaba lejos de ser incorrecto, Dipper se había quedado por un momento viendo a su dormida hermana, en toda su experiencia Mabel siempre se veía muy tierna mientras dormía, ver su tranquilo y lindo rostro mientras dormía era un verdadero regalo, Dipper agradecía que este privilegio especial, ya que el era el único que lo podía disfrutar.
A la mañana siguiente Mabel despertó angustiada, no podía dejar de pensar en lo que pasó la noche anterior, toda la habitación estaba fría y la luz era muy débil, apenas estaba amaneciendo, la tenue luz de sol y la agrade le temperatura convertían esa mañana en algo muy agradable.
Al mirar a la otra cama, miró a su hermano, Dipper todavía se encontraba profundamente dormido.
Mabel no pudo recordar en qué momento ella pudo dormir, pero sintió que fue una eternidad, la noche anterior no pudo dejar de pensar que Dipper, este la estaba mirando mientras ella trataba con mucha dificultad de fingir estar dormida.
Al mirarlo era todo un desastre, su cobija estaba toda tirada, y una de sus piernas estaba fuera de su cama, ¿en verdad ese chico era su hermano? Después de ver la manera tan desastrosa en la que dormirá era difícil creer que en verdad fuera su pariente.
Eso no era lo importante, Dipper era un chico después de todo, y era normar que fuera un desastre en algunas cosas.
Hay un talento que Dipper tenía, una habilidad muy particular que Mabel agradecía. Dipper tenía el talento de consolar su corazón y sanar sus heridas.
Sus mismos padres carecían de esta habilidad, de seguro era por que sus padres no eran sus amigos y por esa razón Mabel no podía confiar completamente en ellos, pero con Dipper todo era completamente diferente.
Siempre, Mabel y Dipper han sido como mejores amigos, ellos compartían esa confianza que los padres e hijos no comparten.
Podían contarse todo, no había nada que no supieran el uno del otro.
Mabel siguió mirando a su hermano, la castaña pensó que su rostro adormilado era tan lindo que debería ser ilegal.
Mabel se acercó y suavemente acaricio la frente de su hermano, esto no era suficiente para satisfacer a Mabel, mostrar cariño con una simple caricia no era suficiente.
El corazón de Mabel se acelero mientras acercaba su rostro al de su hermano. Mabel deseaba besarlo, cuando sus labios estaban por tocarse abruptamente Mabel se detuvo.
Algo dentro de ella le impedía seguir con el acto de mostrar su afecto, Mabel recordó la verdad, ellos son hermanos y una relación entre ellos era algo que no estaba bien.
Un amor prohibido.
Más que eso, aún que Mabel tuviera fuertes sentimientos hacia su hermano esto no significaba nada, por que Mabel no conocía los sentimientos de su Dipper.
Que sentía Dipper por ella, lo más seguro era que la amaba como su hermana, amiga y como miembro de su familia.
Al parecer Mabel era la única que se estaba aventurando más allá de lo correcto, solo ella estaba por cursar esa línea.
Sintió que no sería justo robarle un beso a su hermano, si en verdad quería un beso de el, necesitaba que Dipper se lo diera por voluntad propia, si se lo robaba o lo obtenía por accidente entonces no tendría ningún significado.
De repente los sonidos de la puerta siendo tocada retumbaron en toda la habitación.