Todo el cuerpo de Dipper quedo helado por las palabras de Pacifica, lo único que Dipper esperaba por parte de la rubia era una simple disculpa, el jamás imaginó que en ese lugar Pacifica se le confesaría.
Cuales fueron las palabras que escucho «Te amo» en serio Pacifica había dichos esas palabras.
Dipper había escuchado claramente a Pacifica, aún así era difícil de creer, en verdad ella se había enamorado de él.
— Pacifica no sé qué decir — Dipper respondió con dificultad, las repentinas palabras de Pacifica lo habían dejado atónito.
«Que se supone que tengo que decir» pensó Dipper dentro de su mente, era la primera vez que una chica se había enamorado de él y la primera ocasión que una chica se le confesaba.
Dipper se había enamorado en algunas ocasiones, pero el era el que terminaba confesando que se había enamorado, pese a sus esfuerzos por encontrar el amor no había tenido suerte.
Ahora las cosas eran diferentes, los papeles había cambiado, ahora una chica extremadamente hermosa se le estaba confesando, la tenia en frente de el, justo delante de sus ojos tenía a una hermosa jovencita que se derretía de amor por el.
— Que pasa, Dipper acaso no tienes nada que decir — Pacifica sentía que su corazón se partiría en pedazos en cualquier momento, lo único que pensaba es que sería rechazada por el chico que le gustaba.
Que era lo que estaba pensando Dipper, acaso se sentía alagado por las palabras de Pacifica o acaso sentía asco de sus sentimientos.
— Por favor no te pongas triste — Dijo Dipper de manera desesperada, al ver que la tristeza estaba por abrazar a Pacifica, suavemente poso sus manos en las mejillas de Pacifica.
Lentamente levanto el rostro de Pacifica hasta que sus miradas se encontraron, mentalmente Dipper se preparaba para hablar.
— No estoy molesto, es solo que me tomaste por sorpresa, en verdad no esperaba que sintieras esas cosas por mi, yo solo vine con la idea de ver a una vieja amiga.
— En serio no estás molesto — Respondió Pacifica mientras unas pequeñas lágrimas corrían por sus mejillas — eso significa que estás feliz.
— Claro que estoy feliz, una chica tan linda como tú, tan solo tenerte aquí, escuchar que me amas me hace muy feliz, es solo que no estoy seguro de que yo sea el chico correcto para ti.
— Que quieres decir con eso — replicó Pacifica con decepción en su voz.
Dipper luchaba por decir sus siguientes palabras, se sentía decepcionado de si mismo, Pacifica se había enamorada de él, pero Dipper no la merecía.
El castaño de gorra azul, que no tenía dinero ni encanto, no merecía tener a la chica más linda de todo Gravity Falls.
— Te quiero pedir perdón, la verdad de todo es que tu también me gustas, cuando me fui de Gravity Falls lo único en lo que podía pensar era en una chica hermosa de cabello dorado, esa chica eres tú Pacifica.
El corazón de Pacifica fue invadido por una felicidad sin igual, ante la respuesta de Dipper, Pacifica se acercó hacia Dipper para poder besas sus labios una vez más, el delicado toque de sus labios tocando los de Dipper es lo que más deseaba Pacífica.
Pacifica cerro sus ojos, antes de que sus labios lograrán alcanzar a Dipper, sus labios fueron detenidos por la mano del castaño.
Pacifica abrió sus ojos.
— Que pasa — pregunto desconcertada.
— No quiero que pienses cosas raras, en verdad me hace muy feliz que tenga esos sentimientos hacia mi, es solo que siento que no merezco tu amor.
— De que estás hablando — regaño Pacifica — claro que mereces que te ame, el amor no es algo que tomas es algo que ganas, y tu Dipper pines te has ganado todo mi amor.
Con sus palabras Pacifica trataba de animar a Dipper, lo único que el castaño pensaba es que no se merecía el amor de Pacifica.
— Solo mírame — Dijo Dipper apuntando a su cuerpo — solo soy un muchacho sin encanto y sin dinero, tú eres una princesa rica y hermosa, por que alguien como tú se interesaría en alguien como yo.
Al decir esas últimas palabras, la lágrimas comenzaban a escaparse de los ojos de Dipper.
Dipper luchaba con todas sus fuerzas para evitar que Pacifica viera su tristeza, Dipper no quería demostrar que era débil y mucho menos quería demostrarlo delante de ella.
Con dolor en su corazón Dipper cruzo su cuerpo, dispuesto a volver por el mismo camino por donde vino, comenzó a dar pasos.
«Esto es lo mejor» Dipper no podía dejar de repetir esas palabras dentro de su mente.
Antes de poder seguir caminando, Dipper sintió que alguien jalaba su camisa, esto lo hacía Pacifica, repentinamente detuvo a Dipper para evitar que se fuera.
Ahora Pacifica mantenía su mirada en el suelo, Sentía que Dipper había rechazado sus sentimientos, aún así después de lo que dijo, Pacifica no se sentía lista para dejarlo ir.