Capítulo 3

Todo estaba oscuro, por más que abriera mis ojos nada no veía ¿Por qué? Serie de recuerdos vinieron a mi mente.

Caminaba en la lluvia.

Me subí al auto de Ap.

Te secuestrare.

Me respiración era entrecortada, mis manos estaban atadas, intenté levantarme pero era en vano.

Brinque en la silla que me encontraba atada, al escuchar esa voz masculina, ¿La conocía?

-Que bueno, ya despertaste- movía mi cabeza de un lado al otro, quería que la venda se safara de mis ojos, mis manos, mis pies, mi todo.

-¿Que quieres?- me sorprendió escuchar mi vos que no templo.

Escuche como se acercaba.

- A aaleejat e- fracase, ahora si estaba asustada.

Su risa malvada me dio escalofríos.

-Tranquila solo quiero sacarte esa venda.

Temple al sentir sus dedos sacarme la venda, dio unos pasos hacia tras ¿Dónde me encontraba? Todo estaba basio en u callejón, ecepto por el auto que estaba frente de mi ¿Mi auto? trague grueso y me prepare para realizarle un mar de preguntas.

-¿Po or qué e e esto toy atada?- dio una sonrisa sarcastica, me di cuenta que estaba fría aunque tenía puesto un buzo. El hombre se recosto en la puerta del auto con sus dedos acariciando su barbilla pensativo, yo solo me enpezaba a preocuparme mas y mas.

-¿No recuerdas lo último que te dije?- mi corzon se hizo chiquito senti que la sangre dejaba mi cuerpo, recordaba muy bien.

Te secuestrare.

-N no re recu cuerdo -listo era mala mintiendo.

-¿No preguntarás porque te tengo aqui?

-S si l lo sé -la verdad me invadía de miedo, no lo quería recordar.

-Si, pero una razón por la que te estoy raptando -vaya eso no me lo había puesto a pensar, alivio entró a mi corazón mis latidos volvieron a la normalidad.
Me eche a reír carcajadas, el solo me miraba confundido yo solo me reia aun mas, todo estaba claro se confundió de persona por muchas razones la primera es que no tengo dinero y mi única familia había fallecido.

Si intentaba ganar dinero conmigo ya fracasó.

-Me gustaría saber el motivo de tus risa -su voz era seria y molesta, trate de recobrarme.

-Lamento desirte esto -di una pausa buscando las palabras correctas -querido amigo que recién conozco,sino me equivoco tu nombres es E I PI -dije su nombre deletreándo.

-Sí, ese es mi nombre -dijo mientras colocaba sus brazos en su pecho, se paró firme, por un momento crei que ya sabía lo que le iba a desir.

-Secuestraste a la persona incorrecta.

Empezó a reírse ¡Genial¡ con que así es, cada quien tiene su turno de reírse. Ahora tenía que preguntar.

-¿Por qué te ríes? -se recobró muy rápido, su rostro cambió totalmente.

-Esto no es una broma y no, no me confundí tu eres la hija de Sam y sino estoy mal falleció hace tres días -sus palabras eran crudas, me daban miedo.

-¡Puedes soltarme por favor! -ya me estaba empezando a hervir la sangre.

-Ja, por su puesto que no, sí lo haré pero aún no.

-Mira, te estas confundiendo, no soy la persona que quieres secuestrar.

Sacó un celular de su bolsillo trasero.

-Bien, dame tu mejor pose, porque la persona que me pagara por ti quiere saber que estés en buen estado.

-¿Que? Estas loco escucha...

-¡Callate¡ -sus tono de vos m hizo callar. Alzó su cell, tomó unas fotos yo solo me quedé quiera, asustada ¿Esto iba en serio? Bufó

-¿Por qué me estas raptando? -dije mientras agachaba mi cabeza ¿A caso era yo a quien quería?

-Ufff crei que no preguntarias -hizo una pausa mientras que yo me preparaba para lo peor -Tu padre te dejo una gran cantidad de dinero supongo que no lo sabes el socio de Sam te quiere resulta su tu eres la contraseña de esa caja fuerte.

Quedé atónita ¿No era verdad? No mi padre ni tenía un buen trabajo y que dejo una gran cantidad de dinero eso no lo creía.

-No es cierto, te confundiste de persona -ya dudaba de mis palabras, tal vez era verdad mi padre salia a trabajar y no se de que, negué moviendo mi cabeza de un lado al otro.

-No me interesa sino me crees.

Mi corazón dejó de latir ¡No puede ser! El hablaba en serio y me asustaba me estaba secuestrando lo peor es que nadie vendría por mi, lágrimas amenazaban salir de mis ojos ¡No,no! Debes ser fuerte me dije ya he llorado suficente con la muerte de mi padre, si me están secuestrando haré lo posible para que este idiota se arrepienta.

Sentí que se acercaba a mi yo aún miraba hacía a bajo. Ap soltó mis muñecas di un suspiro de alivió mientras acariciaba mis muñecas.

-Deberías peinarte un poco parece que hubieras salido de mi cama, quisiera que salieras de mi cama.

Quede boquiabierta, sus palabras no me las esperaba pero eso solo me lleno de coraje ¿A caso me iba a violar o era un acosador? Lo que si sabía era que no le permitiría tocarme. Con mis manos lo enpuje lo más fuerte que pude el dio unos dos pasos hacia tras me puse de pie dispuesta a caminar donde estaba y golpearlo pero olvidé por completo que tenía los pies atados, las patas de la silla aún estaban pegadas a mis pies.

Un grito ahogado salio de mi boca mientras caía.

Gruño de frustacion

-¡Maldito mundo¡

Escuche una risa burlona.

-Bien cariño primera regla no trates de alejarte de mi y golpearme.

-¡No me digas cariño! ¡Maldito estúpido!

-Parece que ya nos estamos conociendo.

Intenté levantarme pero no podía. ¡DIOS! ¿Por qué a mi?

-Me ayudas a levantar -dije casi suplicando y tratando de esconder las lágrima que querían inundar mis ojos.

-Por supuesto -hizo una pausa -pero tendrás que disculparte.

¿Qué? ¿Por qué?

-¿Por qué tengo que hacerlo?

Hasta donde yo sabía el era el que me estaba secuestrando-de pensarlo me daba escalofríos-yo no tenia que pedirle disculpas el tenia que hacerlo y tenía muchas razones.

-Porque me intentaste golpear y me enpujaste.