Una noche sin igual, las estrellas eran tan radiantes que iluminaba todo mi vecindario, a mi siempre me ha gustado mirar las estrellas, por lo cual fui a un observatorio, quedaba muy cerca de mi casa yo siempre iba para allá ya que el dueño era amigo de mi padre y el siempre me invitaba, me dirigí al observatorio y al llegar todo estaba muy oscuro y las luces no funcionaban
-Hola Lucas soy Adrián - Dijo gritando
Nadie me respondió, me adentré más al observatorio pero no podía ver nada, no tenía linternas, ni siquiera tenía un mechero para que me iluminara, no tenía nada pensé en salir, pero se me vino a la cabeza que probablemente estaría en el sótano ya que el siempre se la pasaba bebiendo allí, fue difícil bajar por el hecho de que todo estaba muy oscuro, pero al rato encontré la entrada para bajar al sótano así que decidí bajar
-Lucas estás aquí - Dijo con una voz de angustia
No me respondió, en este punto ya estaba asustado, decidí ser valiente e ir al ático lo cual fue fácil de encontrar ya que estaba cerca del sótano, cuando iba camino al ático me llegó un olor a podrido, olía demasiado feo, me imaginé muchas cosas y me dió miedo subir al ático, pero reuní el valor y subí, exactamente en la mesa cerca del ático lo cual era una mesa en dónde Lucas siempre trabajaba había un linterna así que la encendí y lo que vi fué horrible, había muchos niños decapitados, me daba muchas ganas de vomitar, había animales destripado, y al final estaba una mujer sin ropa con su cara desfigurada, me asusté mucho y me tropecé, sentí que alguien estaba detrás mío
-No debiste ver eso Adrián - Dijo un hombre con capucha
Pensé de inmediato que era Lucas ya que conocía perfectamente su voz y sí lastimosamente era él
-¿Lucas que es todo esto? - Dijo Adrián muy confundido y asustado
-No te asustes Adrián, todo estará bien - Dijo Lucas con una sonrisa sinica
-¿Lucas que es todo esto? - Volvía a decir Adrián todo confundido
-Son mis experimentos y tú también lo serás - Dijo con una sonrisa que brillaba hasta en la oscuridad
Lucas agarró un bate y me golpeó en la cabeza, tenía mucho miedo estaba perdiendo el conocimiento y no quería morir, estaba asustado, lo último que vi antes de quedarme inconsciente fue su sonrisa, una sonrisa que desearía no verla jamás, una sonrisa que le daría miedo a cualquiera con tan solo verla.
Después de 4 horas desperté, estaba amarrado con unas cuerdas en una silla y al frente mío entre las sombras estaba Lucas, estaba preparando un cuchillo o algo así no alcancé a ver muy bien, Lucas se me acercó
-Despertaste bello durmiente
-¿Lucas que pasa?, ¿Que es todo esto? - Dijo Adrián con un grito enojado
-No te pongas así Adrián - Decía Lucas con una mirada frívola
Después de eso el se fué, quise encontrar una forma de salir pero no pude, era imposible safarme, después de un tiempo el llega con dos niños más a lo cual directamente los colgó en una soga y los dejó allí, vino hacia donde yo estaba
-Sabes afuera te están buscando, tu madre, tu padre todos están desesperados - Dijo Lucas riéndose
Yo no le respondí ni nada, no se que me pasaba el miedo me estaba consumiendo que ni siquiera podía hablar, tenía mucho miedo, estaba llorando
-Tranquilo Adrián no te voy a matar, todavía - Decía Lucas con su sonrisa habitual
-¿Que te pasa Adrián te comió la lengua el ratón? - Decía Lucas riéndose a carcajadas
-Nos veremos luego, iré a consolar a tus padres
Me daba mucha rabia, no podía hacer nada apenas era un niño de 14 años, llegó la noche y también Lucas al cual yo lo consideraba como mi tío pero es verdad lo que dicen las apariencias a veces engañan, el se dirigió a donde tenía a los dos niños colgados ya estaban muertos así que procedió a cortarlos en pedazos, cerré los ojos, no quería ver nada, cuando terminó me miró fijamente a mí
-Tu eres el siguiente Adrián - Dijo Lucas riéndose
Un paso, dos paso, se acercaba lentamente hacia mí cantando la canción que me cantaba mi mamá de cuna
-A dormir, vamos ya, que pronto amanecerá
yo estaba temblando, me moría de miedo por completo, agarró un cuchillo y me lo pasaba despacio entre todo mi cuerpo, y me empezó a cortar, dolía mucho, me moría del dolor
-No llores apenas son rasguños - Decía Lucas lamiendo la sangre del cuchillo
No podía soportarlo estaba apunto de colapsar, y apunto de morir, Lucas me colocó el cuchillo en el pecho y me dijo:
-No te mataré, primero te haré sufrir - Decía Lucas lleno de odio
No sé porque pero cuando me habló estaba muy enojado y lleno de odio sus ojos era como si se estuvieran incendiando, el se fué aparecer estaba preparando algo y no sabía que era, me tuvo encerrado por dos meses en el sótano, siempre me visitaba para darme comida, así que me di cuenta que no me iba a matar ya que al parecer me necesitaba vivo, me agarró y me sacó de allí y me sentó en un carro y el carro empezó a andar
El me tapó la boca con cinta, por lo cual no podía hablar, además también me tapó los ojo, tampoco podía ver, llegó un momento en dónde el carro se detuvo y me bajó, pero antes que nada me noqueó.
Después de un tiempo desperté y estaba encerrado en unas rejas, parecía una cárcel y además también había otros niños cómo yo
-Te dejaré aquí Adrián, mucha suerte, me pagaron mucho por ti, al principio quería matarte, quería que sufrieras pero cambié de opinión, total el dinero es oro - Dijo Lucas
-¿Por qué haces esto? - Decía Adrián llorando
Lucas me vió, sonrió, me dió la espalda, me abandonó, se fué y me dejó "Encadenado"
Editado: 24.05.2021