Encadenados [#e2]

Capitulo 44

Alexander POV

Esto lo imaginaba de otra manera, enserio. No es por ser quejoso o negativo pero ¡Vamos, debía estar en este momento marcando a Katherine! Pero no, Dylan tuvo que tener una maldita pesadilla y no poder dormir solo.

Cuando llegamos a nuestra habitación, estábamos muy exitados, estaba apunto de marcarla y hacer el amor. Pero antes de poder avanzar, llegó el pequeño lagarto super desarrollado llorando diciendo que el coco se había metido en sus sueños

Matthew, estaba a su lado sosteniendo al señor conejo con el rostro neutro y algo calzado. En total silencio se metió en nuestras camas y siguió durmiendo abrazando la cintura de su madre, mientras que yo aún consolaba a Dylan

Ya había amanecido, no pude dormir en toda la noche ya qué parece que los gemelos al dormir patean, Katherine no se despertó parecía acostumbrada a sus movimientos. Pero al contrario yo, estaba totalmente despierto y con mal humor

Tenía los ojos cerrados con la cabeza mirando hacia el techo, a mi lado aún estaba mis amores durmiendo.

Sentí un movimiento brusco a mi derecha y luego escuche rápidas y fuertes pisadas, abri mis ojos y logre ver a Katherine correr hacia el baño tapando su boca.

Luego de minutos, escuchaba el ruido de su garganta hacer fuerza para vomitar, me puse de pie y sin despertar a las lagartijas super desarrolladas camino hacia el baño. Katherine estaba de rodillas en el retrete vomitando como si no hubiera un mañana.

Me acerco a sostener su cabello, pero cuando el olor a vomitó indundo mis fosas nasales no tuve tiempo para reaccionar que ya me encontraba vomitando en el suelo poniendo una mano en mi adolorido abdomen.

—¡Demonios, Alex!—Gruño adolorida Katherine. Deje de vomitar y hice una mueca de desagrado para girar a verla.

—¿Que te sucede?—Señale con la mano el retrete mientras me sentaba en un banco de madera que había allí. Ella ladea la cabeza con una sonrisa apretando sus labios entre sí

— Consecuencias de beber demasiado... Libere todo el Volka, Whisky, Champagne y el vino que tome ayer.—Se ríe doloridamente

La mire horrorizado. ¿Había tomado todo eso? Entiendo que al ser demonio tienes más fortaleza con las bebidas pero demonios, se había tomado toda clase de bebida alcohólica

—No recuerdo mucho lo de anoche—Se toca la nuca y se acerca al espejo para mirar su cuello—Iugh, aun no estoy marcada.

—Dylan tuvo una pesadilla y los gemelos vinieron a dormir con nosotros—Me reí—Tendremos que esperar un poco más.

—esta noche.—Suelta un suspiro aún mirando su cuello por el espejo

(...)

No me gustaba ser optimista, ni tampoco pesimista. Era de esas personas que veían las cosas con claridad, reales y sin ninguna vuelta. La vida perfecta si existe, pero debes romper cada hueso tuyo y sacrificar todo el aire de tus pulmones para conseguirla.

Aveces, no solo bastaba con tener un buen día, aveces se necesita tener una buena semana, o mes, quizás año. No me bastaba con que un solo día estemos unidos, quería que fuera para siempre. De hecho, sacrificaria hasta mi órganos para un para siempre

“Para siempre” ¿Que son aquellas palabras? Siempre he oído contestaciones a las cuales eran algo estúpidas. ¡Vamos!, ¿decir para siempre con tu pareja para luego en la semana terminar?

Mi punto de vista del para siempre es sencilla, un juramento que exige que todo tu ser de lo mejor de si para tener aquellas palabras, un juramento que nadie tendría que ser capaz de romper.

Yo no lo rompería.

Claro, ella... Ella, no lo sé

¿Que me había hecho llegar a pensar todo esto? Era el simple hecho de ver las cámaras de seguridad en la fiesta, la ví hablando con un joven muy animadamente, hasta que el joven le dice algo y su rostro cambia a uno serio. Termina dando una orden de que se vaya.

Maldeci por que las cámaras no detectan voces.

—Tengo una resaca de la mierda.—Katherine se acerca ami con una mano en su frente

Debía confiar en que ella solo hablaba con un amigo, pero ¿Por qué había hechado a ese joven? ¿Había dicho algo que la había incomodidado? ¿Que podría ser tan malo como para ordenar que lo saquen a la fuerza?

«Confía en ella» me repetí instantáneas veces

—¿Que haces?—Me preguntó mientras besaba mi mejilla y veía mi laptop, ella frunció el ceño mirando la pantalla —Oh, te fijas las cámaras de seguridad de la fiesta ¿Paso algo interesante?—Preguntó con tranquilidad

Confía en ella...

—No, todo normal.—Contesté. —¿Que estábas haciendo, mi leydi?—Gire mi cuerpo y la agarre de la cintura mientras que ella estaba en el medio de mis piernas. Ella estaba de pie mientras que yo estaba sentado.

—Oh, estaba con los gemelos, ya han partido hacia el preescolar.—Suelta un suspiro—Los ví coquetearle a dos chicas ¿Sabes que significa eso? ¡Ya están creciendo! —Me mira y frunce el ceño—Toda tu maldita culpa




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