P R Ó L O G O
Se encontraba aterrado.
Su cuerpo entero temblaba. Observó su vestimenta, abriendo aún más sus ojos. ¿Por qué su playera tenía manchas de pintura?, sus desgastados jeans se encontraban muy sucios. ¿Barro?
—Reportate - la voz gruesa provenía de un hombre. Lo confirmó en cuanto volteó un tanto temeroso.
Aquel sujeto llevaba un traje negro, probablemente más costoso que su playera manchada. -¿Quien eres? - gruño aquel tipo, acercándose a paso rápido.
La adrenalina corría por sus venas, esto no acabaría bien. Ni siquiera recordaba su nombre.
—No lo sé - respondió con sinceridad, y hasta resoplando, no se dejaría intimidar por un extraño.
Por lo menos ahora sabía algo nuevo:
No era un cobarde.