Engañada, humillada pero más fuerte que nunca.

Capitulo 45

Esto es demasiado divertido para compartirlo con más personas, llevamos treinta minutos mis hermanos y yo y ya masacramos a más de la mitad de su gente. Mi hermana está cantando y danzando, mi hermano me dice que ya está muy lleno porque se deja la mitad de la sangre regada por el suelo y yo estoy bañada en ella como si fuera que me va a rejuvenecer más de lo que estoy. Hasta ahora no a echo falta que ninguno de los tres utilicemos nuestras armas, con la fuerza que poseemos hemos matado sobre unos cuatro mil soldados, pero lo que yo ahora me pregunto es, qué tipo de rey les manda que no a dado la cara por ellos ni una sola maldita vez, los observa desde la lejanía para que hagan su trabajo y poder huir en el mayor de los casos, así se piensa enfrentar a, qué persona tan desagradable.

Muchas de las personas que están luchando en primera fila son gente muy joven que todavía no han vivido ni la mitad de sus vidas y las obligan a combatir por su estupido “rey”, ya decían que los descendientes de los ángeles están orgullosos pero esto me supera.

 

-Ey! ¡Hermanita!- Me giro a ver a mi hermano.- La mayoría de estos idiotas no saben la razón de esta guerra.

-Como?- Mi cara es de confusión.- Supuestamente no vinieron a defender a su rey.

-Por lo que leído en la mayoría de los pensamientos de estos jóvenes muchachos, la primera fila se compone de gente inexperta y son los hijos jóvenes de las familias del reino, los militares que han estudiado los ataques con gente de alto rango están en la segunda fila, supuestamente para conseguir herirnos.

-Dime que lo que me estás contando es un chiste por favor, dime que no hemos matado a gente inocente por culpa de esos desgraciados.- Dice Danae a mis espaldas.

-Pues se puede decir que si, que piensas Lavi.

 

Me quedo pensativa, esto es lo peor que un rey puede hacer, enviar a gente inexperta a la batalla y gente que no tiene ni idea de la razón por la que está luchando, el motivo es lo más importante aunque sea una mentira. Estiro mi brazo y cojo al primer chico que se acerca a mi.

 

-Vamos a hablar caperucita.- Le digo con una sonrisa.

-Yo no tengo que hablar con un hijo de Satanas.- Me dice con voz valiente, este chico me gusta.

-Primero yo no soy hija de Satanás, lucifer, demonio como lo querais llamar.- Me mira sorprendido.

-Pero tus rasgos y facciones.

-Soy la reina del inframundo por eso estos poderes , pero me gustaría saber más qué es lo que os dijo vuestro rey para venir a MI TERRITORIO y atacarme.- Me mira como si me salieran pajaritos de la cabeza.- Qué pasa?

-Es verdad lo que estás diciendo?- Asiento con la cabeza.- El nos dijo que estábamos en un campo neutral, nunca nos dijo que usted era la reina del inframundo entonces eso quiere decir que usted el la Diosa de la muerte ni aunque la intentaramos matar podriamos.- Vuelvo a sentir.- Él nos dijo que usted es la hija de un demonio y un humano, sabemos que a esos seres hay que darle caza.

-¿COMO HAS DICHO?¿DARLES CAZA?- Estoy muy pero muy enfadada.- Desde cuándo habéis dado caza a los mestizos?- Pregunto para tranquilizarme.

-Desde que nacemos nos entrenan para eso.- Ahora no me arrepiento de haber matado a todos.

-Como sois capaces de quitarle a esos seres el derecho a vivir eeeee!!!!!! Vosotros no sois la muerte para decidir quién merece vivir y no, por esa razón como yo si tengo ese don los maldeciré a todos ustedes.- Empiezo a elevarme con un gran enfado.

 

El chico me mira con miedo, sabe que no debería haberme dicho nada, sabe que la a fastidiado y sabe que el castigo de todos los asesinatos que a cumplido hacia esos seres los pagará de uno en uno como me llamo Lavinia, que pensaba que con un simple nosotros somos hijos de los ángeles supremos te voy a dejar pasar esta ofensa, a no señor, con esta te pasaste de la raya y es hora de que pagues lo que te toca, estúpidos angelus.

En el suelo empiezan abrir brechas donde de ellas sale un gran fuego con un calor abrasador y emergen mis amados demonios.

 

-Mi señora porque nos ha llamado.- Dice uno de ellos.

-Alimentos y arrastrar sus cuerpos al inframundo donde serán castigados eternamente.- Digo fríamente.

 

De repente se convierte en una masacre, mis demonios arrancan extremidades por doquier, comen su carne y beben su sangre. Arrastran el resto de cuerpos hacia las brechas para hacerlas sumergir con ellos.

 

-No crees que te pasaste un poco.- Me dice Jason a mi lado.

-¿Qué haces aquí? Y respondiendo a tu pregunta, no lo creo.- Digo mirando al frente.

-Te recuerdo que tambien soy un demonio de los más fuertes y tengo todo el derecho alimentarse y como Luca tiene sumamente prohibido acercarse al campo de batalla el pobre se esta comiendo hasta las uñas por no poder venir, demo llevarle comida a domicilio no crees.- Dice mientras me sale una carcajada.- Pero ahora enserio piensas que ellos tienen la culpa de lo que su rey les mandó.

-Ellos decidieron por sí solo matar a esas criaturas y siguieron teniendo las conciencias tranquilas. Jason mataron a niños que tenían horas de nacidos, ves eso normal, para eso debes tener mucha sangre fría, no estamos en la era medieval donde la inquisición mandaba a todo el mundo. Estamos en pleno siglo XXI y esto me irrita a mi y a cualquiera y lo sabes. 

-Lo sé y te entiendo, pero ver esto es raro en ti, normalmente eres la más racional de los tres.- Miró a mis hermanos como acompañan a los demonios en el festín.- Y la gente que está en el castillo lo está viendo todo y ya te puedo decir que la mayoría de tus invitados está cagado de miedo, te puedes imaginar a la mayoría gritando purés más o menos todos están así.

 

Empezamos a reírnos sin parar de imaginar la situación. Jason fue uno de los mejores apoyos que he tenido, para mi es como si fuera un gran hermano, lo aprecio tanto y no me imagino perdiendo el derecho de pasar la vida con él.



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En el texto hay: dioses, mates, amor d

Editado: 24.03.2021

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