Azael
-Quiero que lo encuentren en este preciso instante, no pudo haberse esfumado- las personas frente a mi temblaban de miedo, probablemente es porque no acostumbro a alzar la voz, pero estoy desesperado.
-volveremos a buscarlo- habla Gabe, es el único que mantiene la calma y no me tiene miedo, probablemente porque nos conocemos desde hace años y sabe que, aunque me enoje, jamás lastimaría a alguien de mi manada si no se lo merece.
-Eso espero, pueden retirarse- inmediatamente todos los que se encontraban en mi oficina salen corriendo, el ultimo es Gabe, quien me da un asentimiento de cabeza antes de retirarse.
Me recuesto cansado en mi escritorio, hoy ha sido un día horrible y no parece mas que empeorar, en unos meses se realiza la reunión del consejo, y como Alpha de esta manada es mi deber estar ahí, pero no pienso ir a ningún lado hasta que encuentre a mi hermano.
Hace casi una semana que desapareció, venía de una visita a la manada vecina, cuando fue atacado en el camino y no hay ni rastro de él, el vehículo en que venía fue encontrado en mitad de la calle completamente solo, no dudo que este bien, al fin y al cabo, es uno de los betas mas fuertes, pero si su captor es quien pienso, esta en serio peligro y tengo que encontrarlo antes de que sea demasiado tarde.
Salgo de mi ensoñación cuando tocan la puerta.
-Adelante- lentamente se abre la puerta y se asoma al otro lado la cabeza de mi madre, me regala una sonrisa, aunque se ve bastante cansada, a ella también debe estarle afectando la desaparición de Zander, aunque trate de aparentar que no.
Se acerca lentamente con una bandeja en las manos, la pone sobre el escritorio y veo que traen un café y unas galletas.
-Tienes que comer, lo ultimo que necesito es que mi otro hijo caiga enfermo por no alimentarse bien- me dice en modo de regaño, pero se que lo hace porque está preocupada.
-Esta bien, pero solo porque amo estas galletas- le doy una sonrisa para tratar de tranquilizarla.
Empiezo a comer con mi madre a mi lado, cuando termino ella se levanta y recoge la bandeja, se da la vuelta, pero cuando va llegando a la puerta, me levanto rápidamente y sin pensarlo corro hacia ella, la abrazo fuertemente.
-Lo encontraremos, te lo prometo- hare lo que este en mis manos por traer de vuelta a mi hermano, lo juro.
-Sé que lo harás- con eso en mente mi madre se retira y vuelvo a quedar solo en la habitación.
Me dirijo al escritorio a terminar de llenar unos documentos hasta que me entra una llamada.
Número desconocido
Inmediatamente contesto, he esperado esta llamada por días.
-Hola.
-Tengo lo que me pediste.
Mi corazón late con fuerza ante la expectativa.
-Tenias razón, Reidar a estado actuando raro en los últimos días, su organización fue quien se llevo a tu hermano, pero no han podido sacarlo del país, te mandare la ubicación en un instante, tienes que actuar cuanto antes, mañana por la noche es luna llena, ustedes serán mas fuertes en ese momento, él saldrá a reunirse con un nuevo socio y no volverá hasta el día siguiente, aprovechen esa ventaja, pero les aviso que dejo a varios de sus mascotas cuidando su escondite y además hay vampiros por todo el sector, tengan cuidado.
-Lo tendré en cuenta, gracias-
-Sabes por que lo hago, solo no olvides nuestro trato.
-No lo har.....
Antes de que pudiera siquiera despedirme, terminó la llamada, aunque pensándolo bien no me sorprende.
Chase y yo tenemos una historia muy compleja, éramos muy buenos amigos hasta que sus padres lo obligaron a irse para que aprendiera a controlar la magia, luego yo conocí a Emily y aunque sabia que no era mi mate, me negué a ver la verdad, estaba enamorado de su frescura y su carisma así que después de un tiempo le pedí que fuera mi novia, sabía que la probabilidad de que ambos encontráramos a nuestros mates era muy baja, así que porque vivir toda la vida esperando algo que probablemente no llegaría, si podíamos ser felices juntos.
Después de años de noviazgo, estaba por proponerle casarnos, le pediría que fuera la luna definitiva de esta manada, sin importar que nos deparara el futuro, pero unos días antes de que se lo propusiera Chase volvió, estaba muy feliz de volver a ver a mi amigo hasta que descubrí que el era el mate de Emily.
Estaba seguro de que mi amor por ella era mas grande que cualquier destino que pudo haber impuesto la diosa Luna, pero me equivoque, cuando llego el momento de elegir, ella lo eligió a él, primero me sentí traicionado, he hice cosas de las que no estoy orgulloso, pero luego comprendí que en el corazón no se manda y que debía aceptar su decisión.
Tiempo después el aquelarre de Chase fue atacado y mi manada fue a ayudarles, un vampiro tenia a Emily y Chase estaba muy herido para ayudarla, así que yo la salve, en consecuencia, él juro ayudarme en cualquier momento que necesitara algo, a cambio de que me mantuviera alejado de ella.
Obviamente acepte, después de todo, ya me había dado por vencido, durante un tiempo busque a mi mate, pero tras años de no encontrarla, decidí darme por vencido, si la diosa Luna quiere que la encuentre, ella la pondrá en mi camino, y si no, entonces es que no estaba destinado a tenerla conmigo.
Tengo muchas responsabilidades, muchas personas dependen de mí, no puedo pasarme la vida en busca de alguien que tal vez ya este con otro o simplemente no me quiera, ya que, si ese fuera el caso, no voy a obligarla a estar conmigo a la fuerza, aunque eso me destroce por dentro.
Hace ya casi 500 años que se firmo el tratado entre especies, los lideres de las 5 especies que habitan la tierra hicieron un pacto de sangre, jurando detener toda acción de violencia injustificada contra otra especie, y cada diez años se celebra una reunión con los dirigentes actuales de cada especie, en donde se vuelve a firmar el tratado, los elfos y los magos, no se relacionan mucho con otras especies, pero desde hace algunos años los vampiros y los humanos han comenzado a revelarse contra el tratado, quieren evitar que se vuelva a realizar la reunión y se reafirme el pacto.