¿enserio podré ser un Dios?

Un gran día parte 1

  -¿Ya listo para tu gran día mañana?- dijo.

  -Al menos preparado estoy- dije con una sonrisa.

  -Todo va a salir muy bien así que no te preocupes por eso- dijo el archiduque.

  -Claro- dije, después mire bien a la madre de Wade y comencé a entrar en trance de nuevo.

Después de unos pocos minutos volví y cuando lo estaba haciendo alcance a escuchar y ver cómo servían la comida, reaccione y agradecí de inmediato y ya después me dijeron.

  -Ya regresaste- dijo el Archiduque.

  -Si- dije y después comencé a comer.

  -¿Es cierto que entras en trance al ver a alguien?- dijo Rick y antes de poder contestarle volvía entrar en trance.

Comencé a ver muchas cosas y termine volviendo varios minutos después, ya casi todos los recuerdos hasta ahora se han conectado, y también nuevos entran, también debo decir que ya me adapte a ello.

  -Hey, volviste- dijo Rick que se encontraba a un lado viéndome fijamente.

  -Si, así es- dije alejándome un poco.

  -Pensé que era mentira, pero de repente te quedaste quieto sin hacer nada, así que ya creo que eso es cierto- dijo.

  -Mhm- asentí sin decir nada ay después me dirigí a mi comida.

Los recuerdos que tengo de el son los de un hermano gracioso y responsable, pero al mismo tiempo un sinvergüenza, con esto voy a que las cosas las hace muy descaradamente y no le importa que digan los demás de el.

Es bueno de cierta manera que sea así, pero es algo raro en estas épocas de historia donde haces recurrentemente lo que te indica la sociedad, dejando eso de lado comencé a comer finalmente.

    --- Después de comer ---

Ya al terminar de comer mire fijamente a la madre de Rick o mejor dicho la señora Colette y volvió a entrar inmediatamente en trance, ya pasados los 2 minutos regrese de nuevo y vi que ya se habían ido la mayoría de la mesa.

  -Ya volviste- dijo Wade.

  -Así es- dije.

  -Trata de que alguien con quien ya hayas visto los recuerdos este junto a ti, puede que sea Jess, pero trata de estar casi todo el tiempo así, pues si de repente te quedaras quieto en la calle, puede hacer que un ataque sea inevitable en ti y mueras- dijo el Archiduque.

  -Estaré atento a ello- dije inclinándome un poco para mostrar que me iba y después salí de la cocina mientas me despedía para irme a mi cama, de nuevo me sentía demasiado cansado como para poder continuar despierto.

Pensé que la vida sin redes sociales, videojuegos, o esas cosas modernas por el estilo no sería una buena vida, o que al menos sería más aburrido que de costumbre, pero hasta ahora no ha pasado eso y me siento cansado de lo tanto que hice.

Mientras caminaba a mi habitación recordé algo que hacia normalmente antes este cuerpo, así que sin dudar un poco estuve de acuerdo con ello y camine hacia la habitación de madre, no pasó mucho tiempo hasta que llegue y toque la puerta.

  -¿Quién?- se alcanzó a escuchar desde adentro.

  -Aland- respondí.

  -Adelante hijo- se escuchó y después entre.

  -Buenas noches madre- dije.

  -Después de algunos días al fin vienés de nuevo- dijo ella.

Yo no respondí y solo me acerque y me recosté con ella, así sin decir nada y durante al menos 20 minutos me quedé, ella me acarició la cabeza mientras yo en mi mente imaginaba que sonreía.

  -¿Qué tal estuvo tu día?- pregunto después de mucho tiempo.

  -Algo cansado, pero por hoy terminó- dije.

  -Mañana va a ser un gran día pero también será uno muy estresante, así que no te preocupes y disfrútalo- dijo.

  -Así será- dije.

Después poco a poco comencé a perder la noción del tipo y entre en un sueño profundo sin darme cuenta.

      --- A la mañana siguiente ---

Una pequeña luz comenzó a molestarme pues sólo me daba en uno de mis ojos y poco a poco desperté, al abrir los ojos me di cuenta que seguía recostado en madre, así que sin moverme mucho para no despertarla comencé a levantarme.

Solo que antes de darme cuenta ella ya me estaba viendo, yo solo sonreí tontamente y dije -Buenos días-

  -Buenos días mi niño- dijo ella mostrando una sonrisa.

  -Perdona por quedarme dormido- dije con algo de vergüenza.

  -Ya tenía tiempo que no dormía junto a ti, así que no te preocupes por eso- dijo.

  -¿No te lastime verdad?- pregunté por recordar claramente lo de su enfermedad.

  -No, no te preocupes- respondió y después dijo -Ve a arreglarte bien para tu ceremonia, no quiero que se haga tarde en un día tan importante-

  -Claro madre, ¿irás a verme?- asegure y pregunté después.

  -Por supuesto que estaré ahí, no podré estar por mucho tiempo, peor estaré ahí en lo más importante- dijo.

  -Esta bien, te veo allá entonces madre- dije y alienta con una gran sonrisa en mi rostro.

Después fui a mi habitación y allí vi a Jess, estaba sentada en el colchón mientras al mismo tiempo cabeceaba un poco, pareciendo que tenía sueño, después de un poco de tiempo me vio y de inmediato su apariencia somnolienta despareció y dijo.

  -¿Dónde se encontraba Joven amo?- preguntó.

  -Disculpa, no dormí aquí, me quedé dormido con mamá- respondí.

  -Pensé que se había ido de nuevo, no pude dormir por pensar que se había ido otra vez, ya estaba pensando en lo que le diría a su padre- dijo.

  -Lo siento mucho- dije mientras me inclinaba un poco y hacia la seña de perdón típica.

  -No se preocupe por eso- dijo algo alarmada mientras de inmediato me levantaba.

  -Entiendo, por lo que veo no dormiste ¿Verdad?- dije.

  -Un poco, pero casi no lo hice- dijo.

  -Esta bien, solo prepara mi baño y toma una siesta de aquí al desayuno, duerme aunque sea un poco, después de todo hoy será un día muy pesado- dije pues al final de cuenta era mi culpa que no hubiera dormido.




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