Capítulo 28: La Unión Sagrada

Preparativos para la Ceremonia

Después de superar la guerra celestial y restaurar la paz, Cupido y Thanatos decidieron que era el momento adecuado para fortalecer aún más su vínculo con una ceremonia que simbolizara la unión eterna de sus almas. El nuevo dominio que habían creado juntos era un lugar perfecto para la ocasión, con sus paisajes deslumbrantes y su equilibrio perfecto entre amor y muerte.

La ceremonia se planeó meticulosamente. Cupido y Thanatos deseaban que fuera una celebración que reflejara la profundidad de su amor y el significado de su unión en el cosmos. Consultaron a Orpheus, el sabio celestial que había sido su guía durante la profecía, para asegurarse de que todo estuviera en armonía con las fuerzas cósmicas.

El lugar elegido para la ceremonia fue un claro en el corazón de su dominio, donde el cielo se encontraba con la tierra en una perfecta fusión de colores y luz. Se decoró con flores luminosas y sombras etéreas, representando la unión de sus elementos. Los guardianes, las almas y los dioses amigos fueron invitados a asistir a este evento sagrado, creando una atmósfera de alegría y expectativa.

El Ritual de la Unión

La ceremonia comenzó con un ritual ancestral, una tradición que había sido olvidada por muchos pero que tenía profundas raíces en el cosmos. El ritual simbolizaba la fusión de dos almas en una sola, uniendo los aspectos de amor y muerte en una conexión eterna. Orpheus, como el guía espiritual, tomó el liderazgo en la ceremonia, recitando antiguos cánticos y realizando gestos simbólicos que evocaban la magia y el misterio de la unión.

Cupido y Thanatos se presentaron frente a sus invitados, vestidos con túnicas que reflejaban el brillo del amor y la solemnidad de la muerte. La ceremonia comenzó con una danza en la que ambos se movían en perfecta sincronía, sus movimientos representando la armonía entre sus elementos. La danza era una representación visual de su conexión y de cómo se habían convertido en una sola entidad en el cosmos.

Durante la danza, Orpheus recitó una serie de oraciones y encantamientos que llamaban a las fuerzas cósmicas para bendecir la unión. Estas palabras antiguas evocaban la energía de las estrellas y los reinos celestiales, solicitando que la fusión de Cupido y Thanatos fuera sellada con una bendición eterna.

El Ritual de la Luz y la Oscuridad

El siguiente paso del ritual fue el "Ritual de la Luz y la Oscuridad". Este ritual simbolizaba la integración completa de sus poderes y personalidades. Cupido tomó una flecha luminosa, representando el amor, y Thanatos sostuvo una esfera de sombras, representando la muerte.

Ambos se acercaron a un altar especial, donde depositaron sus respectivos símbolos de poder. La combinación de la luz de la flecha y la oscuridad de la esfera creó un espectáculo deslumbrante de luces y sombras que se entrelazaban en una danza celestial. Este fenómeno simbolizaba la fusión de sus poderes y la creación de una nueva fuerza cósmica que combinaba sus elementos en perfecta armonía.

Luego, Orpheus realizó un encantamiento que selló esta unión de luz y oscuridad en un cristal sagrado. Este cristal, ahora infundido con la energía de su amor y su conexión, sería un símbolo eterno de su unión.

La Promesa Eterna

El momento culminante de la ceremonia fue el "Juramento de la Eternidad". Cupido y Thanatos se enfrentaron el uno al otro y, tomando las manos, pronunciaron votos que reflejaban su compromiso mutuo. Estos votos eran profundos y personales, expresando no solo su amor, sino también su devoción y su deseo de proteger y apoyar al otro a través de todas las pruebas y tribulaciones.

“Prometo amarte y honrarte, en la luz y en la oscuridad, en la vida y en la muerte”, dijo Cupido, con una voz cargada de emoción.

“Prometo estar a tu lado, en cada batalla y en cada momento de paz, y compartir contigo el equilibrio y la armonía que hemos creado”, respondió Thanatos, con una voz igualmente solemne.

Estos votos fueron acompañados por una serie de bendiciones de los dioses presentes, quienes ofrecieron sus deseos de felicidad y prosperidad para la pareja.

La Bendición Cósmica

Después de los votos, Orpheus llevó a Cupido y Thanatos a un portal celestial que conectaba su dominio con el corazón del cosmos. En este lugar sagrado, los dos dioses recibieron la “Bendición Cósmica”, una energía pura y etérea que simbolizaba la aceptación de su unión por parte de las fuerzas universales.

La bendición se manifestó como una lluvia de estrellitas luminosas y una corriente de energía suave que envolvía a Cupido y Thanatos. Esta energía infundía una sensación de paz y plenitud, consolidando su unión y sellando su vínculo de manera definitiva.

La Celebración de la Unión

La ceremonia fue seguida por una celebración llena de alegría y festividades. Los dioses, guardianes y almas se unieron en una gran fiesta en el dominio de Cupido y Thanatos. Hubo música celestial, danzas que celebraban el amor y la muerte, y una abundante comida que simbolizaba la abundancia y la prosperidad.

La celebración fue un momento de unión y alegría para todos los presentes. Los amigos y aliados de Cupido y Thanatos compartieron sus felicitaciones y deseos de felicidad, y la atmósfera estaba llena de amor y gratitud.

Un Nuevo Horizonte

Con la ceremonia completa y la bendición recibida, Cupido y Thanatos se sintieron más unidos que nunca. Su amor y su conexión se habían sellado con un poder cósmico que garantizaba su permanencia eterna.

La Unión Sagrada no solo marcó el final de un capítulo en su historia, sino que también abrió un nuevo horizonte lleno de posibilidades. Cupido y Thanatos, ahora más fuertes y comprometidos que nunca, miraron hacia el futuro con esperanza y determinación.

Sabían que su unión había traído un equilibrio duradero al cosmos y que su amor continuaría siendo una fuerza poderosa en la creación y el mantenimiento del equilibrio universal. Con la bendición de los dioses y el apoyo de sus aliados, estaban listos para enfrentar cualquier desafío y seguir construyendo su legado en el cosmos.