CAPITULO 9

– Si, por supuesto– conteste yo– por mi no hay problema.

– Entonces procederé a revisar, mientras mi compañero revisa sus papeles– dice un oficial– empiezo por usted señor le parece?– se dirige hacia mi.

– Si claro, aquí están mis papeles– dije, extendiendo mi mano con el folder de los papeles.

– Esta es su camioneta?– dice señalando a la mía, que estaba luego luego.

– Sí claro.

Ambos caminamos hacia la camioneta, mientras que los demás se quedaron con el otro oficial.

– ¿Y qué es lo  que les trae por aquí?, estamos a dos horas y media de la anterior ciudad y a cinco de la próxima– me dice el oficial.

– Mmmm vine con mis amigos a pasar unos días a la playa, por eso estamos aquí de camino– Comente yo.

– ¡Bien! ¿Me podría abrir la cajuela, por favor?– dice amablemente, a lo que yo con la llave que tenía un botón automático, lo apreté y se abrió la cajuela.

Ya me urge irme, me estoy estresando está revisando maleta por maleta y eso en verdad me desespera, el otro oficial ya terminó de revisar los papeles, todos ya estan en mi camioneta sentados, bueno solo Thomas que está con su hijo y Leonard está con Dylan.

– Bien, en la cajuela todo está en orden– dice el oficial acomodando la última maleta– cuantas personas trae?– me pregunta.

– En mi camioneta?– a lo que él asiente – solo traigo cinco personas y conmigo seis y una perrita.

– Bien, necesito revisar la camioneta completa, ¿le importaría?

– Ammmm no– me dirigí a la puerta de Claire  y la abrí– Necesito que bajen de la camioneta, el oficial necesita revisar – dije y ayudé a bajar a todos.

– ¿No te van a llevar a la cárcel tio?– me pregunta Adam.

– No, solo necesitan revisar, porque un niño se perdió.

– Y tu lo tienes?– Pregunta Dylan ya abajo.

– No Dylan, robar un niño o alguna cosa es malo y puedes ir a la cárcel.

– Bien, señor necesito, hacerles unas preguntas a los niños, solo su edad y nombre– me dice el oficial.

– Sí claro, pero solo si ellos quieren– dije.

– Si claro, niños les puedo hacer un par de preguntas?– le pregunta el policía a los niños.

– Pues sí, supongo– dice Dylan.

– Papi me dijo que hablara con extraños– habla Adam.

– Es un policía Adam, solo está haciendo su trabajo, es para que ayuden a encontrar al niño perdido para que regrese con su familia– les dije.

– Si les incomoda, lo pueden decir, no pasa nada con que no contesten lo  que el oficial diga, solo que podrán ayudar al niño– Habla Claire.

– Si niños, solo quiero que me ayuden en eso, ¿está bien?– habla el policía.

Ambos tenían miedo pero Adam tenía más miedo que Dylan y Dylan lo sabía disimular, cualquier persona diría que no le importa con quien habla pero se ve que tiene miedo.

– Quieres hablar Adam?– pregunta Dylan.

– Si tu lo haces yo también– le contesta Adam.

– Bien, si queremos responder, para que el niño llegue a su hogar– habla Dylan con el oficial.

– Gracias niños, empecemos por su nombre, ¿cómo se llaman?– pregunta el oficial.

– Yo me llamo Dylan.

– Y yo Adam.

– Cuantos años tienen?– pregunta el oficial.

– Los dos tenemos cinco– Habla Dylan y Adam solo asiente.

– Ok, ¿quiénes son sus padres?

– Yo solo vengo con mi primo Leonard pero me quise venir con Harry en su camioneta con Adam– responde Dylan.

– Yo vengo con mi papá, Thomas y también vine con Harry porque lo quiero porque es mi tío– dice Adam,nervioso.

– Bien, entonces ya terminamos con usted señor ya no es necesario revisar el resto de su camioneta– me dice el oficial devolviéndome mis papeles.

– Ok señor.

– Prosigamos– Habla el oficial.

Nos subimos a la camioneta de nuevo, mientras que los demás iban al otro coche de Leonard, sin más el oficial se tardó en revisar como dos horas y media, no encontró nada raro.

– Pueden seguir con su viaje– habla el oficial.

– Bien, gracias buen día, oficial– dije y emprendimos de nuevo el viaje.

Puse música de nuevo, pero esta vez veníamos en silencio, ya es mediodía y ya faltan nada más tres horas de viaje, si lo se demasiado, bajamos las ventanillas porque hacía demasiado calor.

– ¿Alguien quiere ir al baño?– pregunte parándome en una gasolinera, solo alrededor de un jardín.

– Yo quiero– dice Adam.

– Bien, te llevo con tu papa, tu Dylan no quieres?– pregunte bajando de la camioneta y abrir la puerta de copiloto y ponerle de nuevo la correa a Nala.

– No gracias– responde.

– Bueno Claire irás al baño?

– No, yo me quedo con Dylan no te preocupes– me responde Claire.

–  Ok, gracias– le dije– vamos Adam– baje a Adam de la camioneta y lo deje con su papá.

Fui al baño a hacer mis necesidades y a los cinco minutos salí, encontrándome con esos ojos celestes que le pertenecen a una de las mujeres más hermosas que he conocido; ¡Esperen la estoy viendo!, rápido desvie la mirada y ella se fue.

– Eso fue raro y tal vez incómodo para ella– susurre para mi.

Esta parada fue rápida y de nuevo nos pusimos en marcha, ya son las dos de la tarde y solo falta una hora para llegar al mar, es una playa muy poco habitada por su costo, por suerte hay lugares donde comer desde restaurante hasta fondas, rentamos unas cabañas enfrente del mar, para tener una mejor visión y oído, se escuchan perfectamente las olas de mar.

– Ya casi llegamos?– pregunta Dylan.

– Solo falta poco, miren eso!– vimos una ardilla en un árbol.

– Eso es una ardilla?– pregunta Adam emocionado.

– Eso qué tiene de emocionante?– pregunta Sophia, viendo de nuevo su teléfono, la he visto por el retrovisor de vez en cuando y creo que lo ha notado, solo espero que no lo malinterprete porque solo lo hago, para que no haga ninguna grosería a los niños.