Escape: Brooke

Capitulo 4

14c0a79da09f798c298108854771.jpg

Llegó el día tan esperado, estuve todo el día nerviosa, más cuando Charlie estaba intentando comunicarse conmigo, pero yo no estaba preparada para explicar nada, menos cuando no sé qué está sucediendo, al parecer no se toda la verdad, y aún la sepa no creo que esté lista para decirle a Charlie la razón de venir a Londres, sin decirle nada a nadie. Estoy segura que él sabe algo, pero no sé qué tanto, lo que me hace dudar, ¿por qué él está conmigo si sabe esas cosas de mi familia?

La verdad estaba todo el tiempo frente a mis narices, pero preferí ignorarla, quizás una parte de mi sabía lo que iba a suceder si me enteraba, o tal vez solo no quería enfrentarme a la terrible verdad, pero como dicen, quien huye de la verdad acaba tropezando con ella.

Cada minuto de espera se hacía más eterno, hasta que por fin llegó la hora de la tarde, y mi abuelo me pidió que me vistiera semiformal, ni que fuera a visitar a la Reyna o algo parecido. Dieron las tres de la tarde, yo estaba con los nervios de punta y lista para salir. Joshua nos llevó en el coche de mi abuelo a la casa de Bonie, por cierto, no sé dónde vive.

—Brooke, no estés tan nerviosa solo vas a verte con tu abuela —Me asegura Isacar, pero no le creo.

—¿Y por qué estamos vestidos así, como si fuera una reunión importante? —le respondo.

—Porque lo es —Es lo único que dice. No trato de insistir más, solo miro por la ventanilla las calles de Londres, me distraigo con el color verde de los parques, las casas de ladrillo, me doy cuenta de que llegamos al centro cuando lo que más se puede ver son los edificios. Llegamos a un vecindario donde la calle es sólo de dos vías y las casas son tan privadas que están rodeadas de cercas y muchos árboles. Doblamos por una calle un poco más estrecha, esto parece un laberinto, logro ver algunas casas que no son para nada pequeñas, pero tampoco tan llamativas, Joshua gira a la derecha y se detiene por un momento frente a las enormes puertas rodeada de árboles, tanto que no puedo ver qué hay del otro lado hasta que se abren las puertas.

—Hemos llegado —susurra el abuelo, yo no he visto ninguna casa aquí dentro, Joshua conduce por un camino de solo un auto, miro a mi alrededor y veo que a cada lado del camino hay plantas bien podadas, detrás de nosotros se cierran las puertas y vuelvo mi atención al frente. Entonces veo la mansión de mi abuela, a esto no se le puede llamar casa, a mi derecha mirando hacia abajo un hermoso jardín paisajista bastante amplio, aquí dentro caben algunas 10 casas de la mía, es como un condominio con una sola casa de tres niveles.

Tiene una estructura ovalada y cuadrada, el color blanco de las paredes exteriores hace que luzca mucho más elegante de lo que ya es, ni hablar de las paredes de vidrio en la entrada de la casa que permite ver gran parte del interior. Josehua se estaciona junto a otros coches lujosos, mientras me bajo del auto me pregunto cuanta gente debe de vivir aquí, dudo que mi abuela viva sola en esta mansión, y que todos los autos sean de ella.

El interior de la casa es mucho más hermosa, todo parece como si fuera de oro, el color dorado reina aquí dentro, al entrar lo primero que veo es el ascensor completamente transparente, miro a mi alrededor maravilla con la belleza de este lugar, el piso de la entrada es de baldosas de mármol con un diseño bastante peculiar, columnas altas con el mismo diseño, a mi derecha hay un largo pasillo no puedo ver hay en el fondo porque la voz de mi abuela llama mi atención. 

—¡Brooke! —grita mi bisabuela mientras baja las escaleras que se encuentran a mi izquierda, sigo parada en medio de la entrada, estoy muy impresionada en lo grande y elegante que esta casa.

Veo a mi abuela como siempre tan bien vestida, quizás esa es la razón por la cual mi abuelo me pidió que usara algo más formal que unos jeans y una camiseta, así que tuve que usar mi conjunto de una blusa de cuadros amarillos pegada al cuerpo, una falda de tachones del mismo diseño solo que azul cielo y dos dedos encima de la rodilla, el cuello de mi blusa es liso blanco y con una tira negra, la cinturilla de mi falda por igual; mi casi mini bolso blanco que combina con mis tacones de pico color blanco con flores rojas y azules en la parte delantera. 

—Abuela —Cuando ella llega a mi lado la saludo con un beso de mejilla y abrazo.

—Qué alta estás —dice, todavía la veo y no creo que ella sea la persona que mi abuelo Isacar mencionó ayer.

—Es por los tacones —le digo sonriente dejando de lado la nueva información en mi cabeza, ella siempre es dulce conmigo, simplemente no la imagino haciendo tales cosas.

—Hermosa como siempre —dice tomando mi mano para que me dé la vuelta.

—Yo estaré con Brooke afuera —dice después de saludar a Isacar, supongo que no saluda a Joshua por alguna otra razón. La sigo por el exterior de la casa, bajamos las escaleras y me pierdo en la belleza de resta paisaje, la parte trasera de la casa es completamente ovalada con hermosos ventanales, en medio del enorme jardín hay un camino de concreto, a varios metros de nosotros se encuentran dos bancos de concreto y madera. La abuela sigue caminando cerca de la casa, y llegamos a un espacio que luce bastante relajante, nos sentamos en uno de los sillones de ratán, me doy cuenta que desde aquí tenemos una vista bastante panorámica. 

—Entonces, ¿por qué tanto misterio? Nadie me quiere decir que pasa —le digo y ella se acomoda en el diván frente a mí.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.