Salí en una noche tan oscura en busca de la nada y encontré el todo en el lugar menos esperado, eres el tesoro, la luz, aquella razón que todos buscan y sin éxito mueren en su hallazgo, eres la llama que enciende mi corazón y la cual hace que lata rápidamente con cada cruce de miradas, por mas que me sienta enterrado bajo 10 metros con una presión de 1000 mares tu presencia hace que todo aquel sentimiento se desvanezca reemplazándolo por una caricia en mi alma y un suspiro de aliento en mi vida, porque tu me haces sentir que cerraron las puertas de otro mundo para quedarme solo contigo, oh musa mía! me entrego a ti sin reproche alguno, serás tu mi condena o mi salvación.