Un pequeño detalle

Por fin tenía mis cosas listas para salir de la oficina. Tomé mi cartera y me aseguré de que todas las cosas estuviesen apagadas, después de todo, la oficina iba a quedar sola ya luego de nuestro descanso de dos días, Erick tuvo que viajar de emergencia a Alemania para por fin llevar a cabo la reunión. Me había costado un mundo dejarlo ir, pero entendía que debíamos volver al trabajo, aparte yo tenía que confrontar a mis amigas, así que aproveché que estaba autorizada a trabajar hasta medio día para reunirme con ellas.

Tomé un taxi y le di la dirección de la casa de Karen y René. Repentinamente me sentí muy nerviosa, ¿Cómo les iba a contar que Erick y yo pensábamos casarnos? Se me ocurrieron miles de ideas, sin embargo al llegar a la hermosa casa, no había decidido nada. Me bajé del taxi y justo cuando iba a tocar Karen abrió sonriendo, lucía muy linda con un vestido de flores.

-Te estábamos esperando- dijo abrazándome.

-¿Y René?- pregunté mientras entraba.

-Trabajando para mantenerme- respondió Karen sonriendo- Y para mantener a Mary porque ahora se la pasa metida aquí-

-Vengo casi todos los días a chequearte el embarazo, ingrata- se defendió Mary, apareciendo tras nosotras.

-¡¿YA LLEGÓ DIANA?!- gritó Emma desde la cocina.

-¡Sí!- gritaron Mary y Karen al unisonó. Pude escuchar sus pasos, venía corriendo hacia mí y finalmente al llegar se detuvo y me miró de arriba abajo.

-¿Lo hicieron?- preguntó en voz baja- ¿Tú y Erick lo hicieron?- ante su pregunta me ruboricé, abrí la boca para decir algo, pero los ojos de Mary y Karen se posaron en mí con total sorpresa. A duras penas asentí- ¡LO HICIERON!- gritó Emma celebrando- ¡LO HICIERON, LO HICIERON!-

Las chicas gritaron emocionadas y todas comenzamos a celebrar dando brincos y abrazándonos.

-¿Qué tal fue?-preguntó Karen tomándome de los hombros.

-Más le vale que haya sido tierno y considerado, porque si no lo voy a castrar- advirtió  Emma y yo comencé a reírme.

-Fue perfecto-les aseguré- Él fue tierno, maravilloso y considerado-

-¿Usaron protección?- preguntó Mary repentinamente preocupada.

-Sí, usamos protección- las tranquilicé.

-¿Lo tiene pequeño?- preguntó Karen.

-¿Es precoz?- preguntó Mary con curiosidad.

-¡ASCOOOO!- exclamó Emma tapándose los oídos-Él es como un hermano para mí-

-Ninguna de las dos cosas- admití tapándome la cara con las manos a causa de la vergüenza.

-Bueno ya, sigamos el interrogatorio en la sala- ordenó Mary haciéndonos salir del pasillo. Al parecer las chicas habían organizado algunas cosas, tenían una mesa con bebidas y bocadillos.

-Me alegra que tu primera vez haya sido buena- comentó Karen tomando un trago de jugo mientras que nos sentábamos.

-Pues sí, fue muy buena- reconocí mordiéndome el labio- Fue tan buena que…- me rasqué la nuca tomando la valor- Tan buena que… Erick me pidió matrimonio-

Karen escupió el jugo y Mary ahogó un grito.

-Diana eso es…- comenzó a decir Mary.

-Hermoso- completó Emma y para sorpresa de todas, derramó un par de lágrimas-Sé que ustedes no conocen a Erick tanto como yo, pero él es un excelente chico, una muy buena persona. Ha estado ahí para mí, para mi esposo y para mis hijos cada vez que lo necesitábamos y creo que por fin encontró a la mujer que merece- Emma se acercó a mí y me tomó las manos- Pueden contar conmigo para lo que sea. Estoy orgullosa de ustedes dos y tienen todo mi apoyo-

-Diana, no es que Mary y yo no te apoyemos- explicó Karen saliendo de su trance- Me sorprendí un poco, eso es todo. Y la verdad es que tengo un poco de miedo, porque siempre hemos sido nosotras tres y ahora siento que esta familia no deja de crecer. Mientras más personas amas más miedo tienes de que todo desaparezca-

-Eres nuestra hermana- añadió Mary con un nudo en la garganta- Para nosotras tu felicidad es una de las cosas más importantes que existen. Te vimos enamorarte de Alan, quien resultó ser Erick y fuimos testigos de lo mucho que lo buscaste. El destino los volvió a encontrar y no hay nada que deseemos más que verlos felices-

-Entonces, ¿Les parece bien?- pregunté.

-¡Por supuesto!- aseguró Mary.

-Si se porta mal contigo, lo mataremos- aseguró Karen.

-¡Al fin se me cumplió el milagro!- Emma alzó las manos al aire como dando gracias.

-Tenemos una boda y un parto por planear- comentó Mary tomando un bocadillo.

-Ya solamente me falta que tú te cases Mary- comentó Emma.

-No lo sé, Mary es difícil de atrapar- comentó Karen.

-¿Te vas a perder de atrapar a ese bombón?- le preguntó Emma a Mary- Yo por un cuerpazo así, consideraría divorciarme-

-¡Emma!- la reñimos Karen y yo.

-Esperen, se nos ha olvidado algo- dijo Emma levantándose de su asiento completamente aterrorizada- Diana, ¿Tú ya conociste a tu suegra? ¿Conociste a Alanis Girardi?-