NARRADO POR LEONARDO:

Los ojos de Valeria, me observan con total sorpresa. 

- Leo, no se que decir. Sus ojos están muy abiertos. 
- Siento que no puedo estar lejos de ti. Agacho la cabeza sin saber que hacer, no quiero alejarme de ella. 
- Esta… bien. Suelta Valeria. 
Alzo la mirada hasta Valeria y veo sus ojos con lágrimas que no reflejan tristeza sino alegría y en sus labios una sonrisa enorme. 
Me abalanzó hacia sus brazos como un niño pequeño. 
- MI NIÑA TE PROMETO QUE SALDREMOS ADELANTE.  
Siento el calor de su cuerpo tan acogedor como siempre, es la persona que necesito en mi vida. 
- Solo hay algo que me preocupa, mis padres. Dice muy preocupada. 
- Tranquila, estarás conmigo, tampoco te quisiera presionar, si tú decides quedarte no me opondré, solo quiero tu felicidad. 
- Mi niño, ya lo decidí y desde ahora somos tú y yo. Mis padres me han apoyado y se los agradezco pero ahora me toca apoyarte a ti. 
Acaricio su linda carita, mientras sonrío de felicidad. 
- Gracias mi niña sabes que también te apoyaré a ti bebe.  
- Gracias mi niño. Me sonríe un poco más tranquila. 
- Lo que me preocupa son tus estudios nena. Digo un poco preocupado. 
- Lo sé también a mi, tal vez el próximo año pueda entrar o tal vez pueda conseguir un empleo y estudiar en línea, de todos modos ya lo resolveremos. 
Después de un rato platicando de nuestro futuro, nos dirigimos hacia nuestras casas.  
Tal vez la vida de mi Vale y la mía no será la más fácil, pero con ella a mi lado, nada será imposible. Tengo la esperanza de que saldremos adelante y jamás la dejaría sola… 

2 semanas después… 

Mis padres ya saben lo que Valeria y yo hemos decidido.  
Estoy un poco nervioso, dirijo mis pasos hacia la puerta de la casa de  Valeria, hoy es el día en el que le hablaré a los padres de Valeria, y les diremos nuestros planes a futuro. 
Toco la puerta y después de unos segundos abren la puerta. 
- Hola señora Milton. Digo a la madre de Valeria. Viste un pantalón de vestir negro, con zapatillas altas del mismo color y una blusa blanca con florecitas negras. 
- Hola Leo muy buenas noches pasa por favor, te estábamos esperando. Me sonríe. 
- Gracias. Camino hacia adentro de la casa. 
- Ahora baja Valeria, pero toma asiento, quieres algo de tomar?. Me indica la sala mientras ella espera mi respuesta. 
- No gracias señora así estoy bien. Respondo. 
- Esta bien Leo. Me sonríe. 
La señora Milton camina hacia la oficina del papa de Valeria y desaparece de mi vista. Escucho por las escaleras unos pasos que me indica que Valeria viene bajando. 
Me levanto del sofá y volteo hacia ella, se ve tan linda como siempre, antes de que llegue hacia mí, noto que en su rostro refleja nerviosismo. 
-  Hola nena. Le planto un beso en los labios que me fascinan. 
- Hola Leo. Me sonríe y me corresponde el beso. 
- Mi niña, tranquila he, pase lo que pase estaré contigo. La abrazo mientras ella reposa su cabeza en mi pecho. 
Escucho a mis espaldas que alguien se dirige hacia nosotros, volteamos y ahí vienen los papás de Valeria. El señor Milton está vestidos con un pantalón color gris oscuro, con la camisa blanca remangada en los brazos y zapatos negros. 
- Hola Leo, cómo estás?. Pregunta el señor Milton. 
- Muy bien señor gracias. Digo. 
- Por favor, siéntense muchachos. Nos indica. 
Todos tomamos asiento. 
- Señores tenemos algo muy importante que decirles. Tomo las manos de Valeria. 
- Díganos qué quieren decirnos. Dice el papá de Vale. 
- Ase un par de semanas, recibí la carta de la universidad con los resultados de mi ingreso… no pase el examen, señores. 
- Lo sentimos mucho Leo. Dice la madre de Valeria. 
- Gracias señora, miren, quiero ser honesto con ustedes,Valeria decidió apoyarme. 
Los padres de Valeria la voltean a ver un poco confundidos. 
- Ha que te refieres Leo?. Preguntan. 
- Como aquí no podré estudiar, he decidido irme a trabajar en un par de meses a La ciudad vecina, y… Valeria tomo la decisión de acompañarme. 
Los padres de Valeria se miran entre ellos y devuelven su mirada hacia Valeria sorprendidos. 
- Valeria es cierto eso?. Dicen preocupados. 
- Lo es papá. Dice Valeria. 
- Están conscientes de las cosas muchachos, unirse como pareja es un paso muy importante, aparte de eso que pasará con tus estudios Valeria?.  Dice el padre de Valeria mientras su madre está en total silencio. 
- Mamá, papá… se que ya no podré seguir con mis estudios, pero, tengan por seguro que mis intenciones es que el próximo año presentaré el examen allá y reanudaré mis estudios, pero por ahora necesito apoyar a Leo. Dice mientras dirige su mirada hacia mi. 
Veo que la madre de Valeria sigue con su mirada perdida y poco a poco levanta la mirada hasta topar con los míos. 
- Leo, prométeme que cuidarás de mi niña. Dice y veo que las lágrimas se juntan en sus ojos. 
- Se lo prometo señora, Valeria es lo mejor que me ha pasado y no quiero que sufra ni pienso dejarla sola nunca. Ella es mi prioridad y no quiero jamás hacerle daño. Digo  
- Esta bien. Dice la madre de Valeria. 
Valeria se levanta y va a abrasar a su madre que no puede contener el llanto, mientras que el señor Milton tiene los codos en sus rodillas con la cabeza agachada. Valeria termina de abrasar a su madre y se inca enfrente de su padre. 
- Papá, no te preocupes por mi, él es mi felicidad. Dice mientras se levanta y le da un fuerte abrazo. 
Su padre se levanta y la abraza con los ojos llenos de lágrimas. Se separan y Valeria se dirige a mi, con los ojos húmedos.  
Se sienta a lado mío y reclina su cabeza en mi hombro mientras entrelazamos nuestras manos y le planto un beso en la frente. 
- Muchachos hay una cosa que si quisiera que hicieran, me gustaría que se casaran. Suelta la mamá de Valeria un poco más tranquila. 
- Señora me encantaría casarme con Valeria. Le sonrío y paso un brazo atrás de la espalda de mi niña y la abrazo. 
- Yo, estaría encantada Leo. Me dice Valeria con sus ojos puestos en mi. 
- Bueno chicos aunque nosotros queremos que Valeria siga estudiando, no nos opondremos a sus planes y ustedes ya decidieron así que con o sin nuestra aprobación, se que Valeria te apoyará, así que, también los apoyamos. Dice el papá de Valeria.