Esposa De Un PolicÍa

NARRADO POR LEONARDO: Clóset vacío...

Este capítulo está dedicado especialmente para Elena S. Gracias por el apoyo en redes sociales nena. ❤️

1 semana después…

El cansancio me está matando, ya quiero llegar a casa para descansar.

Voy manejando la patrulla junto con mi compañero, Nos dirigimos hacia la base.

·       Me está matando la espalda. Dice mi compañero.

·       Lo sé también estoy cansado.

·       Esta vez el comandante no nos dejó descansar ni un momento.

·       Ya termino nuestro turno ya iremos a descansar. Digo y nos bajamos de la patrulla al llegar a la base.

Voy caminando hacia adentro para firmar mi salida y veo a Aleja a lo lejos. La ignoro por completo y al llegar frente a la secretaria y firmar, mi celular le llegan mensajes.

Camino hacia afuera de las oficinas y veo que son mensajes de Aleja. Antes de abrirlos, quiero borrarlos pero la curiosidad me gana. Al abrir lo que me envió, siento como mi un enojo profundo sale dentro de mi.

Son una fotos de Aleja y yo. En la primera está solo con un encaje negro, sentada en su cama mientras yo estoy parada frente a ella, se ve como sus manos tratan de quitar mi cinturón. En otra foto se ve a ella por la espalda desnuda y yo frente a ella en la puerta con la mirada en sus senos. Y en la otra maldita foto está ella encima de mi, ambos desnudos en la cama de mi casa, veo como ella está encima de mi miembro besando mis labios mientras yo estaba inconsciente.

Siento como la ira recorre mi cuerpo, guardo mi teléfono en la bolsa y camino rápido hacia el estacionamiento. Veo que está adentro de la que era nuestra patrulla con los pies afuera y la encaro.

·       Que mierda me acabas de mandar. Digo furioso.

·       Hola leoncito.

·       Cómo hiciste esas fotos.

·       Amor, no te confundas, jamás las mande a editar, esas imágenes son de verdad.

·       Pero que carajo estás diciendo.

·       Cariño, ¿ya no lo recuerdas? Es de las veces que me has ido a visitar.

Trato de recordarlo y por mi mente comienzan a llegar imágenes.

·       Borra esa basura que me mandaste.

·       No mi amor.

·       Aleja…

·       Mira cariño te seré clara, no quisiste ser mío por las buenas ok, tendrás que serlo por las malas.

·       ¿Que quieres? Dilo ya.

·       Una cogida tuya.

·       Estás loca. Digo sin poder creer lo que dice.

·       ¿Estás seguro que no quieres? Que dices si le mando las fotos a Valeria a ver qué opina de su esposo.

·       No, espera. Digo al ver que Aleja comienza a seleccionar todas las fotos de ella y yo.

·       Para que veas que soy buena persona, te daré hasta las 11 de la noche.

·       Pero…

·       Ya te dije leoncito, te estaré esperando a las 11 de la noche en mi departamento.

Aleja sale de la patrulla y pasa a mi lado frotando sus glúteos en mi. Yo me quedo hay parado sin saber que hacer. Giro a verla y a lo lejos, la veo irse en un taxi.

Mierda y ahora que hago, Valeria no puede ver esas fotos pero tampoco quiero traicionarla, ya no quiero hacerle daño. Sigo pensando mientras camino hacia mi moto y arrancó hacia mi casa.

Al llegar y estacionar la moto en el jardín me quedo pensando en que debo hace, escucho a lo lejos que alguien me llama, alzó la mirada y es Valeria caminando hacia mi.

·       Mi niño llegaste. Dice y me da un beso en los labios y me abraza.

·       Ho… hola nena. Digo y me bajo de la moto.

·       Ven, ya está listo tu desayuno. Dice Vale muy feliz.

·       Ahora voy nena. Digo y Valeria entra a la casa.

Al verla irse saco rápido mi teléfono y comienzo a borrar las fotos que me mandó Aleja. Al terminar camino hacia la casa nervioso.

Valeria ya me espera con el desayuno en la mesa, siento una gran pesadez en el cuerpo y mi mente esta con lo que acaba de pasar con Aleja, sin notarlo me siento en la mesa y comienzo a desayunar en silencio.

·       Y… como te fue mi vida. Valeria rompe el silencio.

·       Ee, bien, cansado de hecho.

·       Hay mi vida me imagino.

·       Si. Digo y sigo comiendo.

Después de unos minutos ambos terminamos de desayunar y me voy a la habitación mientras que Vale se queda arreglando la mesa.

Comienzo a quitarme todo el uniforme y al estar desnudo camino hacia la regadera y comienzo a ducharme. El agua recorre el cuerpo, al cerrar los ojos no dejo de pensar en la imágenes que me mostró Aleja.

Por lo visto, tiene más fotos. Mierda no sé que are.

Termino de ducharme y camino hacia el armario, tomo mi ropa y me visto. 

Voy hacia la cama y me recuesto sintiendo las suaves sábanas que Vale ha tendido en la cama. Comienzo a estirarme y después de unos minutos recostado, escucho a Valeria que está lavando los trastes. Me levanto de la cama y camino hacia ella, me siento mal por ignorarla, al llegar, noto que está terminando. Comienzo a abrazarla por la cintura y trinco mi cuerpo con el de ella.

·       Nena, acompáñame.

·       Jejeje, si mi amor. Dice y caminamos hacia la habitación.

Ambos nos recostamos abrasados.

·       Duerme conmigo.

·       Creo que te tomaré la palabra.

·       ¿No dormiste ayer verdad?

·       No, tuve pesadillas toda la noche.

·       ay nena, duerme entonces.

·       Si bebe. dice y comienza a relajar su cuerpo.

Trato de dormir pero no logro dejar de pensar en Aleja, después de unos minutos comienzan a pesarme los párpados y sin saberlo me quedo dormido.

Horas más tarde…

Siento sus manos recorrer mi cuerpo, y sus besos en mi cuello, al verla a los ojos, es Aleja.

Carajo, salto en mi cama. Mi respiración está agitada, solo fue un sueño. Giro mi cabeza buscando a Valeria pero no la veo. Bajo las sábanas, mi miembro está erecto. Decido sentarme mientras me froto los ojos, tomo mi teléfono y veo que ya son casi las 3.



#8525 en Joven Adulto
#35610 en Novela romántica

En el texto hay: superacion, amor, traición.

Editado: 01.06.2021

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.