PAIGE WINDSOR.
— ¿Desde cuándo tenés novio? Que yo recuerde jamás pudimos estar juntos por tu miedo al compromiso.
Mierda.
No sabía eso.
— Ya te dije cambie mucho, supere mi miedo y ahora tengo novio.
Lo mire.
— Si es así, que seas muy feliz.
Se acerco a la puerta y la abrió.
— Tengo cosas que hacer. —Hablo parado al lado de la puerta.
No dije nada solo salí de la habitación.
Cerró la puerta detrás mío.
Me quedé unos minutos ahí quieta mirando la puerta y luego me fui.
(...)
— ¿Le dijiste que tenés novio?.
Pierce no ha dejado de reírse desde que le conté lo que le dije a Kendall.
— Podés dejar de reírte, no es gracioso.
Me hace una seña con la mano diciendo que espere.
Sigue riendo.
— Ya está. —Se detiene.
— ¿Ahora que voy a hacer?.
— ¿Que vas hacer con que?.
— Con mi supuesto novio, si no ve a mi novio pronto va a dejar de creerme.
— ¿Querés presentarle un novio falso?.
— Si, pero necesito que vos consigas a algún chico.
— Está bien, yo me encargo.
— Gracias. —Lo abrazo por el cuello.
Beso su mejilla y lo empujó hacia fuera de mi cuarto.
— Conseguilo para dentro de dos horas. —Hable y sin más le Cerre la puerta en la cara.
Me volví a la cama y me heche boca arriba con la mirada en el techo.
Espero que esto funcione, si no estoy muerta.
(...)
Voy bajando las escaleras y me ubico al frente de Pierce en la entrada del castillo.
— ¿Y?. —Pregunte.
— Ya te lo conseguí.
— ¿Te pidió algo a cambio?.
— En realidad no.
Cómo puede ser eso.
Cómo alguien va hacer algo así y no pedir nada a cambio.
Esto es muy raro.
— ¿Cómo no pidió nada?.
— La persona que te va a ayudar ya conoce a Lara.
Ahora tiene más sentido.
— ¿Quien es?.
— Ya lo vas a ver.
¿Por qué tanto misterio?
Cierto, es Pierce.
Él siempre hace de todo algo misterioso.
(...)