19. Noa: el novio de Sara

♡Dedicado a: Anita Rocha♡

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Habíamos estado lo suficientemente callados todo el viaje como para sentirme lo bastante incómoda. No habían sido mas de un "entra al auto" y "eres un idiota manejando Tyler" lo que habíamos intercambiado. Sin embargo, el tiempo había pasado más rápido hasta llegar al edificio.

El caminaba un escalón mas, mientras yo me dedicaba a símplemente mirar el arete de su oreja izquierda y su cabello mientras mordia mi labio tratando de imaginar cualquier conversación por mas estúpida que fuera para romper el silencio, pero nada, no se me ocurría  ¡nada!

De pronto se detuvo haciendo que chocara contra el. Se quedó quieto observando algo a lo que no le presté mucha atención, mis ojos solo podían ver lo perfecto que se veía de aquella manera tan sería.

Sacudi mi cabeza tratando de evitar esos idiotas pensamientos.

Giró su cabeza lentamente hasta encontrarse con mis ojos, pero se veía extraño, no sabía muy bien si era su mirada lo que me lo parecía. Quise girar para ver de que se trataba pero sus manos fueron mas rápidas sosteniendo mis mejillas algo frías.

Sentí un extraño calor interno.

Pestañe un par de veces y con la mirada le di a entender que no tenía ni mera idea de lo que pretendiera estar haciendo. Mis palmas subieron lentamente hasta estar cerca de las suyas, y con delicadeza y algo de temblor toqué sus manos apartandolas de un solo tirón.

—¿Que... haces?  —el no contestó nada en absoluto. Al contrario de lo que pensé sus manos me jalaron por la cintura oprimiendome contra su pecho.

Ha este punto ya lo podía catalogar como un absoluto "loco, bipolar". Primero me besaba, luego me rechazaba, luego me evadia, despues descaradamente me volvía a evadir y ahora... realmente ahora ni yo misma sabía lo que estaba haciendo.

Luego de unas pequeñas luchas entre mis puños y su pecho logré apartarme de él.

—¿Que jodido problema tienes demente? —le susurre envolviendo mis manos sobre mis brazos.

—¿Que hay intento de parejita perfecta? —esa familiar y chillona voz me dejo casi en pánico; la mano de Tyler rápidamente tomó la mía.

Ahora lo entendía todo; porque me miró, porque me dio su atención, porque me tomó de las mejillas, porque me estampó contra su pecho... porque me trató tan tiernamente.

Sara se recosto contra la puerta mientras su cuerpo estaba cerca de ¿Noa?... ¡espera! ¿que hacía Noa en mi casa?

No pude evitar poner mis ojos sobre su cuerpo, de la cabeza a los pies, tenia una camisa a cuadros y unos pantalones negros rotos que le hacían ver muy sexy... Estoy segura que mi mirada casi me haría pasar por una pervertida.

Sara Sonreía mientras el nos miraba, mas a Tyler que a mí, por supuesto, con una clara indiferencia. Era extraño que aún no hubiera hablado. Subimos el último escalón, dimos un par de pasos y finalmente quedamos frente a ellos.

—Kelsie... te ves hermosa —su comentario tan fuera de lugar me hizo incluso fruncir un poco el ceño, ladee unos segundos mi cabeza, tenía curiosidad por ver la expresión de Tyler.

—Deja de hacerle esos cumplidos baratos y mas bien dinos porque carajos estabas en su casa —cuando menos pense el pecho de Tyler me envolvía atras de mi espalda, pero no era algo incómodo, era algo muy reconfortante, inclusive podría decir que era el primer contacto físico que no llegaba a molestarme o a ponerme nerviosa. Mis manos tocaron sus brazos que estaban alrededor de mi clavícula.

Noa formó una sonrisa sarcástica mientras se metia nu cigarro en la boca, inhalo el humo para despues como si no le importará nada,  botarlo sobre nuestras caras.

—¡No hagas eso! Resulta molestó.

—No debo darte explicaciones a ti Stone —soltó el, evitando completamente lo que yo estaba diciendo.

—Pero yo sí —Sara se acercó a nosotros poniendo su brazos sobre los hombros de Noa —es obvio, mis padres no estaban, Kelsie tampoco. Debíamos aprovechar ¿acaso quieren mas detalles? —dejo de mirar a Tyler y se giró poniendo su atención en mi, formando un puchero de falsa inocencia —¡oh espera! La pequeña Kel esta aquí, no quiero que cuando sepa lo que paso allí adentro empiece a llorar.

Sentí como la mano de Tyler apretó la mía hasta el punto de hacerme retorcer un poco.

—Sara tú me enfermas —soltó Tyler con tono de asco.

Escondi mi tristeza y decepcion por sus palabras y forme una pequeña sonrisa falsa. Si, ya era tiempo de dejar de ser tan débil frente a todos.

—¿No crees que... sería muy estúpido llorar por un pedazo de basura como el que tienes al lado? Solo piensa un poco Sara —trataba de ser dura, pero no podía evitar pensar en el hecho de a quién le dedicaba todas estas palabras era a mi hermana, ella era una maldita conmigo pero seguía siendo eso: mi hermana.—Este tipo te trato no se desde hace cuanto como su segunda opción, te utilizo ¿que no lo ves?

Todos no quedamos en silencio, y llámeme o no masoquista pero estaba anciosa por escuchar sus respuestas y estaba anciosa por saber todo lo que había pasado y desde hace cuánto me habían estado engañando.

Noa estuvo a punto de responderme pero Sara nuevamente se le adelantó —p-pero —no pude evitar tener una sonrisa satisfactoria al notar que había logrado uno de mis objetivos: hacer que tartamudeara; secretamente la conocía tan bien, que sabía que cada que hacía esto se sentía estúpida —ya no es así... ahora somos algo.

"AHORA SOMOS ALGO" esas simples palabras resonaron fuerte en mi cabeza.

Tyler me abrazo con mucha mas fuerza acercando su mejilla contra la mía, aquéllo lo agradecí.

—Felicidades —aplaudió Tyler aún abrazandome —pero ten cuidado. Se que clase de escoria es esta; y si es capaz de engañar a alguien con su hermana, alguien a la que decía "amar" no quiero ni imaginar que te puede esperar a ti en el futuro —¿el acaso me estaba defendiendo?

—¡¡Cuida tus palabras Stone!! Me he retenido de golpearte la cara, pero una más y... —Tyler se separó de mi hasta pararse frente a Noa quién lo señalaba amenazante.