Euphoria Shop

Zero O'Clock

El arrullo de la lluvia se escuchaba alrededor de toda la ciudad, todos se encontraban dentro de sus hogares disfrutando de la compañía de los que viven bajo el mismo techo, pero un departamento en particular ignoraba el cantar de la lluvia al cocinar junto a la melodía de la canción que pasaban por la radio.

Sus pasos divertidos se detuvieron al mismo tiempo que la canción, conocía cada una de esas canciones al pie de la letra junto a memorias insuperables que su corazón deseaba regresar al pasado y volver a vivir. ¿Es que acaso era posible volver a vivirlas en vida y no desde sus recuerdos? 

Los reporteros de la emisora anunciaron sobre una deslumbrante noticia, una que podía traer a la realidad cualquier cosa que desearas. Esas fueron las palabras clave para que saliera de la cocina y se sentará frente a la emisora escuchando atentamente.

—Esta noche, a la una de la mañana una lluvia de estrellas se podrá ver en los cielos de Malta. No se pierdan este hermoso espectáculo.

—Saldré a pedir mi deseo.

—Todos podrán hacerlo y ¿quién lo sabe? Puede hacerse realidad.

Elvis Presley volvió a dominar la emisora después de los comentarios entre ambos hombres sobre el espectáculo nocturno. No volvió a la cocina, sus pies le arrastraron a la segunda planta de su solitario departamento sin darle una mirada a las fotografías en la pared cuando de haber sido horas antes de que su corazón se disparará y aquel brillo perdido regresará se detendría para mirarlas durante horas, una a una, deslizando su dedo sobre la foto reviviendo esos momentos en su mente, donde su corazón latiría a una velocidad deslumbrante, pero a su vez dolorosa, martirizante, un dolor tan profundo que tocaría su alma y una lágrima se deslizaría siempre sobre su mejilla.

Sus pies le detuvieron frente a una cadena, la tomo entre sus manos y tiro de ella desplazando las escaleras para subir al polvoroso ático. Miro dentro de la oscura y pequeña habitación donde el polvo le robo un estornudo antes de tomar una caja, bajar las escaleras y cerrar de nuevo la puerta del ático. Volvió a correr escaleras abajo rumbo a la sala de estar en donde se sentó sobre la alfombra y miro la caja sucia por el pasar de los años.

Una nota todavía se encontraba sobre la caja, una que al pasar del tiempo se encontraba delicadamente ubicada sobre el maltratado cartón. La prolija escritura le dolió un latido, pero una sonrisa divertida se posó sobre sus labios al leerla nuevamente.

Ponlo en el balcón y así me verás al despertar.

J.S

Suspirando abrió la caja mirando las piezas del telescopio esparcidas sobre la alfombra a su alrededor. Tomando otra profunda respiración junto al poco valor en su cuerpo comenzó a armarlo donde los demonios de su pasado lo acechaban y lastimaban sin piedad. En ese entonces hermosos momentos vividos que le daban la sensación de flotar sobre las nubes, ahora unos que dañaban su corazón, pero ahí estaba, juntando las piezas de ese telescopio que de algún modo también se reflejaban en sus memorias. Estaba reconstruyendo un telescopio, pero con cada pieza una lágrima se escapa y luego un sollozo.

¿En qué momento armar un telescopio se convirtió en algo tan doloroso? ¿Tan agudo el dolor como para dejarle llorando en la oscuridad de su hogar al compás de la música de su pequeña radio?

La oscuridad consumió por completo su alrededor y la lluvia se detuvo dejando consigo una llovizna, la radio seguía con su transmisión de música de la época y su única iluminación era la tenue luz que venía desde la cocina. Y entre lágrimas fue capaz de armar por completo el telescopio dejando el instrumento ante sus ojos.

Limpió las lágrimas con el dorso de su mano y tomó la caja del telescopio para dejarla sobre el pequeño sofá, una hoja amarillenta salió de esta volando hasta caer en su regazo. Otro suspiro se escapó de sus labios al tomar la hoja entre sus manos y mirar de nuevo esa prolija letra.

13 de Junio

De: J.S
Para: J.S

¿No es bonito leer mi apellido junto a tu nombre? Sueño con el día en donde nos casemos. Será una boda bonita, lo prometo.

Lejos del prejuicio de los otros, siendo libres para amarnos como siempre hemos querido, ¿no suena lindo?

Un sueño. Un sueño que temo no sea realidad. Nuestro amor no es para esta época, ¿por qué no nacimos en otra?

Aunque sin importar las consecuencias, lucharemos juntos, ¿cierto?

Hasta que la muerte nos separe y volvamos a reencontrarnos.

Firma: J.S

Su corazón terminó de romperse en aquella noche silenciosa y fría. Sus sollozos aumentaron el volumen siéndole imposible escuchar la canción que pasaba por la radio. ¿Por qué sin importar el tiempo transcurrido seguía doliendo esa herida como ese mismo día? ¿No fue lo suficientemente valiente para superarlo? ¿No lo ha hecho en todo este tiempo en soledad? No, porque siempre lloraba al ver sus fotografías, al revivir esas memorias o al escuchar esas canciones.

Porque inconscientemente para llenar su vacío siguió una rutina.

Escuchar sus canciones.



#12944 en Fantasía
#1605 en Paranormal
#567 en Mística

En el texto hay: misterio, ficcion y fantasia, amor y miedo

Editado: 07.08.2021

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.