Samantha y Anne se sentaron a un lado de la carretera una vez que Samantha contestó todas las preguntas de Anne, se sentía sin un peso encima de ella, era lo único con lo que se sentía mal mentirle. Era una carretera que estaba totalmente vacía y que posiblemente hasta en la mañana pasaría alguien, y seguían esperando a Stefan, quien dijo que vendría en algo que compró desde que llegó a Vancouver.
Anne encendió su celular que estuvo apagado durante toda la velada, después el teléfono de Anne comenzó a sonar, Anne se fijó en la pantalla y vio que era Ezequiel, ¿Qué quería?
—Hey—. Anne contestó y en seguida Ezequiel respondió.
—¿Qué pasa? —. Habló Anne algo cerca del micrófono del teléfono—. ¿Por qué llamas?
—¿En dónde estás? —. Anne activó el altavoz para que Samantha también escuchara—. ¿A dónde fuiste?
—Fui a un bar llamado The alibi room—. Anne miró a el cielo mirando la luna y a su vez las estrellas—. ¿Qué ocurre?
—Llevo horas tratando de contactarte—. Samantha miró a Anne y levantó los hombros—. Viene en camino Sergey Inavov.
—¿El lobo puro? —. Anne preguntó a Ezequiel—. ¿A qué viene a casa?
— No lo sé—. Ezequiel recordó que a Anne no le gusta ir sola a restaurantes nuevos—. ¿Con quién fuiste a el restaurante que no tenía idea que existía?
—Con Samantha—. Anne miró a Samantha y el ojo verde de ella soltó un destello dorado—. ¿Por qué?
— Se que no acostumbras a ir sola a restaurantes nuevos—. Ezequiel habló—. Entonces me pregunté que con quien podrías ir.
—Hey, tengo que colgar—. Anne escuchó un motor que estaba como a trescientos metros de ellas—. Ya llegó nuestro transporte.
—Está bien—respondió Ezequiel mientras tocaba la puesta de su casa—. Asegúrese de llegar rápido y bien, adiós.
Anne colgó la llamada y se paró de la carretera en donde estaban sentadas, le ofreció la mano a Samantha quien tiró de ella y logró atrapados con su cuerpo y le dio un beso en cada mejilla, otro en la punta de la nariz, el otro en la frente y finalmente uno en los labios.
Llegó a toda velocidad Stefan en una motocicleta con un Sidecar, que era un vehículo de una rueda enganchado a la moto creando así un vehículo de tres ruedas.
—Hola niñas—. Stefan se bajó de la moto e hizo un ademán con las manos—. ¿Qué tal se ve?
—¿Cuándo compraste eso? —. Samantha preguntó mientras miraba y tocaba la moto—. ¿Cuánto te costó?
— Lo compré con una casa junto con un garaje que estaba vendiendo una viejita para pagar su asilo—. Stefan explicó razonablemente—. Y le compré también a Sidecar, la motocicleta la gané en una especie de subasta y mandé a componer todo.
—¿Qué en total fue? —. Samantha quería saber cuánto dinero se había gastado y donde lo había sacado—. ¿A quién le pediste el dinero?
—Le pedí dinero a un viejo conocido—. Stefan se rascó la nuca mientras miraba a Samantha—. Fueron un millón y medio de dólares.
—¿Un millón y medio de dólares? —. Samantha se acercó a él con una velocidad escalofriante—. ¿Compraste una casa con garaje y una moto con Sidecar? Fue una buena inversión, pero ¿Cómo pagarás el dinero?
—Fue más bien algo que mi conocido me debía—. Stefan le hizo una señal con la mano para que entrarán en la moto.
— Yo quiero ir en el Sidecar—. Anne habló antes de que Stefan abriera la boca—. Antes de que alguien pida el lugar.
Anne se subió al Sidecar, dentro del sidecar estaba tres cascos que paso a cada uno y todos se los pusieron, se sintió como una pequeña niña, Stefan subió a la motocicleta y Samantha subió atrás de él.
Stefan arrancó la motocicleta y comenzaron a avanzar con dirección a casa, Anne sentía como el viento soplaba, en su cara, lo recordaba como cuando se transformaba en loba y corría por el bosque, mientras sentía el aire atravesando su cara.
"Stefan, podrías decirme por qué compraste la casa"
"Ezequiel habló con nosotros en la noche de chicos cuando estábamos borrachos, ya sospecha que alguno de nosotros está saliendo con Anne y dijo que lo echaría de la casa".
"Entonces por eso compraste la casa, por si me llega a echar".
"O podrías usarla para cuando vivas con Anne, en algún punto necesitarán vivir solas y hacer sus cosas"
"¿Cosas?" Preguntó Samantha
"Olvídalo" Stefan le dijo mientras seguía manejando.
Estaban doblando una curva cuando un carro casi los atropella, e hizo que se detuvieran, el carro por otra parte arrancó a toda velocidad como si nada hubiera pasado.
—Estúpido auto—. Habló Stefan con los dientes apretados—. No importa, ya nos vamos.
Stefan arrancó la motocicleta a toda velocidad y en pocos minutos llegaron a casa, Samantha abrazaba a Stefan y miró las estrellas, y volvió a observar la luna, quien estaba pronta a convertirse en luna llena.
"Tiempo de cambios" pensó inmediatamente Samantha al ver la luna.
—¡Ya llegamos! —. Gritó Anne al ver la casa y tocó el tablero del Sidecar.
—Stefan se quitó el casco y entró directamente a la casa, dejando la motocicleta en la acera de la casa. Samantha ayudó a quitarle el casco a Anne, y luego ayudarla a sacarla del sidecar en donde ella se metió dentro, pero no consideró antes de meterse que podría ser que el sidecar era un poco estrecho.
Samantha aplicó mucha fuerza pero la precisa, para no destruir el sidecar o lastimar a Anne y la tomó en los brazos.
— Mi heroína—. Anne le dio un beso sonoro en la mejilla mientras Samantha la cargaba y la llevaba a la entrada de la casa y la bajó en las escaleras, se sentaron, disfrutando de su compañía y el frío que había en ese momento—. Amo el frío con toda mi alma, pero disfrutarlo con alguien más es mejor.
—¿Bromeas?, Me estoy muriendo de frío—. Anne le dio un golpe en la rodilla a Samantha quien tomó el brazo y lo jaló para darle un beso.