5. PROYECTO NUEVO

Damaris: ¿Qué es lo que ven mis ojos? 

Ulises: Ven, te cuento mientras estos siguen hablando. 

Dennis: ¡Oye! No seas así con él. 
Ulises: Ay ya, ven Damaris. 

– Ulises agarró mi muñeca, me jaló así alejandonos de Dennis y Oscar.

Damaris: ¿Por qué me alejas o por qué esa apuración de irnos? Eso me dolió un poco. 

Ulises: Lo siento, pero necesito contar el chisme así de rápido. 

Damaris: Pues cuenta rápido. 

Ulises: Resulta que el "chico nuevo" se nos acercó. 

Damaris: ¿Qué sucedió exactamente? 

Ulises: Estábamos Dennis y yo esperando a que llegarás, cerca de la entrada, ya sabes... En el lugar de siempre, pasarón a lo mucho 4 minutos hasta que llegó el "chico nuevo" pensé que nos iba a insultar o comportarse como aquel día pero no, al contrario se disculpó con nosotros, casi se arrodilla para que aceptemos sus disculpas, Dennis lo hizo sin pensar hasta sonrió pero yo... Hay algo de él que no me agrada. 

Damaris: Ahora dime, ¿qué es lo que no te agrada? 

Ulises: No sé, hay un algo que simplemente no me cae, ¿si entiendes? 

Damaris: Suele pasar eso cuando ya tuviste un choque con alguien así que no te culpó, también me pasa algo similar con él solamente... No quiero sacar conclusiones antes de tiempo. 

Ulises: ¿Qué me recomiendas hacer? 

Damaris: Intenta sobrellevarlo, no lo conocemos bien así que... Ese sería mi consejo, intenta poner de tu parte, no seas grosero y no seas tan intenso ve poco a poco sabrás si el tiempo los une o simplemente no se da una amistad, no queremos obligarte a algo que no quieres, ¿verdad? 

Ulises: Sí, lo voy a intentar pero cualquier cosa te digo porque Dennis lo va a defender seguramente. 

Damaris: Tampoco se trata de darle prioridad a otro ya sea por años de conocerse o porque apenas lo van conociendo. Así pasa en cualquier tipo de relación y más cuando llega alguien nuevo en un círculo que ya se estableció como ahora con nosotros. 

Ulises: Tengo esa sensación con Dennis, ¿puedes hablar con ella? Ella... Es capaz de creerle a Oscar solo por ser "el nuevo" no quiero que se acabe nuestra amistad por alguien que apenas conocemos. 

Damaris: Oh... Voy a decirle en su momento, ¿si? Ahora regresemos con ellos. 

Ulises: Ya casi es hora de la primera asignatura, vamos a las escaleras para subir rápido, luego esos hijos de .... Se llevan nuestras bancas y nos dejan lo peor a nosotros. 

Damaris: Cierto, entonces vente ya nos van alcanzar Dennis y Oscar en el salón. 

– Me acerqué junto con Ulises a las escaleras, faltaba 2 minutos para que dieran el toque hasta que me habla Ulises. 

Ulises: Damaris... 

Damaris: ¿Qué sucede Ulises? ¿Te sientes mal? 

Ulises: No, no me siento mal solo que... ¿recuerdas cómo nos conocimos? 

Damaris: Eso tiene años, tengo nulos recuerdos pero creo que fue en... 

– No pude terminar la frase, habían tocado la campana para que fuéramos a nuestras aulas. El ruido que provocaban mis compañeros al subir no me dejaban escuchar a Ulises, veo que me hace señas, supongo para subir. 

– Perdí de vista a Ulises en las escaleras, me distraje porque había varios empujones hasta que por fin llegué a mi salón. 

Damaris: ¡Ay! Ya ni en periférico se empujan tanto, ni siquiera toman apunte pero les urge llegar "para aprender" supuestamente. 

Dennis: ¿Estás bien Damaris? 

Damaris: ¿En que momento subiste? No te ví. 

Dennis: Oh... En lo que ustedes se fueron, Oscar habló con algunas maestras para que nos dieran paso antes de que subieran todos, solo que andaban rondando en el pasillo por cualquier cosa inusual que vieran. 

Damaris: Mañana me subiré con ustedes, no nos vayamos a caer en las escaleras, ¿y sabes qué es lo peor? NUESTRAS BANCAS, se las vayan a quitar esos... Ellos. 

Dennis: Te entiendo, pero sino agarras tu banca ahora no te sirve de nada que hayas llegado temprano al salón – Miró a otro lado. 

Damaris: ¡GRACIAS POR RECORDARME! ¡¡MI SILLA!! 

– Fui corriendo por una silla en buen estado, el salón se estaba llenando así que era poco probable en encontrar mi banca. 

¡MI BANCA! – Exclamé con alegría. 

– Ya estaba lista para acomodar mis cosas, cuadernos y libros en orden. 

¡BUENOS DÍAS JÓVENES! – Dijo el maestro. 

– ¡BUENOS DÍAS! – Respondió la clase. 

– Así pasaron las horas de clase, faltaban 50 minutos para el receso hasta que nos avisaron que no llegaría nuestro maestro de matemáticas. 

– ¿Por qué no vendrá el maestro? - Preguntó un compañero confundido. 

– No vendrá por unos problemas que le surgieron pero dejó un trabajo en parejas, él hizo la lista así que se las daré en un momento, voy por los materiales que me dió ¡NO HAGAN DESORDEN! 
–Respondió la prefecta así retirándose del aula. 

Ulises: Que flojera, nos hubieran dejado tiempo libre. – Dijo enojado. 

Dennis: No sea flojo, no ves que que esto te podría afectar en un futuro. 

Damaris: Con flojera o no tenemos que hacer nuestras responsabilidades, no te quejes niño. 

Ulises: Es matemáticas... No entiendo mucho y eso me enoja dándome más flojera de hacerlo. – Dijo con una mirada un tanto decaída. 

Oscar: Si estamos juntos yo te ayudó, soy un poco hábil en matemáticas, lo digo por si gustas mi ayuda. 

Ulises: Oh... Gracias, le tengo más confianza a Damaris ella es buena no sólo en matemáticas en todas las materias, ¿verdad Damaris? – Mencionó desafiante. 

Damaris: ¿Yo? Eh... – Me quedé pensando en una respuesta ingeniosa – No soy tan buena, solo se me da en algunas cosas, aún así pueden venir cualquiera de ustedes a pedirme ayuda si es que entiendo jeje – Mi risa nerviosa no me ayudó al último.