Ingresando sin ningún problema a la Academia Zygmunt esa persona misteriosa levanto su mano derecha para revelar un extraño guantelete con circuitos integrados, moviendo su mano y sus dedos de una extraña forma el disco negro con bordes grises dio un giro antinatural para regresar a su mano < ¿Telequinesis? ...No, ese disco debe ser un dron que controla usando ese guante> pensé para mí mismo.
Esa persona guardo el collar con las tres chapas militares debajo de su ropa, su apariencia era terrorífica y su aspecto andrógino no me dejaba averiguar si se trataba de un hombre o una mujer, aun así, por su largo cabello azul oscuro atado detrás debía tratarse de una chica.
Para algunas personas mi apariencia puede resultar “aterradora” ya que el experimento de Suplementación cambio el color de mis escleróticas a negro, pero esta chica emanaba un aire “aterrador” muy diferente. La mitad izquierda de su rostro estaba hecha de partes robóticas incluyendo su ojo izquierdo, el cual emanaba un brillo amarillo blanquecino a diferencia de su otro ojo que era azul oscuro. Eso sumado a la expresión de su rostro y a las arrugas debajo de su ojo y boca le daba un aspecto muy aterrador.
La chica aterradora se detuvo y me observo de tal forma que me provoco un escalofrió en la espalda -Disculpa, no tengo ningún problema contigo. Puedes marcharte y no formar parte de esto.
En un pasado hubiera aceptado esa propuesta sin duda <Este no es mi problema y no tengo porque participar de esto> no obstante las palabras que salieron de mi boca fueron totalmente diferentes –Ni lo sueñes, si tienes un problema con ellos, entonces también lo tienes conmigo –exclame firme y sin titubear < ¡Maldita comprensión absoluta que tuve con Constantine!> maldije en el interior de mi cabeza sin poder dar marcha atrás a mis propias palabras.
Dejando salir un suspiro esa chica bajo la mirada –Oh que desperdicio, pero como quieras. Tendré que matarte a ti también si interfieres.
Otro escalofrió recorrió mi cuerpo y temblando observe al alto chico moreno a mi lado -¿Qué hacemos? ¿Llamamos a la Fundación S.P?
-Oh excelente idea Iván, los llamamos y les decimos “Hola soy uno de los líderes del Culto a la Ciencia, una organización de las profundidades de la ciudad. Alguien quiere matarnos, manden ayuda” –contesto ese perro faldero con su actitud tomado un giro extraño, tal vez era propenso a irritarse en situaciones críticas como esta. Sin embargo, al ver sus recuerdos no había notado antes que reaccionara de esa forma, y que tratara con desdén a los demás en situaciones como esta era algo más que yo haría y no él –Lo siento –concluyo el tapándose el rostro avergonzado al darse cuenta de lo que acababa de decir.
-¿Ya dejaron de pelear chicos? –Interrumpió la chica compañera de Constantine con más experiencia –Te diré lo que haremos chiquito, lo que siempre hace el Culto de la Ciencia. Resolver directamente el problema –terminando de decir eso, ella saco una pistola del interior de su bota –Tu también saca tu arma –le susurro al compañero que tenía al lado, y este último obedeció.
-¿Puedes aguantar un rato? – pregunto el líder a su compañera. Aunque ambos parecían conocer esa respuesta ya.
-Encargarme de imbéciles como él es algo de todo el tiempo.
-Excelente – acto seguido, giro su cabeza para verme –Vamos Iván.
-¿Qué? ¿A dónde? ¿No vamos a luchar también?
-Sí, pero primero tenemos que ir a buscar mi moto. No la estacione muy lejos de aquí.
Aceptando sus palabras corrimos y lo seguí por detrás.
-----O-----
Aquella persona de apariencia andrógina llevo una de sus manos al pecho –Que tierno hacer tiempo para dejar que escapen ellos dos, pero es inútil. Cuando acabe con ustedes dos iré a cazar a su líder –llevando su brazo para atrás tomo impulso para arrojar con fuerza el dron con forma de un disco. Este se dirigió hasta ellos, pero ambos lograron esquivarlo sin problemas.
-Eso ya lo veremos pedazo de mierda –sin perder más tiempo Átomo 3 saco su pistola para apuntar directamente en el centro de la cabeza de su oponente, su puntería era perfecta y no fallaría el tiro. Sin embargo, apenas revelo su arma esta misma escapo de su mano para caer en el suelo lejos de su alcance debido a una fuerza antinatural que la empujo.
La mujer adulta observo para delante y aquella persona tenía un guantelete en su mano izquierda que le llegaba hasta el antebrazo, su palma abierta estaba apuntando directamente al lugar donde se encontraba su arma < ¿Telequinesis? De todas formas, eso no importa> pensó ella molesta. Aunque sin dudarlo observo a su compañero y le dio una orden -¡Ahora!
Su compañero, conocido como Átomo 12, pego un dispositivo metálico y cuadrado en el suelo para acto seguido disparar su pistola. El gancho que salió disparado se ató alrededor del brazo derecho de su oponente y presionando un botón del cubo metálico en el suelo este enrollo el hilo que tenía atado al gancho.
Confundido Bael observo el hilo casi invisible atado alrededor de su brazo, aun así, antes de poder actuar este hilo lo tiro con fuerza de su brazo hasta hacerlo caer al suelo.
//Hermano//
Una voz femenina hablo en el interior de su cabeza dejando un eco astral por detrás –Estoy bien –contesto este último. Él se encontraba arrodillado y el hilo invisible tiraba con fuerza de su brazo derecho, por lo que utilizaba toda la fuerza de sus piernas para evitar eso.
//Una polea está tirando del hilo, a este paso va a arrancarte el brazo//
Escuchando a su hermana observo un pequeño cubo metálico del tamaño de una pelota de tenis pegado a los pies de Átomo 12.
-Si no mueves tu mano no puedes realizar los comandos para llamar a tu dron ¿Verdad? –Esas palabras provenían de Átomo 3, esa joven y linda mujer adulta tomo de vuelta su arma y se acercó para apuntar a la cabeza de Bael -¿A qué se debe esta venganza? ¿Eras amigo de alguna de las personas quimera que asesinamos en el atentado del laboratorio 134 el otro día? Ellos estaban sufriendo y esa experimentación humana era ilegal.
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Editado: 24.05.2022