¡Estas loco! Eso fue lo primero que le dije a mi jefe con el que me acababa de encontrar en un café.
Jack, que así se llama, puso un sobre café en la mesa, este contenía un nuevo contrato, cosa que no me hacía gracia. Habíamos trabajado bien durante los últimos dos años, mis obras ya eran conocidas sin contar que se encontraban en el top 5 de las más leídas en la web, así que no entendía por que decidió que tenía que cambiar de genero literario. Claro si no fuera por esa tal Pink Rose, o quien quiera que se llame así no estaría en este problema.
Para hacerlo más sencillo de entender, las cosas comenzaron hace tres meses cuando pink rose se posicionó como número 1 en el top de los más leídos, con sus únicas tres historias publicadas, de las cuales sólo una está terminada.
Sólo llevaba medio año publicando sus historias y ya había logrado posicionarse número uno en lecturas y tendencias. Su primer obra fue y aún sigue siendo el boom del momento; y yo con mis dos años de experiencia en la plataforma, mis buenas obras y disposición de trabajo, había bajado al cuarto puesto, cosa que aunque no es mala para alguien como yo, no es aceptable, o eso decía Jack.
Esto no me había parecido que fuera un problema, hasta que hace unos minutos todos mis esfuerzos y sueños habían sido amenazados por su culpa.
—Pig Rose,!si!, así debería llamarse.
La voz de Jack me sacó de mis pensamientos sobre cómo debería manejar esta situación.
—¿Que dijiste?
—Nada, creo que estas oyendo voces.
Una sonrisa fingida se escapó de mí rostro, el con una mirada de desinterés empezó a buscar algo en su negro maletín.
Nunca hice el intento de leer lo que Pig Rose, digo Pink Rose, escribía ya que nunca me interesó, pero cuando vi que estaba emergiendo fuertemente decidí curiosear su perfil y obras.
Mis ojos no pudieron con tanto rosa, aunque ya debía de imaginarlo, con sólo recordar su nombre las cosas cobraban lógica, su género literario principal era el romance, pero no eran las dulces escenas de confesiones de amor entre la pareja principal lo que llevó a sus historias a ser tan popupales, ni sus tiernas escenas de besos o dramas, aunque eran muy buenas lo que en realidad había impulsado su popularidad fueron, las candentes y eroticas escenas de sexo que escribía en cada novela, lograba atraer a mucho público. Mi brillante futuro planeado empezaba a opacarse por la nueva sombra en mi camino llamada Pink Rose.
El nuevo contrato que Jack me puso fue pasar a mi segundo género literario, y dejar a un lado el terror para empezar a escribir una novela de suspenso y lograr crear una historia donde el romance logrará sobresalir al igual que las candentes escenas de sexo, que por obligación no podían faltar, no me parecía, era algo inaceptable para mi, el quería que escribirá como Pink Rose lo hacía.
—¡Estas loco! , te lo repito nuevamente, no harás de mi una Pink Rose 2.0, ni lo sueñes.
Su seria mirada se fijo en mi por unos segundos, cerró su maletín mientras dejaba el otro sobre en la mesa, posó sus codos en la superficie, junto las manos en un puño y me miró fijamente antes de hablar.
—¿Pink Rose 2.0?, ¿Enserio?, ¿Por qué lo dices?
Su mirada interrogativa me confundía, sus hermosos ojos marrón claro me inquietaba.
—¿No es obvio?, me pides que cambie mi género literario principal, que aumente el romance y el erotismo en mis escritos, ¡que lea y aprenda de Pink! dijiste hace una semana cuando me insinuaste por primera vez el trato, ¿Eso responde a tu pregunta?
Mi autocontrol estaba agotandose, si seguía así podría llegar a romper el sobre en su cara y quizá botarle los trozos de papel en su preciado traje de pingüino.
—Mira Alexa, que hagas lo que te pido en el contrato, no significa que te vayas a copiar de Pink ¿Si?, tan solo abarcaras nuevas experiencias que te ayudarán a mejorar y volver a ser la reina de la nolweb, no puedes seguir únicamente con tus historias de terror y suspenso, tus ideas han sido muy buenas, pero ¡hay que vender cariño! debemos ofrecer lo que se demanda más, y en este caso es el romance junto con el erotismo, esto es un círculo de ellos piden, tu haces y nosotros vendemos, entiéndelo, es un gana-gana.
Su sonrisa de zorro astuto se dibuja en su rostro, este hombre con tan solo 29 años de edad es una fiera en los negocios y contrataciones, no deja ni una, quizá por eso está en la cima de las compañías y editoriales que manejan el mundo de la web novel.
Hace unos 10 años que se inició este imperio cuando en distintos blogs se empezaron a publicar pequeñas historias, que luego pasaron a escribirse en la nolweb, plataforma virtual que en cuestión de meses creció exponencialmente en lectores, razón por la cual varias empresas y editoriales empezaron a publicar en físico aquellas historias que más lectores lenían, a cambio de publicidad y participación de las ganancias.
Cabe decir que estas no eran pocas ya que se traducirán en la mayoría de idiomas posibles y en muchos casos se hacían series o películas del libro y en el mejor de los escenarios hasta lograbas convertirte en un gran guionista, por lo cual todo se había organizado con mucho cuidado, así que crearon el premio "time nolweb award", que se realizaba cada 15 de diciembre, este concedía al ganador un curso necesario para convertirse en escritor y guionista reconocido con aval de la Casa Reina cinematográfica "Master film", ganar ese premio era ganar el boleto al estrellato.