Cuando Vincenzo cruzaba en la esquina, Mauricio lo estaba aguardando.
-Vamos, pasaremos donde Kevin.
Mauricio tenía un vehículo pasado de moda que su padre le había facilitado para trasladarse a su centro de estudios.
Estando donde Kevin, llamaron a Cristopher, Daniel y Edinson.
Al poco rato estando todos reunidos, pasaron al salón habilitado para ensayar con sus respectivos instrumentos musicales.
Kevin de pie era el intérprete de las melodías, Mauricio tocaba la guitarra, Cristopher en el órgano, así, cada uno interpretaba la música en su instrumento.
Luego de un rato de práctica con todos los acordes musicales que eran capaces de producir, el grupo de amigos continuó amenizando el ambiente. Al rato había unos cuantos jóvenes llenando el lugar para escuchar las melodías que interpretaba Kevin frente al micrófono y eran creación de Mauricio, quien era el creativo innato del equipo y tenía una gran sensibilidad artística musical. Eran verdaderos poemas hermosos dedicados a enaltecer el amor. Mauricio estaba inspirado en el amor aún no correspondido que sentía por Sarah, la amiga de Charlotte. Por la cual sentía verdadera devoción, sin que ella estuviera enterada. Su primera desilusión cuando Sarah aceptó hacerse novia de Anthony, no bastó para que Mauricio dejara de pensar en ella, es más, le sirvió para aumentar su repertorio de canciones, con la esperanza de que ella las escuchara, sintiera su vida interior y se percatara de su existencia, no perdía la esperanza de lograr el amor de Sarah.
-Es la chica más dulce que he conocido con esos ojos tan inmensos, con esa mirada tan tierna. Le comentaba a Vincenzo en una pausa del toque musical. Para la próxima vez que nos reunamos, hay que invitarla a que venga a escuchar nuestro recital.
Al rato, Kevin les emplazó a proseguir, había que seguir ensayando, el festival se acercaba y tenían que estar bien preparados para obtener el galardón.
-De aquí al Madison Square Garden, ja ja ja ja.
-Seguro!
Prosiguieron en su ensayo.
Cuando menos lo esperaba, Anthony, un día conoció a Marilyn, sin darse cuenta comenzó a enamorarse de esta nueva chica que parecía muy entusiasmada por él.
Sin embargo, se sentía atrapado por el tiempo que tenía con Sarah, ésta era muy buena chica, pero él no estaba dispuesto a sacrificar su satisfacción sentimental por un “qué dirán”.
Tomó valor y un buen día se decidió, le propuso a Sarah desatar los eslabones que los unían.
Ella se sintió muy mal a pesar de no sentir un fuerte apasionamiento, se había acostumbrado a su presencia, las amistades en común, la cotidianidad con la familia, etc.
-Siempre pensé que el día que termináramos esto, tú llorarías, fueron las palabras de Anthony.
Sarah se tragó sus deseos de llorar para no hacerlo frente a él.
Llamó a Charlotte y se encontraron en el tocador.
A medida que le narraba los acontecimientos, sus ojos parecían un par de surtidores.
-Ese chico no merece que derrames ni una sola lágrima por él; verás cómo pronto aparecerá alguien que te sopese y te valore con la justicia que te mereces, le comentó Charlotte.
Mauricio se enteró del rompimiento de Sarah y Anthony.
Kevin le dijo en forma divertida:
-Es ahora o nunca, acelera antes que se te vuelva a adelantar otro.
-Bien Vincenzo, esta vez, tú me apoyas, invita a Natalia a ver nuestro ensayo, tú no te aplicas en nuestro grupo musical, pero puedes decirle que traiga unas amigas, seguramente vendrá con Charlotte y Sarah.
De este modo planificaron el encuentro de Mauricio y Sarah.
Cuando Vincenzo cruzaba en la esquina, Mauricio lo estaba aguardando.
-Vamos, pasaremos donde Kevin.
Mauricio tenía un vehículo pasado de moda que su padre le había facilitado para trasladarse a su centro de estudios.
Estando donde Kevin, llamaron a Cristopher, Daniel y Edinson.
Al poco rato estando todos reunidos, pasaron al salón habilitado para ensayar con sus respectivos instrumentos musicales.
Kevin de pie era el intérprete de las melodías, Mauricio tocaba la guitarra, Cristopher en el órgano, así, cada uno interpretaba la música en su instrumento.
Luego de un rato de práctica con todos los acordes musicales que eran capaces de producir, el grupo de amigos continuó amenizando el ambiente. Al rato había unos cuantos jóvenes llenando el lugar para escuchar las melodías que interpretaba Kevin frente al micrófono y eran creación de Mauricio, quien era el creativo innato del equipo y tenía una gran sensibilidad artística musical. Eran verdaderos poemas hermosos dedicados a enaltecer el amor. Mauricio estaba inspirado en el amor aún no correspondido que sentía por Sarah, la amiga de Charlotte. Por la cual sentía verdadera devoción, sin que ella estuviera enterada. Su primera desilusión cuando Sarah aceptó hacerse novia de Anthony, no bastó para que Mauricio dejara de pensar en ella, es más, le sirvió para aumentar su repertorio de canciones, con la esperanza de que ella las escuchara, sintiera su vida interior y se percatara de su existencia, no perdía la esperanza de lograr el amor de Sarah.
Editado: 05.10.2021