Sarah se encontró en un pasillo al chico que le prestó el afilador cuando estaba estudiando con Charlotte.
-Vamos al cafetín?
-Sí.
Esperando una mesa libre, Alejandro aprovechó de indagar todo lo que pudo para saber lo concerniente a la vida de Sarah.
-Dirección, móvil, edad, lugar de origen, creo que equivocó la carrera, sirve más para detective.
Fue el hilarante comentario de Charlotte cuando Sarah le contó.
Casualmente, el chico era de otra provincia también y estaba residenciado durante los períodos de estudio en la casa de una hermana ubicada muy cercana al hostal de Beatrice.
A Sarah le agradaba el joven, pero esta vez haría las cosas con mayor precaución, para no repetir la misma historia.
Editado: 05.10.2021