CAPITULO 8
- Cenicienta, Cenicienta – canta Fizzy por toda la sala
- Amor, debes calmarte – dice Darcy riendo
- No mami, Cenicienta, Cenicienta, pronto, pronto cenicienta, lava y plancha – sigue cantando hasta que suena el timbre de la casa – Din dong –
Darcy se acerca a la puerta al ver que es Luke, le abre y lo deja pasar.
- Hola Darcy –
- Hola – sonríe – Félicité, ven –
- Mande mami – dice acercándose y abrazando la pierna de su mamá
- ¿Recuerdas a Luke? – ella asiente – Él te va a cuidar hoy en lo que voy al trabajo, portate bien amor –
- Si mami –
- Muy bien amor, ve a jugar, ahorita te hablo cuando me vaya –
- ¿Hay algo que necesite saber para su cuidado? – pregunta Luke
- La comida esta en el refrigerador, ella come alrededor de las 2 de la tarde, llega a tomar una siesta de una hora, como a las 4 o 5 de la tarde, cena a las 7, para dormir a las 8 más tardar a las 9, tal vez a esa hora ya estoy aquí – dice Darcy mientras se dirigen hacia la cocina
- ¿Siempre toma su siesta de la tarde? –
- No, solo a veces, cuando notes que empieza a estar de mal humor es por eso – comenta riendo bajo
- Vale, ¿Es alérgica a algo? –
- Solo a las frambuesas, no le des mucho chocolate porque si no luego no dormirá en la noche –
- Vale, no te preocupes, puedes irte tranquila –
- Gracias – susurra saliendo de la cocina – Félicité, ya me voy –
Ven como Fizzy viene corriendo hacia ellos y Darcy la alza en brazos
- ¿Mami se va? –
- Si amor, pero prometo que estaré en casa antes de que te vayas acostar – asegura dándole un beso en sus cachetitos
- Okay mami – dice abrazándola del cuello – Te amo –
- Y yo a ti amor, portate bien con Luke – dice dejándola en el piso – Cuidala con tu vida, porque es la mía –
- No te preocupes Darcy – sonríe Luke
Toma su mochila, las llaves de su auto, su celular y sale corriendo porque si no se le haría tarde.
Una vez que Darcy sale del departamento, Luke busca a Fizzy por las habitaciones, dando con la habitación principal, viéndola acostada a mitad de la cama hecha bolita.
- Hola pequeña, ¿Todo bien? - habla bajito
- Vete – solloza Fizzy
- ¿Por qué?, ¿No te caigo bien? – susurra
- Eres malo como papi – contesta Fizzy
- Pequeña, no sé como era tu papi, pero te aseguro que yo no te haré daño – dice Luke mientras se acerca lentamente a la cama - ¿Me quieres contar a que te refieres? –
- Papi era malo conmigo y con mami – contesta Fizzy una vez que ve a Luke sentado en la cama
- ¿Qué les hacía? –
- Papi se enojaba con mami porque no le daba atención – solloza nuevamente y Luke la toma en sus brazos sentándola en su rezago – Y le pegaba y yo lloraba mucho y se enojaba por eso –
- Tranquila bebé, tu papá ya no está aquí, y te aseguro que no volverá hacerles daño – responde el ojiazul acariciando el cabello de Fizzy
- ¿Tu no enojas si mami me da atención? – susurra la pequeña
- Claro que no Fizzy, no tendría porque enojarme –
- ¿Tu si jugarías conmigo? – cuestiona Fizzy
- Claro que sí, vamos a jugar, ¿Alguna vez has armado rompecabezas? –
- No – niega la pequeña – Mami no me ha comprado rompe… rompe que – cuestiona la pequeña
- Rompecabezas – repite Luke – Ven, traje uno de princesas –
- Si – dice emocionada Fizzy
Ambos salen de la habitación, y se dirigen a la sala en busca de la mochila de Luke.
- Mira pequeña – dice Luke dándole la caja a Fizzy
- Gracias – contesta la pequeña tomando la caja de las manos del chico y se va hacia la mesita de la sala
Luke sonríe cuando ve a la pequeña alejándose con la caja entre sus manitas, el decide sacar su computadora y sentarse en el comedor, avanzando con su tarea en lo que daba la hora de la comida.
Estaba tan concentrado en su tarea que unas manitas que jalaban su chamarra lo sacan de su burbuja.
- ¿Qué pasa Fizzy? – pregunta amable. Ella alza una pieza del rompecabezas - ¿Quieres que te ayude? – pregunta a lo que ella asiente – Vamos –
Ambos se acercan a la sala, y se sientan en la alfombra cruzando sus piernas.
- Cuando armes un rompecabezas, procura hacer primero las orillas, eso te será más fácil cuando inicies con lo demás – aconseja Luke mientras le muestra las piezas de las que habla – Haremos esto ¿Te parece que juntemos todas estas piezas y después de tenerlas, empezamos a juntarlas? –
- Siii – responde alegre la pequeña