CAPÍTULO 9

Pasaron dos semanas desde la fiesta de Jannette. El trato de Ethan y Daphne seguía siendo cercano, ella solía acercarse a conversar con él cuando iba con sus amigas a almorzar, mientras esperaban sus pedidos ella se quedaba con Ethan en el mostrador, si es que éste no estaba atendiendo a nadie. El chico no estaba seguro de si era algo que podía llamar conversaciones, ella se quedaba ahí hablando del trabajo en el salón, del negocio de su tía y su abuelo, las dos panaderías que tenían en la ciudad, o sobre cualquier tema trivial e irrelevante, él prácticamente no hablaba, sólo la escuchaba, perdiéndose del tema en algunos momentos, sin embargo, sin importar cuanto hablara, no la aburría sin importar que tan poco le interesara el tema.

A Daphne le parecía que se estaban llevando muy bien, Ethan no se notaba tan incómodo con ella, le sostenía la mirada y no parecía buscar salida de sus conversaciones, aunque él no conversaba mucho, sin embargo, ahí estaba escuchándola. Sólo pasaban ese tiempo juntos en el restaurante, no se encontraban en otro lugar, algo que a Daphne le gustaría cambiar.

Los compañeros de Ethan, solían notar mucho a Daphne. Ya lo habían escuchado hablar con ella constantemente, aunque fueran apenas un intercambio de palabras de su parte, los sorprendía que él estuviera cerca de la chica, pues desde Ellie nunca lo habían visto acercarse a una chica. En otras circunstancias el que Ethan estuviese acercándose a una chica o estuviese haciendo amigos les parecería increíble, pero el simple hecho de ver a la chica los inquietaba, sobre todo a Gina. No podía quitarse la sensación de que de no ser por el parecido de la chica con Ellie, Ethan no se interesaría por ella.

A veces tenía deseos de hablar de ese asunto con Ethan, pero no quería inmiscuirse, ni hacer a Ethan enfrentarse de nuevo a esos amargos recuerdos. Por un lado, pensaba que, si Ethan se interesaba por esa chica sólo por el parecido físico, no debería estar con ella, pero por otro lado Ethan estaba mejor que en los últimos dos años. No tenía la misma actitud fría de siempre, no era que de pronto hubiese explotado en calidez, pero había algo en la manera en que su expresión cambiaba cuando Daphne llegaba que le hacía recordar al Ethan de hace unos años. Y, además, a esa chica parecía gustarle Ethan. Tal vez el que estuvieran juntos haría más bien que cualquier posible mal. No estaba segura de qué pensar de todo este asunto.

Como casi todos los días, en este Daphne y sus amigas llegaron al restaurante al almorzar, y como cada vez que la veía entrar por esa puerta, el corazón de Ethan se llenó de una gran calidez; el sólo ver su sonrisa hacía que automáticamente una sonrisa se formara también en su rostro. Cuando recién la conocía se reprimía tanto ante cualquier tipo de sensación o sentimiento que la chica despertara en él, pero ahora se le estaba haciendo demasiado fácil dejarse llevar.

—Hola, Ethan —dijo Daphne acercándose con sus amigas hacia él.

—Hola, chico —saludó también Alice.

—Ethan —dio esta vez Jannette.

Las dos se sentían ya algo más cómodas con Ethan, no solían hablar realmente mucho con él cuando iban al restaurante, su amistad sólo era por medio de Daphne. Realmente a pesar de la impresión que había causado Ethan en ellas desde que lo habían conocido, desde que se Daphne se había acercado a él, este parecía ser más animado a la hora de que se le acercaran, realmente seguía siendo bastante retraído, pero notaban un cambio en su actitud.

Las tres chicas ordenaron, Ethan anotó sus pedidos y entregó la nota en la parte trasera. Alice y Jannette fueron hacia una de las mesas vacías a tomar asiento, ya sin esperar a Daphne, sabían que cada que iban al restaurante, si después de ordenar no había nadie más en la fila, la chica se quedaba junto a Ethan en el mostrador conversando hasta que llegara alguien a quien el chico tuviese que tomarle la orden o que sus órdenes ya estuviesen listas.

—Oye, Ethan —habló Daphne—, ya te tengo agendada una cita para que te cortes el cabello en el salón.

—Pensé que ya te habías olvidado de eso —dijo Ethan con una pequeña sonrisa, Daphne también sonrió.

—De hecho, sí lo olvidé por algunos días —admitió en medio de una pequeña risa—. Puedo llegar a ser muy olvidadiza.

Ethan sonrió aún más por su risa. Llevó una de sus manos a su pelo, realmente ya estaba muy crecido. No le gustaba el cabello corto, pero ya no podía mirar hacia abajo sin que el cabello le cubriera los ojos, ya comenzaba a resultarle molesto.

—Entonces, ¿cuándo puedo ir? —preguntó regresando su atención a Daphne.

—Este sábado, al medio día. ¿Ya sabes la dirección?

—Creo que no, nunca lo habías mencionado.

—Entonces te enviaré la dirección —Ethan asintió.

Cuando un grupo de chicos entraron al restaurante Daphne se apartó de Ethan y regresó con sus amigas. El chico apartó la mirada de ella sólo hasta que los nuevos clientes llegaron al mostrador. No mucho después de que atendiera a esos clientes y que entregara la nota de la orden en la cocina, de ésta salió Benjamin.

Al salir, de lo primero que se percató fue de que Ethan miraba hacia un grupo de chicas en una mesa, inmediatamente se percató de que entre ellas estaba aquella chica que en muchas ocasiones había sido tema de conversación entre él, Ginna y Brandon. En un momento la chica dirigió la mirada a Ethan y sonrió amistosamente, Ethan le devolvió la sonrisa.

Eso sorprendió a Ben, no recordaba la última vez que había visto a Ethan sonreír así a alguien. No, sí lo recordaba; cuando Ellie estaba con él. Le preocupaba ciertamente el que Ethan se volviera tan cercano a ella, nunca lo había visto interesarse ni remotamente en una chica después de Ellie. Casi ni hablaba con ellos a menos que fuese necesario. De hecho, desde que había comenzado a acercarse a esta chica, parecía ser más comunicativo con ellos. Pero a pesar de esto, le inquietaba que la única razón de que Ethan se sintiera atraído por esa chica fuera su parecido con Ellie. Eso de ninguna manera sería sano para Ethan, esto lo pondría cada vez más lejos de superar a Ellie.