En el silencio de la noche, bajo el cielo estrellado,
te susurro palabras de amor, con el corazón enamorado.
Tus ojos son dos luceros, que iluminan mi caminar,
y tu risa es la melodía, que me enseña a soñar.
Tu amor es como el viento, que no se puede tocar,
pero se siente en cada momento, y me hace volar.
Eres la luna en mi noche, el sol en mi amanecer,
eres el sueño perfecto, que nunca quiero perder.
Cada día a tu lado, es un regalo divino,
eres mi inspiración, mi rima y mi destino.
Así, bajo las estrellas, te entrego mi corazón,
en cada verso de amor, en cada dulce canción.