Capítulo Ocho.

Capítulo Ocho: Decepción.

Kim TaeHyung 


 

Antes de abrir la puerta, escucho la voz de Bryan llamándo a Katherine.

Las pisadas apresuradas de Katherine.

La voz de Bryan pasan a ser gritos.

Todo está oscuro para ella.

Abro la puerta y cuando la veo alcanzo su brazo jalándola hacía dentro de la habitación de quien quiera que sea.

Para que no grite de la impresión le tapo la boca y ella se sobresalta.

—No hagas ruido, Hudson —susurro cerca de su rostro—. ¿Está bien?

Ella asiente, pero su pecho esta descontrolado, sube y baja a cada segundo. Esta nerviosa y aunque ese descontrol me hubiera gustado que sea en otras circunstancias más aptas para +18.

La suelto y mi mano baja a su cintura y la siento tensarse y un pequeño suspiro, que no se da cuenta, sale de sus apetitosos labios.

Observo la parte de abajo de la puerta cuando las pisadas se hacen más fuertes y con esos las palabras de Bryan.

—¿Dónde coño te has metido, traidora?

La miro de soslayo y ella cierra los ojos.

—Te irá mal cuando te encuentre, querida prima. —Esta vez la observo y su  mirada esta muy fija en el suelo.

Un suspiro cansado se escapa de su boca cuando por fin vuelve a verme.

—¿Eres su prima? —pregunto y pese a que sé la respuesta, lo hago para ver que tanto puede ella confiar en mí.

Me acerco mas a ella.

—Para mi desgracia sí. —confirma.

Nos sostenemos las miradas y en eso la voz de Bryan se desvanece.

El miedo que veo en Katherine, me hace saber que sus padres no saben nada de lo que está pasando con ella. Por lo que sé, es que los Hudson lo están buscando por un atentado que cometió en contra de su familia.

Pero lo que no entiendo es como Katherine siendo una mujer de muy buena familia, termina por estar en esa guarida donde viste con ropa no costosa, cuando su familia tiene hasta para despilfarrar.

Ella se sobresalta cuando los gritos se hacen más fuertes y con ello los disparos.

Ya comenzaron.

—James. —susurra bajo. La miro mal y ella parece un poco divertida por mi actitud, pero sacude su cabeza— Está abajo y yo necesito ir por él.

—¿No escuchas los disparos? —le digo de mala manera.

—Los escucho perfectamente, pero no voy a dejar a mi mejor amigo aquí. —Me alejo de ella— No soy tan...tan mala persona para hacer eso.

—¿Querías decir mierda? —digo divertido y ella se sonroja.

Suspira y pasa de estar en un pequeño trance para querer abrir la puerta.

Antes de detenerla Bryan la sostiene del cabello sin prestar atención que estoy yo, debido a la oscuridad.

—Maldita traidora. —La jalonea y la hace chocar con la pared del frente.

Ella cae con la frente sangrando desvaneciéndose en el proceso.

Salgo y lo tomo de su chaqueta y también le hago lo mismo, su nariz sangra. Mi puño termina en su pómulo abriéndole en el proceso. Cae cuando pateo su rodilla, trata de defenderse cuando su puño me da con fuerza en el estomago.

Joder, escuece mucho.

Antes de que llegue otro puñetazo, sujeto su cabeza y lo hago golpear contra mi rodilla, escucho como suena un espléndido crujido de su asqueroso rostro. Cae medio inconsciente al suelo.

Me doy la vuelta y el cuerpo desvanecido de Katherine aún con la sangre deslizándose por su frente la tomo en brazos para sacarla de acá.

Salgo por la parte trasera de esta fraternidad, busco con la mirada a Jungkook, pero sigue sin dar vida.

Maldito cabrón, debería estar acá.

La subo a mi auto, le coloco mi abrigo encima junto al  cinturón. Llamo a Jimin para que vaya a mi departamento urgente.

***

—¡¿Que mierda le pasó?! — pregunta mientras me observa terminar de limpiarle la frente.

—Bryan la golpeó contra el muro. —digo y un acidez me invade en el pecho al solo verla tratar de defenderse.

Se queda callado unos segundos antes de que vuelva hablar.

—Es bonita. —dice con una pequeña sonrisa hacía mí.

No digo nada, y no porque no quiera darle más vueltas al asunto si es bonita o no, simplemente para mi es hermosa, pero ahí lo dejaré. No quiero ir más allá del tema.

—¿Hablaste con Jungkook? —pregunto.

—No, no contesta el puto móvil. —se exaspera—¡Me manda al maldito buzón!

—Bueno de qué está bien, lo está.

—Si me dices que NamJoon lo sabe, y que Brenan fue por la niña Jhonson solo para atraer a la hija, no suena mal. Sino malísimo. —Se siente al borde de mi cama—Entonces...¿NamJoon solo estuvo jugando con ustedes? Es que no sabemos el acuerdo de esos dos.

—Por eso le dijo a Jungkook que mantenga a la niña Jhonson al margen. Él sabía lo que iba a pasar.

—Sabes que si Nam se entera de que trajiste a la prima de Bryan a tu departamento y que este bello ser—se señala—te está cubriendo, nos cortará la cabeza.

—No iba a dejarla ahí.

—¿Por qué?

—No preguntes idioteces. No soy tan malo después de todo.

—Antes no hubiera hecho esto.

Me quedo callado y mi mirada se queda en ella.

—No lo sé, pero ahora trae más  algodón.

—Eso finge que no sabes nada.

La puerta se cierra y observo a Katherine, sus labios su rostro. No se lo qué pueda pasar más adelante, solo sé qué ahora mismo hay peores situaciones que tengo por preocuparme.

Me pongo de pie y veo por el rabillo del ojo como se remueve sobre la cama. 
Me apoyo en el marco de la puerta del baño que esta al frente viéndola sobarse la cabeza con los ojos cerrados.

El pómulo la tiene morado, y se que eso es lo que más le duele porque su rostro es la prueba de ello.

—No te lo quites. —demando cuando veo su intento de sacarse la venda.

Se sobresalta y gira un poco su cabeza. Agranda los ojos y me ve con un poco de recelo.

—¿Qué hago acá? ¿Dónde estoy? —se reincorpora acomodándose en la cabecera de la cama.

—En mi habitación y en mi cama. —digo y de alguna manera sus sonrojadas mejillas hacen un efecto en mí.