En momentos como éstos en dónde decido darle un vuelco a mi vida, un stop aunque todo siga su rumbo a mi alrededor, detengo mi vida respiro, reflexiono lloro, me desahogo y me pierdo en mis conversaciones hipotéticas de lo que tengo que hacer o lo que debo dejar ir para recomponerme. ¿Que hago?, ahora cuando respirar se vuelve imposible, cuando la columna de naipes inquebrantable se desploma, cuando mi vida es un asco y todo eso me pesa, me cargo de emociones negativas entonces caigo en una vida miserable todo me supera, me quiebro y quedo en el fondo de esos sentimientos.
Decido darme un tiempo, para permitir que mi valor ya endeble vuelva a surgir, me alejo de todo. Pero, ¿Si todo aquello que me hace vulnerable, sigue? Nadar de regreso a la superficie no cuenta, flotando en este océano turbulento siendo llevada por la corriente. Ahora me siento ansiosa, como un niño que se ha perdido y busca añoradamente un camino de vuelta a casa, sollozando y llena de pánico. Recojo sigilosamente todos los pensamientos perdidos, llena de valor hago mi camino de vuelta a casa pero justo antes de cruzar aquel umbral, todo se demorona lentamente y vuelvo a encontrarme en el inicio, donde todo me supera dónde no se por dónde empezar, pero está vez caí más profundo que la última vez.
∆Tiina∆