Prologo

En el año 2098 estallo una epidemia, hasta ese instante, los seres humanos se dedicaban a hacer su rutina diaria, viviendo su día a día en una atmósfera de paz y tranquilidad, solamente prestando atención a los problemas que cada uno pudiera tener, aparentaba ser otro día normal en el planeta tierra.
 

Era una época en la cual se vivía con tanta paz y tranquilidad que nadie se imaginaria ni por un momento que algo malo fuera a suceder de un momento a otro, Pero ese día la sociedad que subsistía de una manera tan pacifica recibió una espantosa noticia que cambiara el mundo y sus maneras de coexistir radicalmente. De la nada todas las pantallas del mundo comenzaron a transmitir una señal de alerta y súbitamente salieron los supremos lideres de cada país difundiendo un suceso que paralizaría al mundo, al parecer una epidemia extremadamente peligrosa había sido liberada, esta epidemia recibía por nombre "El Anticristo" porque una vez que había sido expuesta al mundo este estaría condenado, pero no le dio tiempo de terminar de explicar el suceso cuando todas las señales que transmitían aquel informe se cortaron.

repentinamente el planeta comenzó a cambiar de una manera drástica todo el entorno parecía mas pesado como si la gravedad hubiera sido afectada de tal forma que se imposibilitaba la capacidad para respirar y caminar. Con el transcurrir de las horas la situación empeoraba ya que algunas personas comenzaban a sufrir perdida de su cuero cabelludo mientras que la piel se les comenzaba a caer a pedazos, otros sufrían mutaciones y mal formaciones tales como que un tercer brazo o una segunda cabeza comenzaran a salir de sus cuerpos, mientras que los animales como perros y gatos comenzaban a despellejarse y desarrollaban la enfermedad de la rabia, las aves y los peces comenzaban a morir vertiginosamente dejando carreteras y ríos llenos de estos animales ya fallecidos, las personas desesperadas e impotentes solo podían lanzar gritos al cielo pidiendo auxilio pero todo era en vano ya que ese solo era un mundo olvidado por la mano de dios. 

Las cifras de muertos solo se elevaban con cada minuto que transcurría en aquel infierno llamado tierra, el planeta se volvió un lugar adverso donde la vida comenzaba a marchitarse cada vez más, ya no existía un solo lugar en la tierra donde hubiera brutalidad, el instinto de supervivencia se había despertado no solo en los humanos, sino en todo aquel ser vivo que respirara en un mismo lugar.

Ya no había piedad para nadie no importaba si eras una mujer o un niño ahora solo permanecía la ley del mas fuerte, pero eso solo era el comienzo de una serie de atrocidades que darían lugar mas adelante.

Las cosechas y ríos que contenían agua potable terminaron por contaminarse, las escasez de alimento y de agua azoto fuertemente a la población poniéndole tanta presión a los lideres del mundo que terminaron por buscar una solución poco ortodoxa, las señales que antes habían sido cortadas solo volvieron para que los lideres de cada país diera una noticia que le heló la sangre y le dio un vuelco en el corazón a mas de uno, la aniquilación total del mundo. Sirenas comenzaron a sonar en el cielo cuando de repente se veía como aviones comenzaban a soltar bombas que al caer su explosión daba forma de hongo. 

No tardo mucho hasta que la sociedad segada por la ira comenzaron a ir en multitudes a donde se encontraban los mandatarios de cada país aun corriendo el riesgo de que las bombas les cayeran encima y así fue, las muertes eran incontables, pero las pocas personas que quedaban lograron dar con su cometido y asesinaron a los lideres cortandoles sus cabezas y empalandolas. Pero ahora el planeta tierra tenia un problema aun mas mayúsculo, la epidemia ahora estaba mezclada con la radiación de las bombas, haciendo que la mayoría de personas que quedaban en el mundo salieran de quicio y perdieran completamente su esencia humana hasta convertirse en una  aberración mutante lo mismo pasando con los animales
 

Las pocas personas que no fueron afectadas por desconocidas razones ahora se refugiaban en bunkers y en pequeños pueblos escondidos en distintas naciones, viviendo con un temor constante a esas criaturas que en cualquier momento los podían encontrar.
 

Han transcurrido 70 años desde que esos horribles echos dieron lugar y desde entonces ya no se conoce la palabra libertad. Yo nací en un pequeño pueblo formado por varios supervivientes y al ser varón y tener 23 años de edad mi trabajo consistía en cuidar a ese pequeño pueblo a toda costa.
 

Pero un día en particular todo cambio cuando uno de los muros de mi pueblo fue derrumbado.