Capítulo IV: NT-Salto

Al llegar la mañana siguiente, los Greenders nos llamaron a todos los usuarios a la sala central, esto con la intención de explicar cómo estaban conformadas las habitaciones de cada grupo; y una vez estando reunidos todos, ellos empezaron con la reunión.

Martes, 27/08/68 - 08:17 h.

La habitación que fue dada a mi grupo se llamaba "Enif"; esta era un tanto diferente a las demás habitaciones de los demás niños, y estaba dirigida a ocho usuarios por un error del registro, también tenía una gran ventana comparada a las demás habitaciones.

Esto se debía a que la habitación "Enif", era un salón adaptado a ser un cuarto, se ubicaba a unos pasos de la sala de comidas y era de fácil acceso hacia la entrada y salida del edificio; a mí parecer era el doble de beneficioso que las demás habitaciones, por lo que me empezó a agradar la idea de tener una ventana grande para sentir el aire fresco en las mañanas.

Algo que también tiene relación con el nombre de nuestra habitación (según los Greenders), es que "Enif", era el nombre de la estrella más grande de la constelación de Pegaso, de ahí el nombre del salón más luminoso del edificio; era un juego de palabras con un fondo que hacía referencia a la habitación mayor, o algo por el estilo. Y luego de especificarnos eso, los Greenders nos dieron la orden de tomar un baño e ir directamente a desayunar, ya que pronto comenzaría la primera fase del programa del día de hoy, y teníamos que estar completamente limpios para eso.

Todos aceptamos la orden, y tras ducharnos en lo que parecía un baño público en una esquina de las habitaciones, nos dirigimos a la sala de comidas donde nos esperaba nuestro desayuno; y luego de acabar de comer, un Greender nos encaminó a la sala central, sin embargo, la ruta había cambiado e íbamos por un camino distinto.

Ya no estaban las mismas habitaciones en el mismo orden, parecía que hubiéramos cambiado de posición con otra ruta del edificio, aunque siendo sincero, tal vez solo lo estaba pensando demasiado y solo era parte de mi imaginación; aun con ello, tras varios pasos llegamos a la sala central.

Y al llegar a la sala central, me centré en buscar entre los niños a Lukk, sin embargo, no lo veía por ningún lugar dentro de la sala.

Quizás estaba en otro lugar similar, con otro grupo acorde a su edad, o quizás hoy su grupo se había ido a otra instalación: no sabía la respuesta.

Después de pensar en el paradero de Lukk, nos agruparon nuevamente y nos exigieron prestar atención a lo que estaban a punto de mostrarnos.

En ese momento, nos presentaron una especie de televisor que mostraba unas imágenes sobre una máquina gigante, todos nos quedamos asombrados por lo que estábamos viendo delante de nosotros, ellos por su parte, hicieron que las viéramos durante unos minutos.

Martes, 27/08/68 - 10:24 h.

El título de la prueba de hoy decía claramente: "Rumbo a la tele transportación".

Aunque yo ya sabía de qué iba el tema gracias a lo que me había dicho Lukk el día de ayer, así que pensaba más o menos cómo acabaría dicha prueba:

—¡Una pérdida de tiempo y un fracaso total! —dije en mi mente mientras reía dentro de mí.

Y es que, seguro dirían algo como: "fallamos ahora, pero lo conseguiremos luego" o "solo estábamos bromeando, regresen a sus habitaciones", con una voz muy grave. Y quizás después de decirnos todo eso, se enfocarían en el examen y acabarían con el teatro que comenzaron el día de ayer, después de todo, estas cosas eran inexistentes, ¿no?

Luego de oír mis pensamientos acerca de las posibles excusas de los Greenders, escuché de parte de ellos que intentaríamos realizar dicha prueba con los usuarios presentes; solo en ese entonces, me di cuenta de que no era ningún tipo de broma o invento de ellos, los Greenders parecían serios y lo decían de forma firme y clara; al ver sus rostros lo sabía, sus auras reflejaban que hablaban seriamente.

Y sé que te preguntarás cosas como:

¿Qué es el aura? Así que se los explicaré de forma sencilla.

El aura es la esencia de los seres humanos y tanto ustedes como yo, estamos presentes en contacto con esa esencia, algunos lo definirían como alma, o la puerta de los ojos; en mi caso, esa esencia se refleja en los colores que veo a través de ellos. 

De esa manera, el color de los Greenders era verde con tonalidades grises, lo que me decía claramente que no estaban bromeando acerca de ese artefacto.

Otra pregunta alterna podría ser: ¿cómo puedes ver esas cosas? Eso se lo dejo a mis padres, quizás la causa sea la genética, el talento en mi cerebro o quizás mi ineficiencia como ser humano, solo sé que desde que tengo memoria tengo esa utilidad de poder ver la esencia de las personas, si veía un aura que inspiraba miedo o felicidad, podía saber si lo que decían era verdad o mentira. Y por lo tanto, el aura que reflejaban los Greenders mostraba un pequeño tono de temor y a la vez de seriedad; lo que decían no podía ser mentira.

Fue allí, donde nos enseñaron un aparato extraño que parecía una caja enorme, como si se tratase de un televisor de tres pantallas mirando en dirección hacia el techo: