—¿Ponerlo a prueba?
—Sí...
Yoongi y Namjoon se encontraban platicando en su cafetería favorita, era realmente especial, de hecho fue ahí en dónde se conocieron por primera vez, y todo por un bendito café expreso que resbaló de las manos del pálido y terminó en toda la camisa del moreno. Hubo tal vez una "pequeña" pelea después de eso, pero al enterarse de que iban a la misma escuela, quisieron conocerse más y... Bueno, terminaron con la extraña pero hermosa amistad que llevan hasta ahora.
—¿Para qué? —preguntó el moreno, mirando confundido a su amigo.
—no lo sé... Creo... Creo que quiero conocerlo... Se me hace un poco interesante ese pequeño niño de mejillas regordetas... —susurró lo último, encogiéndose de hombros.
—Awwww, ¡Eres toda una ternu-...
—café americano doble y un frappé de vainilla —dijo amable Seok-Jin, uno de los meseros de la cafetería, el más hermoso por cierto. No hace mucho que trabaja ahí, pero con el tiempo que lleva fue suficiente como para hacer que el moreno perdiera la cabeza.
—g-gracias... —susurró Namjoon, con un leve sonrojo en sus mejillas cuando Jin le sonrió.
Yoongi los miraba con los ojos entrecerrados, él sabía que algo pasaba entre ellos dos, pero les da pena admitirlo.
—y bien... ¡Jin! —habló Yoongi, llamando la atención del antes mencionado.— ¿Estás disponible?
Y eso fue todo como para que un pie golpeara su pantorrilla un poco fuerte, haciendo que intentará ahogar el pequeño gritillo de dolor que quería salir. Namjoon lo miró a los ojos y sonrió forzado, con un ojo temblándole.
—¿Yo?, ¿Disponible? —preguntó sorprendido Jin.— lo lamento, Yoongi, pero creo que no eres mi tipo...
"¡¿Me está diciendo feo?!, ¡Oh, Namjoon!, Definitivamente ya no lo apruebo para ti, ¡púdrete!"
Yoongi soltó una risa forzada, mientras que Namjoon si que tenía ganas de reír, pero obviamente no quería carcajearse como idiota estando su crush frente a él.
—¡No, no!... No es para mí... —y entonces la expresión de Namjoon cambió a una completamente seria, pues ya sabía lo que su amigo iba a decir.— es para...
—¡Jin!, ¡Café negro para la mesa 5! —gritó una de las voces provenientes de la cocina.
—¡Oh!, Perdón, Yoongi, tengo que irme, nos vemos, disfruten sus cafés... —y en eso volteó a ver a Namjoon, regalándole una de sus hermosas sonrisas que hacía que el corazón del moreno empezara a latir rápidamente.
Cuando Jin se fue, Namjoon redirigió su mirada hacia el piel pálida, quien lo veía sorprendido y no pudo evitar sacar una leve risilla, sonriendo después de lado.
—¿Qué? –preguntó el moreno, frunciendo el ceño.
—¿No te diste cuenta?, ¡Dios!, ¡Mi Namjin es real! —y entonces se echó a carcajear, molestando así al mayor (en estatura).
—¡Cállate!... Mejor dime, ¿Qué piensas hacer con Jimin? —sonrió pícaro, haciendo que el contrario pare de reír.
—nada, sólo quiero ser su amigo, ¿Tiene algo de malo?
—no, nada...
—bien. —y entonces empezó a beber de su frappé de vainilla.
—•⨳•—
—¡E-es un pervertido! —gritó Taehyung, haciendo reír a los dos mayores.
Se encontraban en la casa de los Kim, Taehyung les contó acerca de cómo Jungkook intentó robarle un beso cuando accidentalmente se encontraron en el parque. Taehyung llevaba a Yeontan a estirar las patas un poco y entonces pudo ver a lo lejos un azabache que lo miraba entretenido, mientras que acariciaba al pequeño perrito que llevaba consigo. Los dos se saludaron y decidieron dar una pequeña caminata por todo el parque, pues sus mascotas se habían llevado bastante bien, pero cuando ya era hora de irse, Jungkook se inclinó un poco hacia la cara de Taehyung, insinuando querer besarle, pero el castaño fue más rápido y se alejó un poco, para después salir corriendo, gritando un "¡Ha-asta mañana, J-Jungkook!".
—que te quiera dar un beso no significa que vaya a abusar de ti —comentó divertido Namjoon, produciendo una mueca en Taehyung.
—¡Oh, Taehyung!, ¿Cómo es posible que a ti te llueven los pretendientes y a nosotros ni una mísera papa nos haga caso? —preguntó Yoongi, haciendo reír un poco desanimado a Namjoon.
—¡PERO SI TIENES A YOOJUNG QUE SE MUERE POR TI!Yoongi chasqueó la lengua y rascó su nuca.
—esa no cuenta...
—¡Y TÚ, NAMJOON!, ¡TIENES A HWASA!
—¿Qué? —preguntó sorprendido el moreno.
—¡¿Qué?! —exclamó exagerado el de piel pálida.
—¡Sí!, Ella a veces habla conmigo... Y me dijo que te dijera que dice que le gustas pero yo le dije que tal vez tú dirías que a ti no te gusta, pero entonces ella me dijo que te dijera que no dijeras nada, que está bien y entonces me dijo... No, yo le dije que... No, espera... ¿Quién le dijo a quién?
—¿Puedo golpearlo?
—adelante... –dijo así sin más, Namjoon. De un momento a otro Yoongi comenzó a perseguir a Taehyung por toda la casa.
—•⨳•—
—todos digan el título, nombre de su autor y nacionalidad del libro que escogieron... Jimin, tú ven conmigo... —anunció Yoongi, desconcertando al menor, pero de igual manera lo siguió, no estando seguro de lo que pasaba. Salieron del salón y entonces Yoongi abrió la boca para empezar a hablar.– Jimin... Dime qué tanto te gusta Yoojung...
—¡lo suficiente como para poder quitarme la vida por ella! –dice seguro de sí mismo, haciendo un puño con su mano derecha y posándola en su pecho. Tierno.
—ah... —agacha la cabeza Yoongi, chasquea la lengua y después vuelve a ver a Jimin a los ojos. El menor se encontraba confundido.— entonces... Puedo ayudarte a gustarle...
—¡¿De verdad?! —chilló el menor, con sus ojos iluminados.
—Sí... —le sonrió sin ánimos el mayor.— bue-... —pero bien no pudo acabar de hablar cuando el menor ya lo estaba abrazando mientras que daba pequeñas risillas emocionadas.
Editado: 07.03.2021