#21: Leo

Habían pasado un par de días en los que nadie había podido hacer nada mas que seguir con la misma rutina de siempre con el propósito de prepararse para una posible guerra de la que nadie podía estar cien por ciento seguro todavía, pero que mantenía a todos alerta ante cualquier situación como si eso fuera mucho mas importante que el hecho de que ella no estuviera aquí.

Camino con rapidez por los enormes pasillos en busca de Darlenn con quien había quedado en vernos desde hace un par de horas atrás y quien no había aparecido por una extraña razón, entrando por las grandes puertas de su enorme estudio, deteniéndome al percatarme de la presencia de alguien que estaba muy lejos de ser ella.

—Ella no esta aquí —Me informa con aquel tono profundo sin desviar la mirada del pequeño ritual que aun hay dentro del lugar sin dejar pasar el desastre dentro del lugar, causado por su hermana la ultima vez que todos estuvimos juntos.

—¿Cómo estas? —Me atrevo a preguntarle a Alukah, después de todo no podía pasar por desapercibido el simple hecho de que ella era la hermana de la mujer a la que amaba y por la que ella misma se había sacrificado sin dudarlo tan siquiera.

Era algo que mucha gente podía admirar de Meissa, era una cualidad demasiado grande para llevar pero que ella siempre había sido capaz de llevar sobre la espalda sin miedo ni restricciones como muchos podían llegar a pensar en ella cada vez que su vida se veía puesta en peligro, algo que ella no era capaz de ver cada vez que su vida estaba en ese peligro, cosa que muchas veces me molesto y que hasta hoy en día desearía que ella no cargara con aquella responsabilidad que solo ella pensaba que le correspondía.

—He estado mucho mejor —Se encoge de hombros restándole importancia al asunto —¿Han encontrado algo? —Se que se siente frustrada sin poder hacer absolutamente nada para traer de regreso a su hermana pero no parecía haber manera de hacerlo sin poder salir de la maldita barrera que Meissa había puesto.

—Nada aun —Le hago saber algo que todos nosotros sabíamos —Pero seguiremos intentando —Le prometo algo que verdaderamente no estaba seguro que pudiera suceder pronto.

—Espero que eso sea pronto —La veo incarse solo para tocar las marcas sobre el suelo, intentando encontrar algo que no tenia idea de que seria —Siento que si no logramos hacerlo pronto será el fina para ella —Se vuelve a poner de pie para darme una mirada llena de sensaciones que es capaz de trasmitírmelas con solo una mirada.

—¿Qué es lo que sabes? —Doy un paso hacia ella pero me detengo al percatarme de la manera furica en la que me he imaginado conseguir aquella información, una manera que sabia que no era la correcta —¿Puedes contactar con ella? —Pregunto porque tal vez esa idea no sea tan descabellada después de todo nosotros podíamos hacerlo en ciertas situaciones.

—Yo no tengo ese poder para hacerlo —Se pasea por la gran habitación deteniéndose al filo de la ventana del lugar —Ella es la única que puede hacerlo —No me sorprende muchos sus palabras, después de todo ella podía hacer muchas cosas de lo que alguien en el mundo podría hacerlo.

—¿Se ha comunicado contigo? —Un rayo de esperanza se filtra pero desaparece en cuando la observo negar con la cabeza en una gran negativa —¿Entonces que es lo que te tiene así? —Intento averiguar cualquier cosa que puedas servirnos de alguna forma para encontrar su paradero.

—¿No puedes sentirlo? —Me pregunta algo que no soy capaz de entender —Su energía esta desapareciendo de todos los rincones del mundo, ¿no te has dado cuenta? —Cuestiona y es ahí cuando me detengo a pensar en la manera gris y sin color que todo había empezado a tonarse desde que desaparecía —Si, la naturaleza es parte de ella —Me roba las palabras cuando estoy a punto de decirlas —Sin ella nada dentro de este mundo podría ser tan colorido como siempre lo fue, es por eso que no solo Gabriel la quiere muerta sino muchas personas desean obtener ese poder de la forma que sea —Una sensación diferente se instala sobre mi pecho lo que hace que mi ansiedad aumente mas de lo que esta hasta ahora.

"Tienes que protegerla Leo.... No puedes dejar que le pase nada.... Abra muchos que querrán su poder, pero nadie podrá hacerlo....Maithers recuerdalo...." 

Fragmentos de mi infancia pasan con rapidez frente a mis ojos y se distorsionar unos con otros imposible de entenderlos en su totalidad y con ello una sensación de peligro parece rodear todo el lugar al igual que las gotas de lluvia que caen con poder sobre la ventana.

—¡Leonel! —Alguien grita mi nombre una y otra vez aumentando el ritmo de mi corazón, saliendo en busca de la persona que llama mi nombre con tanta desesperación, encontrándome con el Arcángel que luce igual de agitado que yo.

—¿Qué pasa? —Le pregunto de inmediato antes de ser alcanzado por Alukah, quien se queja un poco sobre el proceso pero aun así parece estar lista para una verdadera batalla si es necesario, cosa que podría pasar si dábamos con el paradero de Gabriel —¿Han encontrado el paradero? ¿Han podido deshacerse de la barrera? ¿Ella a regresado? —Pregunto mientras en mi interior suplico para que la ultima de mis preguntas sea ciertas pero en seguida caigo en cuenta que no es así, cuando lo veo negar con la cabeza en forma negativa que hace desaparecer todas mi esperanzas.

—No es nada de eso —Me deja saber algo que era claramente claro hasta este punto —Pero se a presentado algo frente a la entrada, tienes que venir —Miles de ideas se forman en mi cabeza en segundos que soy incapaz de cuestionar antes de que Haciel se ponga en marcha hacia la salida, sin detenerse a cerciorarse de que lo este siguiendo.

—No te atrevas a irte sin ayudarme —Alukah se da cuenta de mis claras intenciones de seguirle el paso al Arcángel pero se asegura de aferrarse a mi brazo con fuerza antes de comenzar a hacerlo.

Intento ir a su paso de una manera que no pueda resultar lastimada mas de lo que hasta el momento estaba, así que aunque ella me suplicara ir mucho mas rápido de lo que iba, intentaba no escucharla a pesar de las ganas inmensas que tenia por correr hasta la entrada de la Creación para averiguar lo que sea que se había presentado frente a el lugar, recibiendo muchos mas insultos de lo que alguna vez pude haber escuchado hasta que llegamos a la entrada, donde nos toma un poco mas de tiempo abrirnos pasos entre la multitud, hasta llegar a la entrada.