EPÍLOGO

* 2 meses después *
- Sí Emily, al psicólogo, sin exagerar te lo he dicho 10 veces - Repitió Emery rodando los ojos
- Y por qué? - Preguntó su curiosa amiga
- Porque mi tía quiere asegurarse de que no vuelva a intentar suicidarme
- Ah, pues... Está bien, vamos
Ambas se arreglaron para salir y se despidieron de Tamara, salieron y caminaron unas cuadras, ya que tenían que llegar a la parada de autobús que las llevara al consultorio, Emily se acordó de que su amiga le había contado lo ocurrido con Tony:
- Oye...
- Quepe?
- Al fin cómo ocultaste lo de Tony?
- Jaja, fácil, Jack estaba tan borracho que ni siquiera se acordaba que había ido a una fiesta, al principio estaba sobrio y se acordó de que había visto a su primo, pero cuando le ganó el licor, su mente se borró y él estaba seguro de que yo dormí con él
- Que suertuda jaja, no tuviste ni que mentir porque él lo hizo por ti
- Exacto, eso fue una buena cuartada
- Y cómo quedaron las cosas después de eso?
- Normal, novios 
- Ah, que beio
- Lo shé... Y tú con Cristian?
- Él es lindo, se comporta lindo y demás, pero ya sabes que no puedo darle mi corazón entero estando enamorada de "Gomita" - La chica hizo comillas con los dedos al decir el apodo de su admirador secreto
- Tienes razón, pero pues hay muchas posibilidades, no? Pueden ser la misma persona, puede ser alguien que conoces, etcétera
- Es mi impresión o tú sabes algo?
- Yo? Si supiera te lo habría dicho hace mucho - Dijo Emery, riéndose en su interior por la ironía de lo que había dicho
- Okay, aunque sigo pensando que sabes algo
- Nop
Iban por la acera que limitaba con un parque, hablaban muy animadamente y Emery miraba hacia adelante mientras Emily chateaba con "Gomita", ninguna de las dos se dio cuenta de que había dos chicos caminando por la misma acera pero en el sentido contrario, mientras ellas iban, ellos venían, pero ellas no se habían equivocado de acera, esos chicos lo habían hecho, iban en una especie de "contravía", el chico que encaraba con Emily, también iba chateando, mientras que el otro iba por la calle distraído mirando un árbol con flores rosas y violetas, Emily suspendió su celular y el chico escribió un último mensaje, y antes de guardar su celular, ambos chocaron, sin mirarse, se agacharon y susurraron un "lo siento", ambos celulares cayeron bocabajo en el choque, el del chico había quedado encendido, el de la chica, apagado, ambos cogieron su celular y Emily se levantó, el chico se quedó amarrando sus zapatos, antes de que Emily pudiese ver al chico, Emery la tomó del brazo obligándola a correr:
- Corre! Ese es nuestro bús!
Ambas corrieron y alcanzaron a subirse y tomar asiento, Emily, al darse cuenta de que el celular estaba prendido, se dio cuenta de que ese no era su celular, y ella lo hubiese apagado y llevado a la policía para que allí lo reclamaran, pero algo en especial captó su atención, el celular estaba en Whatsapp y en un chat con el nombre de "Masmelo", ella subió hasta encontrar el primer mensaje, era él, había chocado con "Gomita" y no lo había visto:
- EEEEEMEEEERYYYYY!!!! - Gritó tan alto que todas las persona se le quedaron mirando - Lo siento
- Auch, mis oídos, qué pasó?
- Lee
- Hola... - Empezó a murmurar - Es él... Es tu Gomita - Dijo después de leer
- Exacto, lo viste? Viste cómo era?
- Cómo obtuviste su celular?
- Emery, no me jodas, no viste que nos chocamos?
- Con quién?
- EMERY!!! AGHHHH... ME CHOCAS, PUES CON ÉL
- OMG! OH MY GOD!
- No lo viste, verdad?
- No, estaba mirando los buses y al chico guapo parecido a Jack que miraba un árbol
- Ay Emery, no tienes remedio, pero espera... Eso quiere decir que...
- Él tiene tu celular - Terminó la frase por ella
- Exacto... Tienes este número?
- Déjame ver - Tomó el celular de Gomita y su celular, revisó en sus contactos - No lo tengo, ah numa, si lo tengo, pero lo tengo como "El acosador de mi befi" 
- Emery, qué es ese nombre, no mames
- Lo siento, es lo más adecuado para un acosador
- Wait, cuándo te escribió?
- Hace mucho, pero fue solo como una o dos veces
- Eso espero
- Celosa... - Tosió para disimular
- Qué...
- Oh mira, aquí nos bajamos
Hicieron frenar el bús y se bajaron, entraron al consultorio donde las atendió un doctor, el psicólogo al que Emery visitaba todos los fines de semana:
- Hola Emery
- Holap, traigo a una amiga, se llama Emily
- Y eso?
- Su mamá no la podía cuidar y me la encargó - Se rió y su amiga también 
- Es mentira, ella me pidió que la acompañara - Protestó Emily
- Vale, tomen asiento - Dijo Mark: Su psicólogo
Ambas se sentaron y él comenzó las preguntas hacia Emery, la cual respondía cosas sin sentido para Mark y graciosas para Emily:
- Y qué ves aquí?
- Really nigga? Veo... Una mancha de tinta
- Ninguna forma? 
Ella lo pensó
- Ah sí, veo un gato haciendo un twerk
Emily se pegó en la frente
- Bien Emery, respondiste lo mismo durante cinco consultas y no sé para qué sigues viniendo, veo que estás bien, ya no tienes pensamientos suicidas ni nada parecido
- Mi tía me obliga a venir
- Eres libre de escoger
- Mark, entiéndeme, me chantajea con alimento de dioses
- Eso es...?
- Nutella - Respondieron ambas chicas
- Ah, adictas a eso?
- Noooh, quién dijo?
- Jaja pues... Ustedes
- Sho? - Dijeron ambas al unísono nuevamente
- Sí, ushtedes
- Muy lindo y todo Markito, pero es la hora del té y los conejos me esperan, yo quedé en llevar el azúcar
- Emily... Verdad? - Le preguntó Mark a Em
- Síp 
- Cómo la aguantas?
- No lo sé, yo me hago esa pregunta todo el tiempo
- TRAIDORA! PERDERÁS LA CABEZA!
- Te dije que verte todas las películas de Alicia en un día te iba a afectar tu cerebrito
- Shhhhh, déjame ser felíz
- Tan perdida como Alicia. Tan loca como el sombrerero - Dijo Mark
- HEYYY!!! DE DÓNDE LA SACASTE!? Yo también la he escuchado, amo esa frase
- No sé, la escuché por ahí
- Ah... Bueno, ya me está llamando el sombrerero, me voy - Su teléfono sonaba en su bolsillo, una llamada de su tía, contestó - Aluu?
- Emery, dónde estás?
- Con Mark
- Y... Por qué?
- Porque tú me chantajeaste con Nu nu nutella
- Ah sí, cómo te fue?
- Bien, dijo que es muy normal que vea gatos haciendo un twerk y que ya no debería volver porque desperdicia su oro conmigo
- Su oro?
- El tiempo es oro, no?
- Ay Deos, más bien ven a la casa
- Oky doki
Colgaron y Emery miró a los otros presentes en el consultorio, los cuales la miraban a punto de reírse:
- Qué? - Preguntó
- Nada - Respondieron ambos
- Sí rosa, y yo nací ayer
- Rosa? - Preguntó Mark
- Melano - Respondió Emery riéndose
- What...
- Es el apellido de Rosa
- Sí, claro, adiós Emery, adiós Emily, espero verlas, pero no en consulta, no más gatos 
- Bye guapo - Respondió Emery
- Emery, tengo veinte años
- No es mucha la diferencia, yo tengo 16
- Sí, muy hermosa tú y todo, pero tengo novia, así que adiós
- Qué casualidad, yo también tengo novio, chauu
Salieron del consultorio y volvieron cada una a su casa, al llegar, Emily vio a Cristian jugando con Lian, se acercó y depositó un beso en la mejilla de Lian, y uno en los labios de Cristian:
- A que no adivinas qué me pasó hoy
- Dime - Respondió ella
- Hoy me choqué con una loca que íba por la acera equivocada e intercambiamos celulares, no alcancé a ver a la chica y sabrá Dios dónde vivirá
- Hey! A mi me pasó lo mismo hoy...
- Em... Déjame ver tu celular
Ella sacó del bolsillo el celular que recogió, que no era suyo, y se lo pasó a Cristian mientras él le entregaba el celular que tenía:
- Este... Este es mi celular... - Dijo ella cubriéndose la boca
- Y este... Es mío... - Respondió él - Em, dime que no viste nada
- Tú... Tú eres...
- Lo viste... - Ella asintió
- Tú... Me enamoraste como Cristian y como Gomita... Por qué no me lo dijiste?
- Porque te veías tan felíz cuando te hablaba a través de "Gomita" que no quise dañar esa felicidad
- Te he buscado por tanto tiempo - Dijo Emily abrazándolo y llorando en su pecho, pero no de tristeza, de emoción
- Y ya me encontraste...
- Sí Cristian, acepto ser tu novia, pero ya no más secretos, solo tú y yo, Gomita y Masmelo fueron el puente, pero ya hemos llegado al otro lado y ya no necesitamos ese puente
- Emily, me haces el hombre más felíz del mundo.
Ambos se besaron y duraron abrazados un buen tiempo, pero nada de eso hubiese sido posible sin la intervención de Gomita y Masmelo.