Capítulo 4

Narrador

-Jesmin......Dice Michael.
–¡Señor! 
-Te queria, bueno, te quiero preguntar. Tienes más familiares o éstas sola en este mundo.  

-Pues vera señor, como les conté al principió, después de la muerte de mis padres, me llevaron a un orfanato. Si tuviera algún familiar púes no los conozco. 

-Ahora te puedo hacer una pregunta yo papá, no mejor dicho, porqué le hacés ésas preguntas a Jesmin, si sabés que le duelen. Y no, ella no está sola, me tiene AMI y A nuestro BEBÉ. 

-Cariño, no por favor, está bien, estoy bien, además, tu papá tiene todo el derecho de hacerme cualquier pregunta. 

-Bueno, bueno ya basta, que está es la hora de desayunar, no la de interrogar. Dice Edilen. 

Michael se le queda mirando expectante. El quería hacerle muchas preguntas a está chica, que aunque sea un alma pura. Pura pero muy maltratada. Algo aun le faltaba al tan perceptivo abogado, el siente que está chica tiene un secreto oscuro. Pero que no ha sido culpa de ella, todos creen que Michael no quiere a Jesmin. Pero lo que tampoco saben es que en el fondo también la quiere proteger. 

Desde aquella vez que la chica hablo, a Michael se le derritio un pequeño tercio de su corazón de hielo, ya que también para el, fue algo nuevo, pero alavés muy extraño. 

Que ironía no, todos quieren ayudar a la pobre Jesmin, es un alma, un ser que es casi un angel, un angel que con solo hablar, o tan solo mirar, te envuelve en la compasión, en la ternura y en la belleza. Todos se quedan atrapados, en algo que ni ella misma conoce.