Hermano

Chris no es alguien muy atractivo, no es alguien carismático ni mucho menos alguien que recordarías si te lo presentan. No ha tenido novia en muchos años, la última de hecho le duró muy poco debido a lo extraño que este resultaba: todas las tardes salía a correr con su perro imaginario llamado Fred; solía decir "Buen provecho damas y caballeros" cada vez que comía incluso cuando se encontraba solo. Algo común en él era hablar de su hermano Demian (hermano que nunca nació puesto que su madre lo abortó); solía tener largas conversaciones con su madre por celular (algo imposible ya que su madre se hallaba en prisión por prostitución y la violencia que esta desbordaba sobre Chris cuando tenía 6 años).

Su hermana Anabel lo visitaba todo el tiempo y hablaba con él por horas; Chris no quería mucho a su hermana, pero nunca se lo dijo puesto que era la única persona sobre la faz de la tierra que lo quería y que se preocupaba por él. Sus padres adoptivos se habían hartado hacía tiempo de su escandaloso comportamiento, y no lo devolvieron al hogar de cuidados porque tenían una imagen de fieles cristianos caritativos que mantener; Anabel solía llevarle comida, unas hermosas Hydrangeas azules que a él tanto le maravillaban.

Anabel a diferencia de él era una joven hermosa, muy alegre y llena de vida; imposible de olvidar por donde la miraras. Popular en la Escuela de Juilliard, una de las escuelas más prestigiosas en el ámbito de las artes en todo el mundo. Si bien Anabel no era estadounidense, esta de desenvolvía muy bien en el idioma, de hecho hablaba 9 idiomas más aparte del inglés y español.

Chris tenía 8 años más que Anabel, pero esta ultima demostraba ser mucho más madura en todo aspecto existente, principalmente a la hora de comunicarse con otras personas.
Anabel amaba mucho a su hermano, no le importaba que este nunca reaccionase de ninguna forma a lo que ella le decía, de pequeña solía decir que se casaría con él, y como respuesta su hermano le ofrecía una enorme sonrisa casi completa puesto que su madre le rompió algunos dientes a base de golpes. Si bien Chris no deseaba que su hermana siguiera hablando, nunca la interrumpía, es más, no podía hacerlo; verla sonreír y ser feliz con cada noticia o anécdota que le decía era suficiente señal para él.

Si bien Chris tenía algún tipo de problema o trastorno psicológico quizá ocasionado por los golpes de su madre o quizá causado al intenso miedo y terror que solía sentir cuando esta se le acercaba. Sin duda podría decirse que era una especie de sociópata en potencia, le importaba un poco su pequeña hermana; si se esforzaba podía recordar los momentos en que su hermana lo salvaba de los niños que solían molestarlo, también podía recordar en momento en que le devolvió el favor y le rompió la mandíbula a base de golpes a un niño mayor que ella y menor que él que se encontraba molestándola.

Cuando no miraba fijamente a su hermana dejando un espacio vital de apenas pocos centímetros puesto que no conocía el concepto de espacio personal, miraba muy de cerca sus preciosas Hydrangeas, esas flores eran las únicas cosas que a él le gustaban, pero le molestaban que los únicos seres vivos que para él eran hermosos estuvieran muertas cuando llegaban a él.

Como Anabel conocía a su hermano, siempre se preocupaba de disculparse por comprar flores muertas para él, algo que si bien no llegaba a ninguna parte, agradecía muy en el fondo. Su amigo imaginario David se encontraba siempre acompañándolo, era un burro antropomórfico con una máscara humana cocida de pésima manera a su cabeza, era una vista horrenda ya que el gran hocico del animal deformaba de sobremanera la cara humana; le gustaba mucho vestir de traje negro con una corbata dorada, su cola estaba cortada a la mitad, y no poseía pelo en ninguna parte de su cuerpo.

Cuando Chris conoció a David, este tenía 2 meses de nacido, se encontraba tirado en un contenedor de basura envuelto en una bolsa negra para desechos. Chris lo vio y enseguida supo que ese ser sería su mejor amigo; el burro hacía un ruido similar al de gritos de dolor cada vez que abría la boca. Cuando se lo llevó en brazos ya que David nunca fue un ser alto, de hecho medía solo 86 centímetros, tuvo mucho cuidado de que nadie quisiera robárselo al verlo, así que tomó la bolsa que lo cubría y tapó a su amigo con ella. Chris recuerda perfectamente como tenía que esconder a su amigo cuando su madre abría la puerta, a veces debajo de la cama, otras veces en su ropero.

David odiaba a la madre de su amigo más que a su propia madre, siempre le decía a su amigo que debían matarla, de cualquier manera posible, y luego irían por su propia madre a quién mataría él mismo con el trozo de vidrio que usó para cortar su cordón umbilical. Chris se negaba rotundamente a matar a su madre, así que David le decía "Entonces matemos solo a la mía".
Anabel conocía a David desde hacía años, lo vio en un dibujo que Chris hizo una vez, ese ser amorfo que parecía una mezcla de caballo calvo con una deforme máscara era lo más horrible que ella había visto en su vida; así que cuando se enteró de dónde venía esa criatura decidió alejarla lo más posible de su hermano. Pero nunca lo logró, de hecho, tuvo problemas con su hermano debido a que este quería más a su amigo que a ella y no pensaba dejar que los separaran.

En contadas ocasiones David le aconsejaba a Chris que matase a su hermana, su frase favorita era "Quiere separarnos, hay que deshacerse de ella cuanto antes"; pero Chris se negaba a matar a su hermana. Algo que hasta hoy día le parece una buena decisión, nunca le tocó un pelo a su hermana, ni aunque David se lo pidiera de rodillas. Cuando Chris se aburre simplemente vuela en su imaginación, vuela por el mundo, un mundo gris y vacío, con seres tristes y patéticos. Chris sabe que el único cuerdo en el mundo es él; su hermana Anabel tiene el honor de ser la persona más extraña que ha conocido: una chica linda, alegre y social. Algo inconcebible en el mundo que Chris ve; las demás personas no pueden ver lo que él, no ven la verdad en los ojos, solo hablan mentiras como cualquier animal asqueroso.