Hijos De La Desgracia: El Camino De Celestino.

Prefacio

Estimados y estimadas, o estimadas y estimados, distinguidos damas y caballeros lo suficientemente doctos como para posar sus ojos en estas palabras, soy yo nuevamente, Fabia, y les presento la continuación de mi ilustre creación, la secuela de la epopeya titulada "Hijos De La Desgracia", obra que he notado ha recibido el beneplácito de muchos, dado que las mil copias que se forjaron ya han hallado dueño. Aguardo con ansia que las resguarden con ternura en sus hogares, para que las venideras generaciones de este noble reino puedan deleitarse con su contenido.

En las páginas venideras, sumidos en el encanto de los renglones que urden el relato, nos hallaremos inmersos en las vicisitudes de Celestino Piedra Caliza, continuando el hilo de los sucesos postreros de la obra "Hijos de la desgracia: Preludio". Dando inicio al tomo dos de esta larga saga, el cual obtiene el nombre de «Hijos De La Desgracia: El Camino De Celestino». 

En este nuevo escenario, para Celestino han transcurrido cuatro años durante los cuales ha sido sometido a un exigente adiestramiento bajo la tutela de su mentor y amigo, el Comandante Laureano. A partir de esta instrucción, ha emprendido misiones en diversas partes del reino, lo que le ha permitido entablar encuentros con nuevos personajes, mantener sus relaciones con aquellos ya conocidos y poner de manifiesto aspectos de su personalidad que contrastan con los rasgos del guerrero convencional.

En este volumen, en el cual me vi forzada a compartir interminables veladas con su protagonista, a fin de que narrase con todo esmero cada una de sus vivencias, he conseguido compilar de forma estrictamente cronológica todas sus encomiendas y experiencias. Cómo se sintió y cómo afrontó cada encrucijada que el destino le dispuso, lo hizo, claro está, sin gran entusiasmo. Así, me vi compelida a persuadirlo, pues yo, Fabia, nunca permitiría que una narración tan eximia cayera en el olvido. Aconsejo a aquellos menos versados en sus peripecias que revisen mis anteriores obras, las cuales sin duda encontrarán en los anaqueles de la biblioteca del Conocimiento Perdido, ubicada en el corazón de la Ciudad Real de Victoria Occasum. Mientras redacto esta introducción, aquí, en el décimo nivel del Bastión Verdegrana, mientras saboreo un té exquisito, solo puedo afirmar que la redacción de esta crónica es para mí una auténtica delicia.

Con refinamiento y fervor,

Fabia "Pluma Rutilante"
 




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.