Un día en un año no muy lejano,y un chico llamado Steven después de mucho tiempo, fue a visitar a su madre, demoro no más de 7 horas ya que ella vivía muy lejos al gegar a la casa de su madre, el fue muy bien recibido.
Pero Steven se dio cuenta de que su madre, tenía un comportamiento un tanto raro ya que siempre se quedaba mirando a la pared, por las noches gritaba entre otras cosas. Un día Steven paso por el cuarto de su madre y de dio cuenta que abia un olor tan putrefacto, que no aguanto. Y se fue a donde una adivina a saver sobre su madre, al yegar a donde la adivina se dio cuenta que ella decía cosas en cifra, y llego a pensar que la adivina, le estaba tomando del pelo y enseguida le preguntó.
-Steven: que debo hacer para vivir más?
. Y la adivina le dijo con voz aguda
-Adivina: solo debes decir...NO... TENGO... AMBRE.
en ese momento Steven pensó que la adivina era loca, y se fue al llegar la casa de su madre al llegar a esta ella lo recibió con una sopa. Y Steven se la tomó enseguida y al terminarla Steven le dio un orrible dolor de barriga y se acordó de las palabras de la adivina pero...
Ya era muy tarde el abia muerto por envenenamiento.
Y aquel olor putrefacto del cuarto de la madre era...
LA VERDADERA... MADRE.
. Fin