(Perspectiva de Hanna)
Después de lo ocurrido con Alex, el gobierno decidió mandarme a Costa Rica para mantenerme a salvo mientras me indica como pagare mi deuda con ellos, es una pena que Alex este en una cárcel sin salida por ahora debo de ir a la tienda por más suministros para mi subsistencia.
El caso que tuvimos en Guatemala fue tan grande que hubo noticieros internacionales trasmitiendo todo sobre el día del juicio, por ahora aquí no soy tan reconocida, pero trato de ocultarme.
Me subo en el transporte público que me lleva a la ciudad para poder ir a un market: necesito botellas de agua, frutas, verduras, cereal, leche, comida enlatada y para calentar en el microondas, al terminar pago con mi tarjeta de débito y camino hasta la calle para tomar el siguiente bus que me lleve a casa.
Escucho pasos que siguen mi ruta, trato de despistarlos cruzando la calle, pero sigo escuchándolos, cuando volteo a ver me doy cuenta de que no hay nadie y que esta todo desolado, sigo mi camino escuchando esos ruidos hasta que una especie de sujeto me toma de la cabeza y me lanza al suelo.
Activo mi traje para lanzarle cartas explosivas mientras corro veo más sujetos similares y es entonces que comienzo a subir el edificio hasta llegar al tercer piso, saco mis abanicos para lanzárselos, pero logran evadirlos uno se acerca y me lanza a la calle, pero en ese momento algo me atrapa y me lleva a tierra firme.
—Estas bien— dice.
—Si— respondo.
—Te protegeremos— dice
—¿Quienes? — digo.
En ese momento veo como un grupo de personas comienza a pelear con esos sujetos que tratan de secuestrarme, solo veo que sacan una vara con martillo, lanzan munición con forma de halcón, y combaten con mucha rapidez.
Algo me toma por los hombros y me arrastra para poner su mano enfrente para luego succionarme algo, siento que es algo vital en mi pero no puedo identificarlos así que trato de tomar una de mis cartas explosivas hasta que alguien lanza una especie de boomerang.
—Suéltalo rastreador— dice.
Lanzo mi carta mientras trato de pelear con él, solo veo que me toma y me apunta con una pistola.
—Humano idiota, ella es uno de los neo-humanos así que trata de no hacer una estupidez— dice el rastreador.
Luego de eso él lo lanza mientras yo golpeo al rastreador con un codazo en el abdomen, el boomergan le atraviesa media cara mientras el sujeto lo toma.
—¿Quién eres? — digo.
—Soy Gercowith, soldado del proyecto elite—.
—Es un gusto— digo.
Caminamos con los demás miembros que me ayudaron: Leonidas, Guismo, Josheph y PIA quienes son miembros del proyecto elite, una organización que nunca escuche en mi vida, pero si están aquí es por algo.
—¿Qué hacen aquí? — pregunto.
—Al parecer un invasor galáctico viene a la tierra por algo conocido como el espíritu de los neo-humanos— dice PIA.
—Esa es la razón de poner su mano en mi frente— digo.
—Ven te lo explicaremos todo mientras llegamos a la base— dice Gercowith.
Gercowith me explica lo que quiere conseguir el general crusher, el espíritu que posee al parecer es el de alguien llamado Karana quien controlaba el elemento del agua, me llevan a la base en Irlanda en donde conoceré a Baruka quien está financiando todo el equipamiento, armamento y necesidades de los soldados de la elite.
Desde que estoy en Costa Rica no he tenido acceso a la información ocurrida en mi país, tampoco tengo noticias de Alex.
—¿Cómo estas Hanna? — dice Baruka.
—Creo que tienes que ver a alguien— dice.
Nos dirigimos a la sala principal en donde me encuentro con Alex y Kendrix, ambos me abrazan mientras se me sale una lagrima.
—¿Qué haces aquí idiota? — digo con cariño.
—Me sacaron de la cárcel para protegerte, pero veo que mis amigos del proyecto elite te han salvado— dice Alex.
— Es conmovedor pero nuestros anfitriones Richarson y Sitron tienen que darnos una información— dice Baruka.
Vamos a la sala de estrategias de este lugar que es una zona tecnológica con un grupo de personas trabajando, cada una tiene la tarea de monitorear los sucesos que ocurren en cada país del mundo algo parece que esta sucediendo.
Sitron activa los mapas holográficos para explicarnos la situación.
— Hace tres meses se recibieron informes de anomalías en la luna, entre ellos una especie de excavación. Juno y sus amigos fueron a explorar, pero se toparon con el general Crusher quien en su búsqueda de los espíritus tuvo prisioneros a nuestros aliados de la fuerza gemanta. Unas semanas atrás recibimos un mensaje de la guardia nacional gemanta en la cual mandaron una alerta sobre una flota galáctica de guerreros de Crusher— dice Sitron.
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Editado: 27.03.2019