RESILIENCIA

Artrosis degenerativa, Narcolepsia, una operación de vesícula, infiltraciones en la columna, exámenes molestos y dolorosos. Son solo algunas de las cosas por las que ha tenido que pasar mi madre, esa mujer valiente que lo único que ha hecho es ayudarme, entonces me pregunto: ¿Por qué a las mejores personas les pasan cosas como estas?, muchas veces me he enojado con Dios por esto, y creo que aún sigo haciéndolo, le refuto una y otra vez por qué ella no tiene una vida tranquila y feliz después de todo lo sufrido ¿es que acaso no lo merece?, sin embargo cuando me enojo tanto con él por verla sufrir de esta manera ella siempre me dice: que tal vez ella debe enseñarle a las personas por medio de su dolor, no les voy a mentir, eso me enoja aún más, me enoja que siga resistiendo de esa manera, me enoja que lo tome con calma, me enoja que a pesar de todo siga creyendo, me enoja que no se desborone frente a mí, que resista, que no refute. Pero ella no es así, entre más cosas le pasan, cuenta con más fe, cuenta con más voluntad, con más resistencia. Ella es tan resiliente que algunas veces me asusta, siento que ella no es como todos nosotros, es como un Ángel en la tierra, como los que describen en los mitos, en la historia o en la biblia, y le creo, le creo que ha venido a este mundo a luchar, a amar y a enseñar, a mí me ha enseñado a ser paciente a tener fuerza, pero lo que me sigue enseñando aun es que “no todo el que sufre está pagando una condena, simplemente puede ser como un maestro, y enseñarnos algo que aún no hemos aprendido. Muchas veces de niña solía pensar que ella estaba junto a otros Ángeles en el cielo, y Dios dijo: quien quiere quedarse con esa niña para enseñarle sobre mí, y ella dijo: -Yo. Entonces el advirtió: será duro, sufrirás mucho, y sin embargo ella siguió queriendo venir a este mundo tan duro, quiso estar a mi lado a pesar de todo.

Nuestro lazo siempre ha sido muy fuerte, desde pequeña siempre andaba pegada a ella, ahora estamos juntas, no tanto como antes pero aun así considero que nuestro lazo es inquebrantable, me gusta hablar con ella, contarle todo porque yo sé que ella me entiende, algunas veces nos enojamos, algunas veces siento que ella está enojada conmigo o no me quiere ver, pero no es así, solo tiene dolor y está cansada, y yo muchas veces no me pongo en su lugar, un día me dedico una canción que se llama “No me creas” de -Alberto Plaza. Esta es una parte de la letra

No me creas cuando digo que el cansancio esta venciéndome

No creas

Si por un momento dejo de nadar en este río nada manso

No me creas cuando el mundo se derrumba ante mis ojos

Y no aguanto

No me creas cuando sientas que este frágil corazón

Se ha vuelto de metal

Dame un beso cuando veas que la fuerza se me fue

Y veras que me levanto pues un beso tuyo cura todo

Cura todo.

Cuando la escuche sentí que no la estaba queriendo lo suficiente, ella solo quería que entendiera que no estaba enojada conmigo, simplemente vive con un dolor insoportable todos los días, y también carga sus propios problemas. Siempre hemos tenido canciones como estas, porque solo la música expresa lo que las palabras no pueden decir, pero la canción que nos defines es: “Luisa María” de -Juan Gabriel, siempre me la canta, una vez fuimos a un paseo, en el hotel había un karaoke, y nos atrevimos a pasar y cantamos esa canción. Dos o tres días después el cantante murió, y mi mami me dijo que le habíamos hecho ese homenaje, y era cierto.

A ella le gusta esa canción porque es un Ángel nacido en diciembre, “el 22 del mes doceavo vi nacer a un Ángel más hermoso que el amanecer”, y porque el 22 del mes doceavo como dice la canción, ella y yo nos conocimos.